Regreso a clases con loncheras saludables | El Nuevo Siglo
Viernes, 23 de Enero de 2015

Se aproxima el regreso al colegio y una sana alimentación influye de manera importante en el desempeño escolar. Y un objetivo prioritario en esta edad es enseñar hábitos de alimentación adecuados para llevar un estilo de vida saludable.

Desde los primeros años se establecen gustos alimenticios, en los que contribuyen factores genéticos, sociales y culturales. El niño come en función de lo que ve consumir a los mayores en casa. Estos hábitos saludables ayudan a prevenir adultos hipertensos, diabéticos y con enfermedad renal, entre otros.

Nueva EPS hace una serie de recomendaciones para que niños y niñas reciban una alimentación sana, nutritiva y balanceada, especialmente en su lonchera:

Lo ideal es diseñar las loncheras escogiendo alimentos que a su hijo le gusten, la variedad y el contraste de colores es indispensable. Piense en sabores distintos pero ricos, si a su niño le gusta el dulce o el picante escoja al menos uno con esas características.

A los niños les gustan las comidas sencillas y prácticas, los alimentos que ellos mismos pueden abrir y comer con facilidad les dan más confianza e independencia. Utilice muchos colores, sabores y formas novedosas, para que las loncheras sean totalmente provocativas; ejemplo, corte los sándwiches en tiras, círculos, cuadraditos pequeños.

Las porciones deben ser adecuadas para la edad. Si envía demasiada comida lo más probable es que regrese la mitad de la lonchera llena o por el contrario le enseñe a su hijo a comer demasiado. El apetito del niño varía según la actividad física o el propio crecimiento, no lo obligue a comer por comer.

Proteja los alimentos en recipientes especiales, o envuélvalos en papel aluminio, papel plástico o bolsitas especiales, siempre con servilletas. A los niños les encanta recibir sorpresas de vez en cuando, piense en algo lindo para incluir en la lonchera; su plato preferido, algún dulce combinado con frutas.

No se olvide de darle un buen desayuno, la lonchera es un refuerzo hasta el almuerzo. No se preocupe si un día no come mucho, si ve que es un patrón por más de 4 días, es necesario tomar las medidas necesarias y acudir a la IPS y pida cita con el pediatra, quien le indicará si es necesario acudir al especialista. 

Evite poner refrescos muy azucarados o bebidas gaseosas y paquetes, en todo caso una botella con agua es una muy buena opción. Descarte los dulces o preparaciones que tengan exceso de grasa y azúcares, o los alimentos que puedan llegar con mal olor para que no la rechacen.

 

Algunas sugerencias para la organización de la lonchera:

 

Lunes - Pan con pollo deshilachado o huevo (sándwich), yogurt y ½ taza de fresas.

Martes - Bebida láctea (avena, leche, yogurt, kumis), croissant y fruta.

Miércoles - Avena, arepa con queso, ensalada de frutas (dos frutas).

Jueves - Leche achocolatada, Pan relleno de tortilla de huevo con 5 fresas bañadas en leche condensada.

Viernes - Yogur, sándwich, fruta, queso y bocadillo o arequipe.

 

Todas las opciones deben incluir agua y algún líquido bajo en azúcar; preferiblemente jugos de fruta natural. 

En cuanto a salud:

 

Es importante también, llevar al menor al control médico general o control de crecimiento y desarrollo,en el cual se deberá revisar el carné de vacunación, identificar problemas visuales y auditivos; valorar el estado nutricional, identificar defectos posturales y valorar problemas de aprendizaje.

 

Lleve al niño o la niña a cita odontológica. La salud oral debe ser promovida en el colegio y en casa, por lo tanto el menor debe cepillarse después de cada comida y debe tener, por lo menos, dos valoraciones odontológicas al año.

 

Recuerde que el papel de los padres es fundamental para el éxito del año escolar. Apoye al niño o la niña en los deberes escolares y esté alerta ante las señales que indican que tiene dificultades en alguna de las áreas del desarrollo, con el fin de tratarlas oportunamente.

 

 

ES FUNDAMENTAL que niños y niñas consuman el desayuno o el almuerzo antes de empezar su jornada escolar, pues mejora la concentración y favorece el rendimiento escolar./