EN UNA jornada con altibajos, la cotización del dólar siguió a la baja perdiendo $ 49 en el mercado cambiario y cerrando en $ 4.306 en el sistema interbancario.

A lo largo de las operaciones que se desarrollaron en el sistema financiero, la divisa tuvo un precio mínimo de $ 4.625 y un máximo de $ 4.360.

Luego de cerrar una semana con el precio más bajo de los últimos ocho meses en Colombia, cedió $ 30 entre lunes y viernes con respecto a su TRM, para cerrar el viernes en $ 4.430.

Ayer, el impacto en el mercado se presentó por la crisis política que atraviesa el gobierno del presidente Gustavo Petro, y además sigue a la baja influenciada por los factores externos.

Por su parte el petróleo se sigue recuperando, el barril de Brent, la referencia para Colombia, subió 2,54 % y se ubicó en US$ 78,06, mientras el WTI ganó 2,70 % cotizándose a US$ 73,68 por barril.

Otro elemento que jugó a favor de la valorización del peso, fue el proyecto de ley que firmó el presidente Joe Biden para autorizar elevar el límite de la deuda del país se logró evitar la crisis financiera, y con esto un posible período de recesión.

Asimismo, este comportamiento responde al aumento en el precio del petróleo, porque Arabia Saudita se comprometió a reducir la producción del crudo en otro millón de barriles por día a partir del mes de julio.

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Lo anterior tiene a la referencia Brent cotizándose en US$ 77,97 (2,42 %) y en el caso del WTI, US$ 73,63 (2,63 %).

“Lo que viene generando, obviamente, movimientos en los precios del petróleo que se recuperan con respecto a la semana pasada que alcanzó a estar a la par de la referencia Brent, muy cerca a los US$ 70”, dijo Alejandro Guerrero, asociado de divisas de Credicorp Capital.

En este mismo sentido, se tiene que tener en cuenta otro indicador como el de las tasas de interés que rigen el mercado. Tanto es así que las entidades financieras tienen un nuevo tope de interés. La Superintendencia Financiera de Colombia (SFC) anunció que para junio la tasa de usura, es decir el tope en los tipos que pueden cobrar los bancos para las tarjetas de crédito, será de 44,64 % efectivo anual. Este dato representa una disminución de 77 puntos básicos respecto al mes anterior.

Arnoldo Casas, director de soluciones de portafolio de Credicorp Capital, explicó cuando empezaron las caídas de la usura que la intención, en principio, es aliviar el bolsillo de los consumidores. Pero destacó que entre menor sea la tasa de usura las entidades financieras tendrán una menor intensión de prestar. Es decir, si el perfil del cliente es riesgoso difícilmente le dará crédito.

Aunque por segundo mes consecutivo la Superfinanciera decidió bajar el límite que se le impone a las tarjetas de crédito, según reportes de la propia entidad con corte al pasado 19 de mayo, deja ver que los bancos están insistiendo en una reducción autónoma de sus tipos para los plásticos.

Esto se ve por ejemplo en que en las tarjetas de crédito para ingresos de hasta 2 salarios mínimos ($ 2,3 millones), las tasas de interés promedio de los bancos están en 31,34 %, lejos de la tasa de usura de mayo que rige hasta este miércoles 31 en 45,41 % y claramente distante de la nueva de junio.

Igualmente, es aún mayor el margen entre los plásticos de crédito para más de dos salarios mínimos, en este rango de tarjetas el promedio está en 30,26 % frente a la nueva tasa de usura de junio de 44,64 %.