EL PAISAJE de la sabana es el claro protagonista de la obra de la cubana Lydia Rubio, quien presenta su obra en la galería LaLocalidad hasta el 28 de este mes.  Los libros en donde quedaron registrados las exploraciones en Colombia de Alexander von Humboldt y Frederick Church, entre otros títulos, fueron su inspiración.

Con respecto a esta muestra, el curador de arte Eduardo Serrano asegura que “Lydia Rubio mira esta zona como una región sugerente, como un lugar privilegiado que estimula la creatividad, y vuelve a representarla con conceptos actualizados y con argumentos particulares, novedosos y enriquecedores”. La artista cubana dialogó con EL NUEVO SIGLO de su obra y de cuál es la reflexión que quiere dejarle a los espectadores.

EL NUEVO SIGLO: ¿Por qué Genius Loci: La sabana?

LYDIA RUBIO:Quiere decir “espíritu de un lugar”, en latín.

ENS: ¿Con su obra está planteando alguna reflexión o crítica?

LR:La obra resulta como un tipo de apropiación, como dice Eduardo Serrano: un volver mío a la sabana, el descubrir, el poseer un paisaje que me impresionó por su fuerza, su escala y geometría, su magia.  La reflexión es sobre las maneras de percibir y representar la naturaleza, que siempre está cambiando.

ENS: ¿Un trabajo hiperrealista?

LR:No es hiperrealista. El tipo de representación que he escogido tiende al realismo pero es una interpretación, es decir una pintura primero y luego una representación, pero es un trabajo de técnica detallada en óleo no muy común hoy.

ENS: ¿En qué encontró inspiración para este trabajo y por qué?

LR:Nací en Cuba, he viajado mucho, pero nunca había vivido cerca de lugares de montaña. Creo que al ver la sabana o los cerros de Bogotá me impresioné tanto como Humboldt o Frederick Church. No solo existe el campo quemado o minado, el campo de cicatrices, también existe el otro apacible que nos lleva a la contemplación y que a veces ni notamos.

ENS: ¿Esta muestra es continuación a todo su proceso creativo o es algo distinto?

LR:El paisaje como tema ha estado presente en mi trabajo en diferentes etapas, he realizado dos series anteriores, la última fue en el 2001 sobre Cuba. Siempre pensé que ese tema me daba la libertad de escoger expresiones pictóricas desde lo abstracto hasta lo concreto. Mis primeras obras eran paisajes doblados o modulares en polípticos, tal como los de esta muestra. He utilizado también, como parte de mi sistema de trabajo, la palabra, la letra y los números como elementos integrales de la pintura, estos me ayudan a cambiar instalaciones o señalar significados como en el díptico Prohibido-Permitido. 

ENS: ¿Hace cuánto tiempo está concebido el proyecto Genius Loci: La Sabana y cómo fue el proceso?  

LR:Empecé a pensar en este proyecto desde el 2012 cuando compré los libros sobre Humboldt y leí sus comentarios, como también el libro de Church en Colombia y otros textos sobre la representación del territorio, mapas y paisaje, que tengo desde hace tiempo.   Me interesan los libros de viaje que mezclan dibujos y textos, he hecho varios sobre Cuba, Perú, la India. El libro demuestra la razón detrás de la obra y las diversas instalaciones.

ENS: ¿Para qué hacer un proyecto como este?

LR:Porque visualicé sus posibles resultados, también por puro placer y luego por el reto. No es común dentro del arte contemporáneo un proyecto de pintura y menos de paisaje que apunta a lo poético y no a lo político. Una obra independiente de tendencias, o modas. Hacer una obra así contra lo bendito, utilizando nuevos conceptos es para mí todo un reto artístico.