Hábitos recomendados para manejar el síndrome metabólico | El Nuevo Siglo
Diabetes, enfermedades del corazón, accidentes cerebrovasculares y alzhéimer son algunas patologías que pueden aparecer si no hay un cuidado en la alimentación.
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Viernes, 12 de Febrero de 2021
Redacción Cultura

Cada vez existe más conciencia acerca de las causas que aumentan la posibilidad de desarrollar diabetes, hipertensión, enfermedades del corazón y circulatorias, ataques cardíacos, accidentes cerebrovasculares y alzhéimer.

Precisamente, al conjunto de factores de riesgo asociados a estas enfermedades, se le conoce como síndrome metabólico y, aunque este no tiene síntomas evidentes, se ha identificado que el consumo elevado de carbohidratos, azúcar y el sedentarismo son las principales causas para padecerlo.  

Dentro de los factores de riesgos que componen el síndrome metabólico, se encuentran:  

  • La obesidad porque es un indicador de riesgo cardiovascular. Esta puede determinarse por el criterio del índice de masa corporal o por el porcentaje de grasa, pero, si usted quiere saberlo de forma más sencilla, puede medir el perímetro abdominal y si este se encuentra por encima de 80 centímetros para mujeres o de 90 centímetros para hombres, significa que existe sobrepeso.  
  • La resistencia a la insulina es otro de los factores asociados a este síndrome pues, entre más azúcar se consuma, más insulina se libera. El problema se manifiesta cuando esas elevadas cantidades de glucosa presionan el trabajo del páncreas, ocasionando que se deteriore la calidad de la insulina que se produce y su capacidad de transporte.  
  • Los triglicéridos altos que son el resultado del consumo en exceso de carbohidratos. Tenga en cuenta que si los triglicéridos se encuentran elevados, la insulina posiblemente también lo está.  
  • La disminución del HDL o colesterol protector que se relaciona principalmente con el sedentarismo y la mala alimentación. Esta proteína es fundamental para eliminar el exceso de colesterol que se encuentra en los tejidos.   
  • El aumento de la presión arterial que se asocia con el tejido adiposo o graso pues, si la presión en las paredes de las arterias es muy alta, el corazón tendrá que trabajar más para poder bombear la sangre, lo que ocasiona que, con el paso del tiempo, este se debilite y aumente su tamaño.   

De por sí tener solo uno de los factores de riesgo mencionados requiere atención, pero padecer el síndrome metabólico, es decir, la combinación de estos, es una alerta clara de que enfermedades que afectan gravemente la salud y calidad de vida de las personas, se podrían presentar.

Al respecto, el doctor Óscar Manuel Alba Mendoza, internista endocrinólogo con posgrado en epidemiología clínica, adscrito a Colsanitas, explica que “las medidas no farmacológicas han demostrado tener mucho más impacto desde el punto de vista de prevención que los medicamentos. Se trata de llevar un estilo de vida saludable”.  

Controlar los factores de riesgo asociados al síndrome metabólico es fundamental para cuidar la salud. Por esta razón, a continuación, se encuentran cuatro recomendaciones que lo ayudarán en este camino:   

Aumente el consumo de fibra porque esta, entre muchos otros beneficios, ayuda a que la insulina trabaje mejor y por ende permite que los niveles de azúcar en la sangre se controlen más.   

Disminuya el consumo de carbohidratos refinados, todos los azúcares y edulcorantes artificiales, panela, gaseosas, dulces, postres y los alimentos hechos con harinas de trigo y maíz. Reemplácelos por alimentos naturales pues estos son los que le brindan los nutrientes, vitaminas y minerales que su cuerpo realmente necesita.  

La actividad física es el mejor antídoto porque al ejercitarse, el páncreas mejora su funcionamiento y, por ende, la insulina que produce tiene una calidad mucho mejor. Asimismo, tenga en cuenta que hacer deporte requiere energía, la cual se obtiene de la glucosa, por lo que esta acción le permitirá mejorar los niveles de azúcar en la sangre.  

En conjunto, lleve una vida saludable porque, aunque suene repetitivo, no hay mejor forma de cuidar su cuerpo que mantener una alimentación balanceada y un estilo de vida activo. En el mercado existen medicamentos reguladores del azúcar o para bajar la tensión, pero ninguno es tan efectivo como la actividad física y una dieta basada vegetales, frutas enteras, granos, proteínas y tubérculos.