Miami: exponen recuerdos del exilio | El Nuevo Siglo
Viernes, 12 de Septiembre de 2014

Juanita García compró la muñeca "llorona" al llegar con 13 años a Estados Unidos, porque reflejaba su estado de ánimo lejos de su familia en Cuba. Medio siglo después, la muñeca es parte de una exposición sobre el exilio cubano en Miami.

 

La muñeca, de rostro entristecido y gastado vestido de cuadros amarillos y blancos, destaca en la exposición que abrirá el 19 de septiembre en la Torre de la Libertad (Freedom Tower), un emblemático edificio en el centro de Miami donde se procesaba a los cubanos llegados entre 1960 y 1970.

"Cuando yo estaba en el hogar de acogida, me llevaron a una tienda a comprar un juguete y esa es la muñeca que yo compré", dice a la AFP García, de 65 años, durante la presentación de la exposición el pasado miércoles.

Tenía 13 años cuando llegó en 1962 a Miami, Florida (sureste de EEUU), dentro de la operación "Pedro Pan", que trajo a unos 14.000 niños enviados por sus padres para sacarlos de la isla de régimen comunista.

 

"Esa muñeca es mi vida. Esa muñeca refleja lo que yo sentía, yo le puse 'La Llorona', es fea y está llorando, así me sentía yo cuando vine, como si estuviera abandonada", dijo García, quien desea traer a su familia a la exposición, organizada por el Miami Dade College.

- "Como una aventura" -

La muñeca está junto a otra que trajo en su equipaje una niña de Cuba, esta sí sonriente, en la exposición "La experiencia del exilio: Viaje a la libertad", que a través de pertenencias, fotos y videos muestra las vicisitudes de los inmigrantes al llegar a Estados Unidos.

"Yo no estaba triste, para mí era como una aventura, porque mis padres nos decían que esto iba a durar solamente unas semanas, unos meses, hasta que Fidel (Castro) fuera derrocado", recuerda Eloisa Echazábal.

 

La mujer, que llegó también dentro de "Pedro Pan" a los 13 años en 1961 con su hermana menor y tres primos, prestó a la exposición su pasaporte cubano de la época.

"Mi corazón está dividido en dos, porque (Cuba) es mi patria, me gustaría ir a ver donde yo vivía, caminar por las calles. Pero la otra mitad me dice: '¿Qué vas a hacer allá, si tuviste que irte huyendo?'", dice Echazábal, que acudió al llamado del Miami Dade College para ceder objetos personales para la exposición.

Las vitrinas muestran pines de los niños cubanos, pasajes de avión, bolsas de viaje y ropa. Un diploma otorgado a una niña por haber culminado un año escolar en Texas y un telegrama de su familia desde Cuba fechado en 1963 de una sola línea: "Felicidades en tu graduación", tienen un lugar destacado.

- Refrescar la memoria -

"Es una experiencia que jamás se te olvidará", dice con lágrimas en los ojos Cris Rodríguez, un directivo en Miami de una firma de ropa para hombres, que llegó a Estados Unidos en 1961 y pudo reunirse nuevamente con sus padres cinco años después.

 

Rodríguez se alegra de que las nuevas generaciones de inmigrantes en Miami, donde vive la mayor parte de la diáspora cubana, puedan ver la exposición, ya que no cree "que la gente se dé cuenta del dolor" que enfrentaron los recién llegados en décadas anteriores.

También es importante refrescar la memoria de los exiliados: "Uno también para sobrevivir tiene que borrar (los recuerdos), porque es duro".

"Esta exposición significa mucho para esta comunidad, porque el influjo de cubanos desde el año 59 hasta ahora es algo que ha sido continuo, y hay una gran historia en todo esto, una de mucho sufrimiento y otra de mucho éxito", indica a la AFP el presidente del Miami Dade College, Eduardo Padrón, él mismo llegado de Cuba en 1961.

 

Esta exposición, que incluye además fotografías de Alexis Rodríguez Duarte y su esposo, Tico Torres, que retrataron a famosos cubanoestadounidenses como Celia Cruz y Andy García, será la primera en una serie dedicada al exilio en la Torre de la Libertad, "que es un ícono similar a Ellis Island", la puerta de entrada de inmigrantes en Nueva York, agregó Padrón.