LOS SERVICIOS de inteligencia no han podido “quebrar el espinazo” a las bandas que en 2024 hurtaron 49.006 vehículos, automotores y motocicletas, generando grandes pérdidas económicas no solo a sus propietarios, sino a las empresas aseguradoras en Colombia.

El presidente Ejecutivo de la Asociación Nacional del Sector Automotriz y sus Partes (Asopartes), Carlos Andrés Pineda Osorio, en diálogo con EL NUEVO SIGLO dijo que esta modalidad criminal presenta una disminución frente al 2023, que registró el hurto de 53.302 vehículos.

Pineda Osorio explicó que, de acuerdo con los cuadros estadísticos de la Dirección de Investigación Criminal e Interpol, Dijin, de la Policía Nacional referente al hurto de automotores, de motocicletas y de partes de vehículos, se observa una reducción del 5,07% frente al año 2023.

Las cifras

Señaló que también se registra una disminución del 8,7% en el hurto de motocicletas en donde se pasó de 41.710 casos en el 2023 a 38.063 registros en el 2024.

“Son reducciones en estos dos flagelos que tanto afectan al patrimonio y por supuesto la vida de los colombianos en todo el país, pero que definitivamente aún son cifras supremamente altas en cuanto a 11.006 casos vehículos y más de 38.000 casos de motocicletas”, indicó.

Precisó que las redes criminales para ejecutar los hurtos emplean diferentes armas y modalidades criminales, entre ellas armas blancas, armas de fuego (pistolas, revólveres, changones y armas traumáticas); usan escopolamina para drogar a los propietarios, llaves maestras y el “halado”.

El directivo gremial dijo que “hemos buscado visibilizar tanto con la ciudadanía, con la opinión pública y, por supuesto, y en especial con las autoridades, porque estos flagelos, insistimos, no solo afectan el patrimonio de los colombianos, sino que ponen en grave riesgo la vida de cada ciudadano, de cada propietario y de cada conductor de un vehículo o de una motocicleta e incluso de sus acompañantes”, acotó.

Prevención

Por otro lado, indicó que “siempre buscamos la prevención con todos los ciudadanos para que no dejen su vehículo o motocicleta en la vía pública a la merced de los haladores, aquellos que aprovechan cualquier momento, cualquier descuido, para hurtar el automotor”.

Recordó que “un conductor piensa que entrar a una edificación en un dos por tres o que me demoro cinco minuticos para reclamar un papel dejando el vehículo abandonado y cree que no le pasa nada, cuando realmente esa es una práctica que las bandas de reducidores, las de haladores y otras que se especializan en los hurtos están atentas para llevar a cabo sus fechorías”.

Anota que “estos casos se registran especialmente en las zonas céntricas de las ciudades como Bogotá, Medellín, Cali, Barranquilla y Bucaramanga, entre otras. Entonces, es necesario tomar todas las previsiones de seguridad y evitar esa práctica que tenemos los colombianos de dejar los vehículos en la vía pública, en el día, en horas de la noche y en lugares de poca iluminación”.

Aseguró el dirigente gremial, que el hurto de automotores es una “pérdida económica en cadena, porque aquel ciudadano que no tiene asegurado su vehículo ni su motocicleta, pues tiene una pérdida mayúscula, pero aquellos que tienen asegurados sus automotores, pues inmediatamente también se viene en cascada una pérdida económica para estas entidades. Estos hechos terminan en el mediano y largo plazo encareciendo este tipo de seguros para todos los colombianos”.

Por otra parte, afirmó que “en estas modalidades criminales actúan bandas organizadas y redes constituidas para vivir de este delito, para vivir de la reducción de las partes y piezas de vehículos y motocicletas y ocasionalmente, por épocas, ‒exportar esos vehículos hurtados‒ a los países vecinos, en fin, es toda una industria a alrededor de este flagelo”.

Exportaciones

En cuanto a la “exportación de vehículos hurtados” a países vecinos, explicó que “las autoridades no tienen un registro específico de cuántos vehículos pueden sufrir, digámoslo así, ese proceso ilegal. Recurrentemente se ha escuchado que cuando hay escasez en Ecuador, en Venezuela y aún en Perú, países vecinos, se presentan algunos casos, de acuerdo con información ocasional de las autoridades”.

Aseguró que “sin embargo, con la relación y la normalización del comercio con el vecino país de Venezuela, este flagelo ha disminuido sustancialmente”.

“indudablemente en Bogotá, la capital del país, donde más se presentan casos inherentes al hurto de automóviles y motocicletas, registró una disminución significativa que realmente motiva a los empresarios y, por supuesto, que alentamos a las autoridades a seguir en ese proceso de enfrentar con vigor a estas redes criminales”, informó.

Advirtió que “los hurtos de automotores en Bogotá siguen siendo altos y por esta razón es necesario que los conductores y propietarios de los automotores extremen las medidas de seguridad y no los dejen en las vías públicas y en sectores oscuros o de poca iluminación, porque aquí funciona indudablemente la prevención, la autoprevención, el autocuidado y también el trabajo articulado con las autoridades”.

Las autopartes

En cuanto al hurto de las partes y piezas de los vehículos y motocicletas, Pineda Osorio, precisó que “es un flagelo bien importante, porque se ha determinado que cuando los automotores son dejados en la vía pública, se roban los espejos laterales, los computadores, las llantas, entre otros elementos, causando también grandes pérdidas para sus propietarios”.

Reveló que “los criminales paradójicamente hurtan las placas de los automotores que son utilizadas por las bandas organizadas para confundir a las autoridades y encartar, como se dice jurídicamente, a los propietarios legítimos de los vehículos con estas falsedades de las placas”.

Destacó que “ocasionalmente las autoridades hacen operativos y adelantan procedimientos en las principales zonas de repuestos. Al inicio de este año nos hemos venido reuniendo con las autoridades de las principales ciudades de Colombia, administrativas, policiales, jurídicas y de la Fiscalía, buscando retomar todas estas actividades y operativos para que realmente podamos quebrarle el espinazo a estas bandas organizadas que atacan a los colombianos con este tipo de delitos”.