Saque de taquito la anemia | El Nuevo Siglo
Miércoles, 25 de Febrero de 2015

LA ANEMIA es una enfermedad en la cual el cuerpo no tiene suficiente cantidad de glóbulos rojos o estos no son sanos, haciendo imposible el transporte del oxígeno a los diferentes tejidos y órganos, ya que son ellos los encargados de hacer este proceso.

Existen muchos tipos de anemia, la más frecuente es la anemia ferropénica que se da cuando el cuerpo no tiene suficiente cantidad de hierro en los depósitos, elemento indispensable para la producción de glóbulos.

 

Las necesidades de hierro varían con la edad y alcanzan, durante la primera infancia y la adolescencia, cifras importantes que varían y aumentan considerablemente de acuerdo al estado fisiológico, por ejemplo, en las niñas que comienzan a menstruar, en el embarazo, después del parto o luego de una cirugía. 

 

El hierro de los alimentos

 

Los alimentos que contienen hierro pueden dividirse en tres categorías: alimentos con alto contenido de hierro: hígado, corazón, levadura de cerveza, germen de trigo, yema de huevo, ostras, ciertas frutas y hortalizas desecadas; alimentos con contenido intermedio de hierro: la mayoría de las carnes, peces y aves, la mayoría de los vegetales verdes y de los cereales; alimentos con bajo contenido en hierro: la leche y sus subproductos y la mayor parte de los vegetales no verdes.

 

Etiología de las deficiencias de hierro

 

La deficiencia de hierro con y sin anemia es una combinación de condiciones que surge frecuentemente en diversas situaciones clínicas. Los problemas nutricionales son los responsables de un porcentaje importante de los casos que se presentan, sin embargo existen otras causas que se citan a continuación:

 

·        Pérdidas sanguíneas, por ejemplo, una hemorragia aguda de cualquier sitio y causa quirúrgica o no, sangrado digestivo alto (en casos de úlcera gástrica o duodenal, gastritis hemorrágica, cirugía gástrica, durante el parto).

·        Anemia inducida por la quimioterapia, propia de los pacientes con cáncer sometidos a este tipo de tratamientos, y en donde además su médula ósea, en donde se producen los glóbulos rojos, está enferma.

·        Anemia por síndromes de malabsorción, como en la enfermedad inflamatoria intestinal El hierro que viene de la alimentación se absorbe en el intestino, cuando el intestino tiene fallas en su proceso de absorción de presenta este problema.

·        Sangrado menstrual masivo

Tratamiento de la anemia ferropénica

 

El tratamiento de esta enfermedad persigue cuatro objetivos importantes:

 

·        Corregir la causa subyacente que la produjo: por ejemplo mejorar el estado de alimentación de los individuos, recuperar los síndromes de mala absorción intestinal, evitar las pérdidas abundantes, y dar suplementación adicional durante los periodos de demanda alta, por ejemplo el embarazo.

·        Normalizar la concentración de hemoglobina que es una proteína interna de los glóbulos rojos que tiene el hierro necesario para el transporte del oxígeno.

·        Recuperar y regularizar los depósitos orgánicos de hierro, a través de varias semanas de terapia de suplencia con hierro adicional.

·        Evitar las frecuentes reacciones adversas asociadas con la terapia de hierro en sus presentaciones oral o endovenosa.

 

Opciones terapéuticas

 

El suplemento con hierro oral es el tratamiento de elección por su efectividad y bajo costo, sin embargo en ciertas circunstancias el hierro intravenoso se convierte en el tratamiento ideal:

 

·        Pacientes que no toleran el hierro oral.

·        Falta de cumplimiento de la terapia oral.

·        Pacientes con mala absorción intestinal por ejemplo por antecedentes de cirugía gastrointestinal.

·        Pérdidas crónicas, con anemias ferropénicas severas, en donde el tratamiento oral no suple las pérdidas.

·        En casos de deficiencia funcional y absoluta de hierro, por enfermedades heredadas.

·        Necesidad de rápida recuperación de la anemia en pre y/o post-operatorio

·        Déficit severo de hierro, requiriendo un rápido efecto terapéutico: pérdida post-quirúrgica, postparto.

·        Procesos inflamatorios crónicos que hacen que la médula, lugar donde se producen los glóbulos rojos, no trabaje bien, por ejemplo en pacientes con ciertos tipos de cáncer.