Luego de la gran labor de Coracia en la semifinal ante Inglaterra, el delantero de la Juventus, Mario Mandzukic, decidió brindarle un regalo especial a los habitantes de su pueblo natal, Slavonski Brod.
Además de ser una pieza clave en el esquema de su selección, el artillero le anotó el segundo gol a los británicos, que metió a su plantel por primera vez en su historia a una final de la Copa del Mundo.
El hombre de la Juve, le gastó una cerveza a cada habitante de su pueblo, con la intención de festejar con la intensidad necesaria la clasificación de Croacia. La escuadra medirá fuerzas ante Francia en la definición por el título, y esperan robarle la cartera a los galos, que llegan como favoritos a la final.
En el camino hacia la final, Croacia superó rivales como Rusia, Dinamarca, Argentina e Inglaterra, demostrando que tiene lo suficiente para amargarle el festejo a los franceses. Por su parte, Mandzukic no había marcado un gol en el torneo, y esperó para anotar hasta la semi, dejando huella en el momento más importante de su plantel.