Pespectiva. 14 Cañonazos siguen prendiendo fiestas decembrinas | El Nuevo Siglo
Su primera edición fue en 1960. /Imagen cortesía
Sábado, 17 de Diciembre de 2022
Redacción Economía

Quién no ha bailado con los primos o las tías en esta época decembrina canciones como “La cinta verde”, de Gustavo Quintero (“El Loco Quintero”), esa que dice: “La cinta verde, la rosa roja, esas dos cosas te harán quererme, la cinta al pelo, la rosa al pecho tú has de ponerte mi amor”; o “El ausente”, de Pastor López; “Dame tu mujer, José”, de Los 50 de Joselito, o “Los Sabanales”, de Los Corraleros del Majagual. ¿Son clásicos, verdad? Y es que no importa si está con su familia en Medellín, en Bogotá, en Cali o en cualquier parte del país, sin duda ha escuchado muchas veces estas canciones y seguro las ha bailado al menos una vez en la vida.

La música hace parte de la cultura navideña del colombiano y del latino en general. Más allá de la comida, los regalos, la pólvora o los juegos pirotécnicos, la música se ha convertido en una cuestión de identidad, esa identidad “parrandera” del último mes del año, diciembre. Por ahí dice una canción: “Llegó diciembre con su alegría, mes de parranda y animación…”. Y es cierto, esta época para la mayoría se convierte en fiesta, reuniones, comida, amigos, regalos y música.

En los años 60 a alguien se le ocurrió que sería una gran idea tener las canciones más sonadas y recordadas por los colombianos en un solo LP (“long play”, traducido al español como 'larga duración'), así nacieron los 14 Cañonazos, que seguramente muchos han escuchado o han visto en sus casas sus tradicionales carátulas, incluso seguramente algunos todavía los conservan.

Detalles

EL NUEVO SIGLO dialogó con Aimer Otero, coordinador de Promoción de Discos Fuentes, los creadores de los 14 Cañonazos, quien contó algunos detalles de cómo comenzó esta idea y cómo este disco aún existe y se sigue vendiendo, aunque de manera digital, toda una transformación que ha permitido seguir llegando con estos clásicos tropicales a través de los años a muchas y distintas generaciones.

De acuerdo con Otero, los 14 Cañonazos es el producto bandera de la compañía Discos Fuentes. “Nació en 1960, o sea que este año estamos cumpliendo 62 de estar llevando alegría a los hogares colombianos. El disco nació como una idea de don Antonio Fuentes y sus hijos de la necesidad de compilar en un solo variado los éxitos que sonaban en las diferentes estaciones de radio en esa época”.

 Dice Aimer que no fue una tarea fácil, ya que en esa época los discos en vinilo o LP solo podían llevar máximo 12 canciones. “Entonces el dueño de la compañía junto con sus hijos se dio a la tarea de investigar sí técnicamente podían incluir 14 temas, lo asumieron como un desafío y lo lograron. Así que obtuvieron un variado de éxitos que incluía 14 temas. Fue así como nació el nombre de 14 Cañonazos”.

¿Y por qué Cañonazos?

Cuenta Aimar que en los años 60 a las canciones más sonadas o populares se les denominaba cañonazos. “Además, como realmente la compañía nació en Cartagena, ciudad amurallada donde se ubica el castillo de San Felipe que aún conserva sus cañones, quedaba perfecto el nombre".

Hoy por hoy es una de los variados más importantes de la música tropical. Y muestra de ello es que ya llevan 62 años ininterrumpidos sacando el disco, “llevando alegría a los hogares colombianos con los éxitos que suenan durante todo el todo el año”, aseguró Otero.



Volumen 1

Entre tanto, sostuvo que el primer cañonazo, es decir, el volumen 1, tuvo como éxito canciones como: “La cinta verde” o “La negra caliente”.

Recuerda además que grandes artistas de la música tropical están en varias ediciones de los 14 Cañonazos, es el caso de Pastor López, Rodolfo Aicardi, Los Corraleros del Majagual, Fruko y sus Tesos, Los Hispanos, entre otros.

Se consolidó tanto este producto, que “la gente lo esperaba, inclusive las personas hacían fila para adquirirlo. Además, los distribuidores o los dueños de las discotiendas también estaban pendientes de cuando salía el disco, ya que generaba ventas importantes en sus tiendas”, dice Aimer.  

La era digital

Pero los tiempos cambian, la tecnología avanza y la era de lo digital se tomó el mundo y la música no ha sido ajena a este fenómeno. De hecho, parece ser uno de los sectores del entrenamiento que más se ha visto beneficiado con la llegada de las nuevas tecnologías y plataformas, con las que ahora es muy fácil escuchar canciones, descargarlas en los dispositivos móviles o simplemente compartirlas con alguien.

“Hoy en día, como todo cambió por la llegada de la era digital, la compañía ya no vende el disco físicamente, porque ni siquiera hay tiendas para distribuirlo. Sin embargo, actualmente lo vendemos a través de su tienda virtual y de las plataformas digitales como Dezzer o Spotify”.

Los 14 Cañonazos, en su edición actual, es decir, la número 62, tiene un costo de $69.900, pero si quiere adquirir el vinilo o LP tiene un costo que varía entre $24.900 y $59.900.

Y aunque parezca extraño para muchos, hay gente joven que le apuesta a lo tropical, aunque con nuevos arreglos, instrumentos y una apuesta en escena distinta y renovada.

En este sentido Aimar afirmó que la compañía (Discos Fuentes) no deja atrás estas nuevas tendencias como el reguetón, “de hecho, en el volumen de este año hay dos artistas nuevos del género que empiezan a abrirse paso en el mundo de lo urbano”.

Sin embargo, asegura que, aunque la disquera no deja de lado lo nuevo, sigue conservando lo tradicional, que es la música tropical que los ha caracterizado durante 88 años (desde la fundación de la compañía en 1934).

Ventas digitales

“Las cifras de las ventas son muy relativas, lo cierto es que el disco físico se vendía mucho y ahora en la parte digital las ventas son más limitadas, pero tienen gran importancia”.

Aimer asegura que hay que tener en cuenta que han cambiado los formatos, “las personas ya casi no encuentran cedés y todos están migrando a las plataformas digitales; esto genera menos ingresos para la compañía, aunque ahora los costos de producción son menores”.

“Antes, por ejemplo, se tenían que fabricar hasta 20.000 unidades de cedés y mantener inventarios altos, pero no todas estas unidades se vendían. Hoy en día no hay necesidad de inventarios, porque los contenidos son cargados a las diferentes plataformas y las personas van escuchando lo que realmente les gusta”, agregó.

Los Cañonazos han estado en vinilos o LP, cedés, en USB y casetes, y ahora han llegado a las plataformas digitales. Lo cierto es que no importa el formato, sin duda el próximo domingo y en el final del año se escucharan clásicos y contemporáneos de este disco, que ha marcado generaciones y que sigue “prendiendo” las fiestas en diciembre.