Cautela empresarial a propuesta salarial de sindicatos | El Nuevo Siglo
Mintrabajo
Viernes, 9 de Diciembre de 2022
Redacción web con Agencia Europapress

La próxima semana continuará la discusión. Gremios, Gobierno y centrales esperan llegar a un acuerdo para  el 15 diciembre 

Por su parte el presidente de la CUT, Francisco Maltés, confía en que haya voluntad política en los empresarios frente al salario mínimo: "por eso nuestra propuesta inicial es que el incremento sea del 20 %. El Comando Nacional Unitario expresa la voluntad política de llegar a un acuerdo en torno al salario mínimo y a otras variables que permitan el mejoramiento adquisitivo de los colombianos".

El próximo lunes 12 de diciembre "se seguirá debatiendo y trayendo más propuestas que nos permitan construir una cifra que, a pesar de la incertidumbre, beneficie a la mayoría de las colombianas y colombianos, puntualizó la titular de la cartera laboral”, sostuvo Maltés.

Entre tanto al término de un nuevo encuentro entre representantes de las centrales sindicales, gremios y del Gobierno, la ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez, resaltó el espíritu que tienen las partes para construir la cifra del incremento del salario mínimo para el próximo año.

Señaló: “Estamos trabajando para construir no solamente la cifra, sino las políticas que van a acompañar las propuestas”.

Inflación

De acuerdo con el Ministerio del Trabajo, ayer en la mesa de la Comisión Permanente de Concertación de Políticas Salariales y Laborales se analizaron los impactos de la inflación en la canasta de alimentación básica.

“Las partes hemos manifestado nuestra preocupación y desde allí, el Gobierno ratifica que viene haciendo unas políticas de desindexación de productos, actividades y funciones que se desaten del aumento del salario mínimo”.

También se estudiaron los efectos de la tasa de usura, “teniendo en cuenta que muchos compatriotas solucionan sus necesidades básicas con su tarjeta de crédito. También hemos acordado hacer propuestas al Banco de la República y reducirlas como un alivio para el consumo”.

Las centrales presentaron apuestas importantes alrededor de las políticas que deben avanzar en la construcción de la cifra y los empresarios oficializaron una posición con una carta que contiene propuestas alrededor de políticas públicas.

Gremios

Por su parte, el presidente de la ANDI, Bruce Mac Master, dijo que "nos enfrentamos a un año 2023 muy especial, porque es un año en el cual tenemos una inflación que sigue creciendo, pero también tenemos proyecciones de autoridades económicas, incluyendo al Banco de la República, de que el año entrante vamos a tener un decrecimiento en la economía, quizá llegando a un nivel del 0.5 %, que va a ser muy poco".

De otro lado, sostuvo que "hay una gran virtud alrededor de la mesa de concertación y es poder contar con una ministra que tiene capacidades importantes de ser conciliadora, de abrir conversaciones, que es cercana inclusive al sector trabajador y sindical y que ha demostrado la capacidad de trabajar con los empresarios”. 

“Por eso le hicimos un llamado para que nos sentemos y trabajemos en estos próximos días, buscando acercamientos que nos permitan construir entre todos una propuesta que atienda temas tan sensibles para el país, para los hogares y empleados colombianos", agregó Mac Master.

A su vez, Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, le dijo a EL NUEVO SIGLO: “los gremios no hemos querido descalificar la propuesta de las centrales obreras. Por supuesto que es una cifra alta, pero por ahora no hemos querido proponer ninguna otra cifra, apostándole a que en los diálogos que podamos tener con las centrales y con el Gobierno, tanto de manera conjunta como de manera separada, podamos construir una cifra de consenso de aquí al próximo lunes (12 de diciembre). Esa es nuestra posición”.

Así mismo, Mac Master fue claro al decir que no pretenden descalificar la cifra aportada por las centrales obreras, pero que esta si debe replantearse desde varios puntos de vista, agregando que este es un momento que se debe aprovechar a través del dialogo.

Los gremios sostuvieron que en esta discusión es fundamental tener en cuenta el poder adquisitivo de los hogares, de los empresarios y de los empleados colombianos; la competitividad de los empresarios; la actividad económica y la capacidad de generar más empleo.

Además, señalaron que es importante producir mayor formalidad, mejor empleo y de mejor calidad en todo momento; Poder ser competitivos en términos internacionales para que los productos colombianos puedan ser vendidos y buscar el equilibro fiscal, ya que el salario tiene un efecto importante en las finanzas públicas



Factor determinante

De otro lado, Iván Jaramillo Jassir, director del Observatorio Laboral de la Universidad del Rosario, le dijo a EL NUEVO SIGLO que “para la fijación del incremento del salario mínimo de 2023 debe considerarse la inflación como factor de ajuste a partir del cual se establece el incremento del piso mínimo de remuneración nacional en Colombia”.

Agregó que “la creciente inflación del año 2022 neutralizó el incremento fijado para este año, que dio lugar a la solicitud de las organizaciones sindicales de un nuevo incremento e incluso la propuesta legislativa de una prima de compensación de la pérdida de capacidad adquisitiva”.

“De cara a la recesión prevista para 2023 no debe olvidarse la doble condición del trabajador como parte del contrato de trabajo y consumidor para la protección de la demanda. En cuanto a los posibles efectos inflacionarios, se está acompañando en la Comisión de Concertación de Políticas Salariales y Laborales la desindexación del salario mínimo y otras medidas para la efectividad económica del aumento que se fije”, sostuvo Jaramillo.

En cuanto a si es alta o no la propuesta de los sindicatos, Jaramillo sostuvo que simplemente “se trata de la postura sindical en la Comisión de Concertación de Políticas Salariales y Laborales.

Estimaciones de la OCDE

Por su parte, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) considera importante tener en cuenta la tasa de inflación a la hora de subir el salario mínimo de cada país, al tiempo que ha citado varios documentos académicos que consideran que este tipo de incremento tiene unos efectos negativos limitados.

"Con la inflación alcanzando niveles no vistos en las últimas cuatro décadas en la mayoría de países de la OCDE y afectando desproporcionadamente a los hogares de más bajos ingresos y vulnerables, los salarios mínimos podrían volverse una herramienta aún más importante para proteger el nivel de vida de los trabajadores con salarios bajos, al tiempo que se mantienen las finanzas públicas y la inflación bajo control", explicó el organismo en un informe. 

En este sentido, ha citado un "creciente consenso" entre legisladores y académicos de que, en los niveles actuales de la mayoría de países de la OCDE, los incrementos en los salarios mínimos, incluso aunque sean considerables, tienen efectos positivos en las rentas bajas y efectos nulos o limitadamente negativos en el empleo.

Asimismo, el organismo considera que los argumentos para subir salarios mínimos donde son demasiado bajos o implantarlos donde no existen, ganan fuerza a la luz de que cada vez hay más evidencia de situaciones de monopsonio. Este término, que está empezando a usar la OCDE desde hace unos meses, describe la situación en la que las empresas tienen un poder "unilateral" a la hora de fijar sueldos y lo usan para deprimir los salarios y el empleo a niveles por debajo de los que existirían en un mercado competitivo.