LAS TENDENCIAS del comercio minorista, avanzan a pasos agigantados con la transformación de los mercados, en un presente y futuro caracterizado por la innovación, la responsabilidad y la eficiencia operativa.
La integración de las tecnologías avanzadas, entre ellas la inteligencia artificial generativa, se convierten en un catalizador para el cambio y el crecimiento en el sector, dado que las decisiones que tomen los minoristas en la actualidad perfilarán el futuro de una industria en constante evolución.
Con el fin de manejar esta complejidad y comprender los cambios que se observan en el sector, Deloitte destacó las Tendencias Minoristas de 2024 en relación con tres factores fundamentales como los mercados, los modelos (comerciales) y la mecánica (dinámicas operativas). A continuación, se explorarán cada una de ellas.
“Los minoristas enfrentan un panorama diverso, con consumidores que buscan una representación y una atención más inclusiva. Además, la demanda dicta el desarrollo de productos especializados para grupos tradicionalmente subrepresentados como las minorías étnicas, la tercera edad y personas con discapacidad”, asegura Juan Germán Osorio, socio líder de Consumo de Deloitte en la Región Andina.
Por su parte, el comercio minorista híbrido se está estableciendo como la nueva norma, con una integración sin fisuras entre el mundo digital y el físico, lo que abre un abanico de nuevas experiencias de consumo. Los minoristas que logren fusionar estos dos elementos tienen la oportunidad de generar nuevos ingresos, especialmente en nichos emergentes como los videojuegos.
En cuanto a la responsabilidad social y la sostenibilidad, estas más que buenas prácticas son requisitos esenciales. La normativa europea sobre informes de sostenibilidad corporativa (CSRD, por su sigla en inglés) está impulsando a los minoristas a adoptar prácticas más éticas y sostenibles, lo que no solo añade complejidad, sino que también crea oportunidades de crecimiento en áreas como el mercado de reventa y la demanda de alimentos saludables.
Los cambios en la cadena de suministro también son inminentes y se espera que estos sean más diversificados, así como complejos, acercándose más al consumidor final y manteniendo altas expectativas en cuanto a la entrega de productos. La colaboración entre competidores y un enfoque en la sostenibilidad serán esenciales para adaptarse a este nuevo entorno.