El Atalanta fue campeón de la Copa de Italia en 1963. Durante generaciones, ese recuerdo acompañó a los tifosi’, que veían cómo su club era incapaz de ganar el segundo título de su historia, hasta que ayer conquistó la Europa League.
Un triplete del atacante nigeriano Ademolo Lookman (minutos 12, 26 y 75) fulminó al Bayer Leverkusen, hasta ahora invicto esta temporada, en la final de Dublín.
Pero sobre todo, esos goles recompensaron a un club emblemático del ‘Calcio’ y que en los últimos años fue adoptando un papel más destacado en el fútbol continental por su estilo de juego atractivo.
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Desde su creación en 1907, el Atalanta (que hace referencia en su nombre a Atalanta, heroína de la mitología griega criada por la diosa de la caza Artemisa) nunca fue campeón de Italia. Su palmarés se limitaba hasta ahora a una línea, esa Copa de Italia de 1963 que solo recuerdan los aficionados de más edad.
El club de Bérgamo, ciudad lombarda de 120.000 habitantes, es una anomalía en el fútbol italiano: disputa su 63º temporada de la Serie A, de un total de 92 desde la creación del campeonato. Solamente nueve clubes suman más campañas en la élite y todos ellos están en capitales regionales, mucho más pobladas, como Milán, Turín, Roma o Florencia.
La ‘Dea’ (la Diosa, representada en su escudo como reflejo de su ascendencia mitológica) no abandonó la Serie A desde 2012.
Actualmente es quinta en la Serie A, a dos puntos del podio, y terminó tercera del torneo italiano tres años seguidos (2018, 2019, 2020). En la Liga de Campeones de 2020 llegó a alcanzar los cuartos de final (derrota 2-1 ante el PSG).
El Atalanta adquirió una nueva dimensión gracias a uno de sus exjugadores, Antonio Percassi.
El exdefensa (110 partidos ligueros entre 1971 y 1977) hizo fortuna una vez que se retiró con 25 años en el sector inmobiliario, abriendo tiendas de Benetton y luego franquicias en Italia de Starbucks y Nike, así como centros comerciales y lanzando la gama de cosméticos KIKO.
Primero presidente, Percassi compró el club en 2010 por 14 millones de euros de la época y le dio la estabilidad financiera que le faltaba. Cedió en febrero, por 500 millones de euros, el 55% del capital a un consorcio estadounidense liderado por Stephen Pagliuca, patrón del fondo de inversiones Bain Capital y copropietario del equipo de la NBA Boston Celtics.
Percassi, de 70 años, se mantiene como un presidente discreto, algo que destaca en un país con dirigentes aficionados a las declaraciones altisonantes como Aurelio De Laurentiis (Nápoles) o Claudio Lotito (Lazio).
La auténtica estrella del Atalanta es su entrenador, Gian Piero Gasperini. En el puesto desde 2016, una eternidad para un club de la Serie A, es una referencia que inspira a muchos otros por su fútbol ofensivo.
Antes de unirse al Atalanta, Gasperini transmitía sus conocimientos en los equipos juveniles de la Juventus. Se reveló en el Génova y tuvo, eso sí, un fracaso en el Inter de Milán, donde fue despedido en septiembre de 2011 después de tres partidos. Luego remontó el vuelo en el Palermo y, de nuevo, en el Génova.
Exigente con sus jugadores y adepto de un sistema 3-4-3, Gasperini (65 años) tiene reputación también por sus declaraciones volcánicas, que pueden entrar en erupción contra árbitros, entrenadores rivales o periodistas.