El comportamiento de los indicadores económicos de los últimos 15 días, con un dólar creciendo, el petróleo subiendo y bajando y con la bolsa de valores recuperando pérdidas, sumado a la incertidumbre que ha dejado el arribo al Gobierno del candidato de izquierda, Gustavo Petro, ha generado un clima oscuro en el país.

Sin embargo, la disparada de la cotización de la divisa norteamericana es lo que ha crispado los nervios, junto con los efectos de la crisis económica externa y el que se avizore una recesión en Estados Unidos.

Para los opositores de Petro, incluyendo al presidente Iván Duque, buena parte de lo que sucede con el dólar se debe a los mensajes confusos del nuevo gobierno. Esta misma percepción la tienen varios gremios y políticos. Sin embargo, una parte más amplia cree que los temores provienen de la situación geopolítica y socioeconómica externa.

Es por eso que el próximo ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, comentó que "el aumento en la tasa de cambio tiene su origen en factores internacionales, no creo que sea el reflejo de una fuga de capitales; sin embargo, es un tema que trabajaré con el Banco de la República", expresó.

Además, en sus declaraciones dijo que culpar a un gobierno que ni siquiera se ha posesionado de la incertidumbre económica es injusto. Para el economista hay que esperar que se empiecen a tomar decisiones como gobierno para evaluar el impacto verdadero.

Ocampo ha desmentido, en varias ocasiones, las afirmaciones según las cuales la subida del dólar se debe, en su mayoría, a la incertidumbre respecto a las medidas que pretende llevar al Senado el nuevo jefe de Estado, y dice que obedece a una coyuntura mundial, donde las monedas más afectadas en la región son la colombiana y la chilena, cuyas economías no están dolarizadas.

Para ir más allá, EL NUEVO SIGLO consultó a diferentes expertos que pudieran dar un panorama más amplio del porqué de este comportamiento y de la incertidumbre de la economía nacional.

Expectativas

Para el exministro de Hacienda Juan Camilo Restrepo, los últimos movimientos se deben, en principio, a un estado de alerta y expectativas sobre las decisiones de los Estados Unidos en materia económica.

“A mí me parece que la mayoría de las causas de todos estos trastornos económicos que estamos viviendo se deben a razones externas a Colombia, como que el Banco de la Reserva Federal de los Estados Unidos está subiendo las tasas de interés, puesto que en ese país se está dando la evolución del índice de precios al alza más alta de los últimos 40 años; otro tanto está sucediendo en Europa y empieza a haber temores de que el mundo como un conjunto esté avanzando hacia una recesión, o en todo caso a una desaceleración fuerte de la economía”, dice Restrepo.

Para el exministro, “esto explica que muchas monedas, incluida la colombiana, pero muchas otras, y casi todas las de la región, se están devaluando con relación al dólar; de manera que esa me parece que es la razón principal de las turbulencias económicas que se están viendo”, señala el experimentado economista.

Desde la academia se tiene una opinión similar. El catedrático Edgar Jiménez, de la Universidad Jorge Tadeo Lozano, considera que, “en términos generales, la incertidumbre económica o estos días complejos que hemos vivido, son más factores externos: todo lo que viene sucediendo en el mundo, expectativas frente a aumentos de tasa de interés y la subida que se da en términos de inflación alrededor del mundo. O sea, es muy extraño ver un país como Estados Unidos con inflación por encima del 9%, esas cifras eran propias de países emergentes o como nosotros en Latinoamérica, pero no de Estados Unidos”.

Especuladores

Jiménez añade que “eso es lo que tiene a una gran cantidad de inversionistas especuladores del mercado pensando qué van a hacer con el dinero, dónde lo tienen mejor refugiado, dónde está en mejores condiciones, y eso es lo que genera los movimientos que hemos visto recientemente”.

