EL PRESIDENTE de la República Gustavo Petro confirmó que el Gobierno citará a sesiones extras al Congreso de la República, para concluir el segundo debate de la reforma a la salud 2.0 que se realiza en la plenaria de la Cámara de Representantes. Pese a que la fecha aún no se ha confirmado, ya que el decreto no ha sido expedido, estas sesiones arrancarían los primeros días de febrero.
En ese sentido, EL NUEVO SIGLO consultó con varios representantes para conocer si hay ambiente político para hacer las sesiones extra y aprobar la iniciativa.
El representante de Cambio Radical, Oscar Campo, explicó, al respecto que algunas afirmaciones del presidente Petro sobre el sistema de salud, han generado mal ambiente sobre el nuevo sistema que propone la reforma que discute el Congreso. Sostuvo que “el 70% de los afiliados están en EPS intervenidas por el Gobierno nacional, siendo un reflejo del colapso generado por las medidas centralistas y la falta de gestión eficiente”.
Además, dijo que “en el Cauca, sí que sabemos del caos en que está la salud. Aquí los pacientes se ven sometidos a interminables filas desde la madrugada para reclamar sus medicamentos; son horas de espera para escuchar que no hay disponibilidad o para recibir una parte de su fórmula médica. Mentir, mentir, que algo queda. No, el lenguaje artificioso del presidente esconde la dura realidad que hoy se padece en los territorios debido al “Shu Shu Shu” y a la obsesión para estatizar la salud en beneficio de la reforma que discute el Congreso”.
A su turno, el congresista por el Centro Democrático, Andrés Forera, advirtió que “sin importar si va a ser en sesiones ordinarias o extraordinarias, vamos a seguir dando el debate técnico de la reforma a la salud y le seguiremos explicando al país por qué este proyecto es inconveniente. Pero más allá de eso, el presidente no puede utilizar la discusión en el Congreso como una “cortina de humo” para tapar la crisis sanitaria que él mismo ha causado junto con su ministro, retrasando los pagos de presupuestos máximos a pacientes de alto costo y creciendo de manera insuficiente la UPC para el año 2025 por debajo del salario mínimo, afectando la prestación de servicios y poniendo en riesgo la vida de miles de colombianos”.
Otras bancadas advierten
Así mismo, el legislador Víctor Salcedo del Partido de La U dijo que “presidente, en ordinarias o en extras la discusión se tiene que dar de cara al país, con las asociaciones de pacientes, con el recurso humano en salud, con las asociaciones de hospitales, con las EPS. Un llamado al Gobierno nacional para que antes de convocar a extras sería bueno que el presidente pidiera un informe al Ministerio de Salud y a la Adres de la deuda en el sistema, insuficiencia en la UPC. Estamos listos para extras u ordinarias y resolver el tema de salud en Colombia”.
En ese mismo sentido, la representante Jennifer Pedraza de la Coalición Centro Esperanza, explicó que “esta reforma es mucho peor. Primero porque no entramos con una en blanco, sino que el Gobierno ya ha venido implementando la propuesta de reforma a la salud que discute la Cámara y hoy ya podemos decir que ha habido pésimos resultados; por ejemplo, lo que ocurrió con el modelo de salud de los maestros que aún sigue sin resolverse, o por ejemplo el escándalo de corrupción en el que la Adres le giró 25.000 millones de pesos a EPS fantasma y cómo pretenden que creamos que este modelo que propone esto sin fortalecer Adres, no va a seguir incurriendo en estos modelos de corrupción y generando mal ambiente sobre el debate”.
Frente a los argumentos expresados por Forero, la congresista, Martha Alfonso de Alianza Verde, dijo: “Lo que Forero ha llamado fragmentación de la UPC, son cuentas diferenciadas para el uso y destinación específica. Evitando carteles como el de la hemofilia, la financiación de grupos armados con recursos de la salud y la corrupción. Urge la aprobación de este proyecto a fin de garantizar la transparencia y la eficiencia de los recursos para el cuidado de la vida”.