LAS EXPECTATIVAS que tienen los niños de sus actividades vacacionales se traducen en preocupaciones para los padres por cuanto representan  inversión económica y de tiempo, ya que cada uno de los pasatiempos requiere de total vigilancia de los padres, y más cuando están ligadas a las herramientas tecnológicas.

Como se conoce, si esa tecnología no es usada correctamente puede llegar a ser peligrosas, dado que la red no tiene una restricción que impida a los mejores a acceder a las páginas web, corriendo el riesgo de caer en las manos de personas inescrupulosas que se pueden aprovechar de la inocencia de los niños.

El primer consejo que dan los expertos es seleccionar bien las actividades y aprender a decirles no a algunas. Los niños deben comprender que no pueden tenerlo todo, pero siempre conociendo el motivo que lleva a los padres a tomar la decisión, para que no se confundan y crean que la medida es por gusto propio o por querer reprimirlos.

Norberto Bohórquez Joya, psicólogo clínico experto en familia aconseja no comprarles todo lo que quieren.Los límites son necesarios. Aprobar en exceso está lejos de darles bienestar y felicidad.

Algunos padres creen que porque tienen el poder adquisitivo deben comprarles a sus hijos cada una de las cosas que ellos demandan, pero este es un pensamiento herrado, puesto que se acostumbrarán a recibir siempre lo que quieran, y cuando no sea posible se podría ocasionar pataletas que a la larga podría afectar el comportamiento del niño, tanto en el colegio como en su ámbito social.

Por esta razón, es importante crear actividades divertidas y que despejen la mente de los pequeños, pero sin necesidad de hacer uso de muchos elementos, pues no es necesario atenerse de los tan esperados regalos navideños para mantener ocupado a los pequeños o crear el plan de acción. Pero si usted no conoce las actividades que pueden mantener ocupados a sus hijos con diversión y al mismo tiempo repasando sus actividades escolares, aquí las recomendaciones.

Recomendaciones

·         Divertirse en casa: en el colegio los chicos tienen todo programado. En vacaciones el descanso es válido, así que no tienen por qué programarle todas las horas, pero si cumplir algunas actividades básicas que les permita estar alejados de la pereza, pues así, cuando regrese al colegio no será difícil acostumbrarse nuevamente.

·         La televisión: ver televisión es uno de los pasatiempos preferidos para los niños. Por lo que el especialista opina que no es una buena alternativa, siempre y cuando sea una herramienta usada correctamente. No se trata de abandonarlos frente a la pantalla y dejarlos hasta que se cansen de ver o se queden dormidos, pues los limites tanto de programación y de horario son fundamentales, ya que la programación puede tener léxico inapropiado para un menos, así como las imágenes.

·         No obstante, dejarlos mucho tiempo en frente de una pantalla podría significar para ellos un sinónimo de descuido o desapego, ya que los niños necesitan interactuar con otras personas, en especial con sus padres y que mejor que con el televisor apagado.

·         La computadora: es un arma de doble filo. Usarla en exceso puede ser malo pero algunos de los entretenimientos que ofrece son divertidos y estimulan la creatividad de los chicos, por lo que su uso debe estar totalmente vigilado y así evitar que accedan a páginas web que son inapropiadas para menores.

·         Cocinar recetas fáciles es barato y puede resultar muy divertido. Pero recuerde que por más sencillas que sean las recetas, estas deben ser preparadas con la supervisión de un adulto responsable, puesto que la cocina tiene elementos que son peligrosos, como la estufa y los cuchillos.

·         Juegos de mesa: pueden ser útiles para interactuar entre hermanos, primos y vecinos, así como para estimular su destreza mental y descubrir de forma didáctica las fortalezas y debilidades de los niños.

·         Estimular la lectura: durante las vacaciones no se debe descuidar esta creativa e importante actividad, puesto que en la etapa del aprendizaje es muy común que los pequeños olviden rápidamente las actividades que están en proceso de aprendizaje.

·         Hablar con los hijos: pueden aprovecharse los fines de semana, las horas de comida, el teléfono, el WhatsApp y el Skype, para mantener activa las charlas y el seguimiento con los pequeños durante sus períodos vacacionales, preguntando como se sienten y que actividades les gustaría realizar.

·         Estimular a los niños dentro de las habilidades e intereses que ellos tienen, según el experto esto tiene un doble beneficio porque potencializa su desarrollo y le transmite al niño que los adultos reconocen y valoran sus intereses.

Por último, salidas, paseos, actividades lúdicas, asistir a cine, teatro, bibliotecas y lo más importante, permitirles jugar.