Pese a alta inflación, Emisor baja más los intereses para prender la economía | El Nuevo Siglo
EL GERENTE del Emisor, Leonardo Villar, reiteró el llamado a la cautela con las tasas de interés. /Banco de la República
Miércoles, 31 de Julio de 2024
Redacción Economía

CON EL objetivo de darle un empujón a la economía, el Banco de la República, decidió bajar otro 0,5% las tasas de interés para dejarlas en 10,75%. Con esta medida, el Emisor suavizó su política monetaria en 1% en menos de dos meses.

El gerente del Emisor, Leonardo Villar, dijo que la decisión se tomó teniendo en cuenta que “la inflación anual en junio se mantuvo estable en 7,2%, en línea con lo esperado. La inflación anual sin alimentos ni regulados descendió de 6,1% a 6,0% y la inflación anual de alimentos presentó un nuevo incremento de 4,4% a 5,3%, por fenómenos climáticos, mientras que la inflación de regulados se redujo de 13,7% a 13,3%”.

Sostuvo, asimismo, que en julio la encuesta mensual aplicada por el Banco a los analistas reportó en la mediana unas expectativas de inflación estables, mientras que aquellas que se derivan de los mercados de deuda pública cayeron para todos los plazos.

Señaló que la decisión adoptada en la sesión “ofrece un nuevo impulso a la recuperación del crecimiento económico y mantiene la prudencia requerida, dados los riesgos que subsisten sobre el comportamiento de la inflación”.

El crecimiento

Por otra parte, el directivo anunció que “el PIB habría continuado su senda de recuperación durante el segundo trimestre, con comportamientos dispares entre sectores. El equipo técnico prevé que los niveles de actividad económica continuarían recuperándose para alcanzar un crecimiento de 1,8% en 2024”.

Por su parte, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, reiteró que “la expectativa es que el IPC cierre el año entre 5% y 5.5%, y que la tasa del Emisor culmine en 8,5%”.

Ante la decisión del Banco de la República de reducir nuevamente las tasas de interés, la presidenta de la Cámara Colombo Americana, AmCham Colombia, María Claudia Lacouture, dijo a EL NUEVO SIGLO, que “la reciente reducción de la tasa de interés en 50 puntos básicos, situándola en 10,75%, por parte del Banco de la República, es un avance positivo. Sin embargo, el contexto económico de Colombia exige medidas adicionales que impulsen la economía, fomenten el consumo y mejoren la generación de empleo. Promover el acceso al crédito es esencial para fortalecer el poder adquisitivo”.

Sostuvo que “es indispensable complementar esta reducción con acciones que generen certeza y confianza, construidas a través de un consenso resultado de debates respetuosos que busquen acciones de corto plazo y realizables. Un diálogo abierto entre todos los actores económicos es crucial para restaurar la confianza en el sistema empresarial y generar bienestar para todos los colombianos”.

La división

Por su parte, Alejandro Reyes, economista principal de BBVA Research para Colombia, señaló a este Diario, que “el balance de la votación continúa evidenciando una marcada división entre los miembros por la velocidad del ajuste y por el momento no se evidencian cambios significativos en las posturas de los dos grupos. Entre los factores internos se resalta una revisión del crecimiento al alza que puede tener algún impacto, no mayor, en la brecha del producto. Esto lo acompaña una inflación que se ha mantenido estable en los últimos meses, pero sin afectar las expectativas de inflación”.

Sostiene el economista que “así, no hay cambios en el frente local que justifiquen, al momento, una aceleración en la reducción de tasas. Por el otro lado, entre los factores externos, se destaca una postura más acomodaticia de los principales bancos centrales, en especial la FED, en lo que resta del año. Una postura que, de materializarse, podría favorecer una mayor velocidad en las reducciones de tasas a nivel local”.

La tendencia

Indica Reyes que “con esto en mente, la evolución de los indicadores locales en los próximos dos meses es de elevada importancia para la postura de la política monetaria. Esperamos se reanude la tendencia bajista en la inflación total, y continúe esta tendencia en la inflación básica en el mes de julio. Al tiempo se espera que los datos de actividad continúen mostrando alguna recuperación, pero con marcadas diferencias entre sectores, en dónde se anticipa que los sectores de servicios comenzarán a mostrar menor dinámica, lo que consideramos reducirá la presión en la inflación y en conjunto favorecerá la posibilidad de una aceleración en la reducción de tasas”.

Dice el economista que “con todo, continuamos esperando una rebaja de la tasa de política al 8,5% para el cierre de 2024, evolución consistente con rebajas de tasas de la FED en septiembre y diciembre de este año y con una senda bajista de inflación total y básica en lo que resta del año”.

Asimismo, en un análisis enviado a este Diario por el equipo de investigadores del Bancolombia, aseguran que “este nuevo recorte de 50 puntos básicos responde al espacio que brinda el elevado nivel de la tasa de interés real. Las métricas de tasa de interés real ex ante se mantienen todas por encima de 6,2% tal que, incluso después del recorte, se trata de una postura claramente contractiva (la estimación de tasa real neutral del Emisor es 2,4%)”.

Cautela

Manifiestan los economistas, que “así pues, se mantiene en firme compromiso de lograr la convergencia de la inflación, pues la cautela domina en la toma de decisiones. La consistente caída de las medidas de inflación subyacentes permanece como un factor a favor de la continuidad de los recortes. El comunicado resaltó cómo la inflación anual sin alimentos y sin alimentos ni regulados han retrocedido de manera ininterrumpida hasta 7,70% y 6,08%, a pesar de que la inflación total anual se estabilizó en mayo y tuvo un leve repunte en junio”.

Añaden los analistas, que “tanto la junta como el mercado prevén que el proceso desinflacionario prosiga durante la segunda parte del año, aunque con una menor velocidad de convergencia. Las expectativas de inflación de corto plazo continúan en descenso, mientras las de mediano plazo permanecen dentro del rango de tolerancia (2%-4%). La expectativa de inflación anual a 12 meses de los analistas consultados por el Banco mantuvo la tendencia a la baja, al caer 7 puntos básicos hasta 4,23% anual. Para el horizonte a 24 meses, la expectativa se mantuvo estable en 3,45%”.

Evolución financiera

Los analistas consideran que “también resalta la evolución reciente del crecimiento económico y de las condiciones financieras globales como factores que reducen la necesidad de acelerar el ritmo de recortes. Los resultados de actividad económica (ISE y mercado laboral) sugieren que la economía ya habría empezado a recuperarse, a pesar del contexto de tasas de interés, aunque en descenso, aún altas. De igual forma, las condiciones externas de financiamiento se han tornado menos retadoras en la medida que ha ganado terreno la probabilidad de (al menos) 2 recortes de la tasa FED en lo que queda del año. Esta decisión va en línea con nuestra visión de una tasa de 8,75% a fin de 2024 y recortes de 75 puntos en la segunda parte del año, que esperamos se materialicen en las reuniones de septiembre y octubre”.