Para el académico, el problema del dólar obedece a la liquidez. “Esta, por ejemplo, tiende a preferir tener activos en dólares, o el dólar en efectivo, a la espera de mejores oportunidades y, además, tradicionalmente el dólar ha sido refugio y ha tenido la confianza de la gente, de los inversionistas, de quienes están ahorrando, y esa confianza contrasta frente a un Estados Unidos con una inflación tan alta, pero con unos datos de empleo buenos, y que al mismo tiempo se habla de recesión”.

Por su parte, Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo, cree que los dos factores influyen. “Hay algunos factores que están influenciando el movimiento de los precios de los activos locales: uno de ellos tiene que ver obviamente con el tema político, cuando estábamos en esta época de incertidumbre electoral, eso generaba volatilidad en el precio de las acciones, en el precio de los TES, que se ha venido despejando, en la medida en que por supuesto ya sabemos quién va a ser el presidente electo, ya se hizo el anuncio de quién va a ser su ministro de Hacienda; sin embargo, también hay factores externos muy importantes”, comentó.

Factores

Para el director del centro de pensamiento, estos aspectos externos tienen un peso importante. “Hay dos factores determinantes: uno que tiene que ver con la evolución del precio del petróleo, que sigue siendo determinante. El precio del petróleo mueve también el precio de las acciones relacionadas con el sector petrolero y, por supuesto, el precio del dólar. Pero el elemento más importante, diría yo, tiene que ver con la incertidumbre adicional que ha surgido a nivel internacional. Ya hay noticias de que eventualmente Estados Unidos podría entrar en una recesión. Eso aumenta la aversión al riesgo de los inversionistas y hace más atractivo el precio del dólar, fortalece esa moneda; así que esta tendencia seguramente continuará porque hay factores externos muy importantes en esta coyuntura”, explica Mejía.

En cuanto al porqué un país que tiene riesgo de recesión presenta el fortalecimiento de su moneda, añade: “En cualquier otro país pasaría exactamente lo contrario; en la economía mundial hay realmente muy pocos activos de refugio de valor, que son el oro, típicamente, y el dólar. No importa lo que pase, siempre los inversionistas cuando hay incertidumbre, cuando hay volatilidad, prefieren mantener el dólar porque es una moneda universal, se utiliza para todas las transacciones y es el mecanismo preferido justamente para acogerse en momentos en donde hay incertidumbre como la que estamos viendo actualmente”, argumentó Mejía.

Contravía

Orlando Santiago, gerente de Fénix Valor y reconocido inversor del mercado bursátil colombiano, dice que lo visto es un factor que obedece en un 75% a la elección de un gobierno de izquierda y solo en un 25% a factores externos.

“El dólar se ha valorizado 5% en el último mes frente a las principales divisas del mundo. En Colombia el peso se ha devaluado 20%. Ya es hora de dejar de decir que es un efecto internacional”, dijo el experto.

Dólar cayó $68 a $4.558

El dólar en Colombia cerró en $4.558,05, cayendo más de $68 respecto a la tasa oficial vigente ayer miércoles, de $4.627,46. Este comportamiento fue el primero a la baja que registró la divisa en varias semanas y que la llevó a registrar cotizaciones nunca vistas en el país.

En horas de la mañana la divisa alcanzó un máximo de $4.670. Sin embargo, al mediodía tuvo una fuerte caída de $58 frente a la tasa y se negoció sobre los 4.569,3.

Cabe mencionar que el valor más bajo que tuvo durante la jornada fue $4.479 pesos. Analistas indican que la divisa continuará subiendo por la incertidumbre que hay en la economía de Estados Unidos.

En lo que va de 2022, el peso se ha devaluado frente al dólar 16,23%. Y en los últimos 12 meses la caída ha sido de 21,01%.

De otro lado, otro hecho que está influyendo en el incremento del precio de la moneda, es que la Reserva Federal estadounidense (Fed) ha estado subiendo las tasas de interés para frenar la inflación, lo que repercute en los mercados mundiales y, especialmente, en países emergentes como Colombia.

A eso se suma la influencia que tengan en el mercado las decisiones políticas y económicas que se están tomando en el país.