EN EL primer mes del año continuaron disminuyendo las ventas del comercio de manera significativa. De acuerdo con la encuesta que Fenalco hace a sus afiliados de todo el país para la Bitácora Económica, el 80% de los empresarios reportó que sus ventas fueron inferiores o iguales (33% menores, 47% iguales), que las obtenidas en el mismo mes del año anterior. Solo un 20% afirmó que logró aumentar sus transacciones.
“El año no comenzó bien para el comercio, a pesar de la temporada escolar, en enero la demanda estuvo frenada. Con este resultado, el sector alcanza ya un año con resultados desfavorables”, dijo Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco.
Categorías como las de materiales de construcción, artículos para la remodelación del hogar, vehículos, muebles y aparatos electrónicos no logran levantar cabeza y las de calzado y vestuario se apalancaron en fuertes descuentos y promociones para superar esta difícil coyuntura.
Por su parte los tenderos no han sido ajenos a la difícil situación del comercio, toda vez que han tenido que enfrentar un deterioro en sus ventas y reducir sus ganancias, como consecuencia del impacto del aumento en el impuesto a alimentos ultraprocesados y a bebidas azucaradas, que tuvo un nuevo y notorio incremento el pasado mes.
Productos
El reporte evidencia que mientras que en enero la inflación de alimentos subió solo 0,48%, los precios de las golosinas y bebidas azucaradas se dispararon al incrementarse un 3,66% y 1,22%, respectivamente. Adicionalmente los de carnes procesadas como salchichas subieron 1,64%, es decir, más de cuatro veces la inflación de alimentos, como consecuencia directa del impuesto a ultraprocesados, afectando sobre todo a las tiendas de barrio y a las familias de bajos ingresos.
Al analizar la coyuntura laboral, el informe advierte que la creación de nuevos empleos sufrió un fuerte deterioro en el último trimestre. En este sentido, el presidente del gremio consideró que debería ser motivo de honda preocupación en el Gobierno el hecho de que la creación de empleo en el cuarto trimestre del año anterior, según cifras oficiales, haya sido la más baja desde el primer trimestre del 2021, cuando la ocupación en el país se desplomó por efectos de la pandemia.
De igual manera, las expectativas empresariales no presentan el mejor panorama. El 71% de los encuestados piensa que la situación seguirá igual o empeorará. Solo un 29% afirma que las cosas van a mejorar.
Intereses
Por otra parte, aunque el Banco de la República bajó las tasas de interés, al parecer los colombianos están aún cautelosos de endeudarse, esto pese a que el comercio recibió de manera positiva la decisión de bajar en enero solo 25 puntos la tasa de intervención. Toda vez que aún no se ha combatido totalmente la inflación, que, aunque cerró a la baja el año anterior con un 9,28%, aún está muy lejos de alcanzar la meta establecida del máximo 4%.
Igualmente, es cierto que la inflación en enero continuó con su senda descendente, en las que Colombia se encuentra bastante desalineada con otros países comparables de la región, los cuales hace ya varios meses alcanzaron tasas de inflación reducidas. Asimismo, no puede pasar desapercibido el impacto que tiene el aumento de precios de los productos incluidos en el denominado “impuesto saludable”, que por ley tuvieron un incremento del 10% en noviembre del año pasado y otro 5% entró a regir en enero de este año, lo que influye negativamente en la canasta familiar de los colombianos, especialmente de los estratos populares.
El mercado y los voceros gubernamentales reclamaban una reducción mayor en las tasas. No se puede bajar la guardia en momentos en que el Fenómeno del Niño puede impactar el precio de los alimentos.
Así que, en su próxima reunión decisoria, que será el 21 de marzo, la Junta de nuestro Banco Central muy probablemente vuelva a disminuir la tasa de referencia, ubicada hoy en 12,75%. La magnitud de dicha reducción es un secreto bien guardado. ¿Será de 50 puntos básicos? Amanecerá y veremos.