UN AJUSTE en las proyecciones para la producción de petróleo hizo el Gobierno, teniendo en cuenta la actual coyuntura y el comportamiento de la tasa de cambio y su impacto en las exportaciones.

En efecto, en el Plan Financiero de este año rebajó sus previsiones iniciales en el Presupuesto. En la actualización de cifras se espera que el país produzca 749.000 barriles diarios, cuando inicialmente se esperaban 763.000 barriles, es decir que se rebajó 2% la meta.

Precisamente, Ecopetrol, en su más reciente manejo de cifras, estima que este año se puedan producir entre 725.000 y 730.000 barriles diarios.

Respecto al promedio del precio que pueda tener el barril, en el presupuesto se esperaba que fuera de US$ 74,5, sin embargo, ahora la cartera de Hacienda espera que sea de US$ 78, dado el comportamiento de los mercados internacionales que hoy presenta una cotización del Brent de US$ 79.

Los precios

Pese a los recortes de la OPEP, los precios no han reaccionado en los últimos días y mantienen cierta estabilidad entre US$ 77 y US$ 79.

Ante esta situación, el presidente de ANIF, José Ignacio López, sostuvo en un análisis que “vemos una caída de casi 2% en la producción, que también está acompañada de una baja en el supuesto del precio del petróleo, de tal forma que, si se mira solo el ingreso en dólares, la combinación da una caída de 9,27% en los ingresos en dólares”.

El directivo del centro de pensamiento sostuvo que si a esto se le agrega el efecto estimado en la tasa de cambio ($ 4.317 para 2024), que también se actualizó a la baja, eso incrementa la caída en ingresos en pesos hasta en 15% frente a la expectativa que había planteado inicialmente el Gobierno.

Para los analistas, hay algunos factores que pueden explicar esta caída en la producción de crudo que prevé Hacienda. Uno de ellos son los anuncios de Ecopetrol de mantener su producción casi estable, pero tener una menor actividad exploratoria, no solo de esta empresa, sino de la industria en general, así como las señales de desincentivo a la actividad petrolera y una posible menor inversión extranjera directa.

De ahí que el dato de producción esperado por los expertos dependerá mucho de que el sector pueda seguir produciendo sin mayores riesgos socio políticos, pero que, en algunas zonas, como los departamentos del Meta y el Casanare la conflictividad se ha venido aumentando y afectando al sector.

Estos riesgos de seguridad han sido advertidos por la industria en ocasiones anteriores, dado que puede afectar a las operaciones y por ende llevar a una menor producción.

A esta situación se añade la información sobre la actividad de taladros. De acuerdo con Campetrol, entre enero y septiembre se presentaba una disminución del 30,5% respecto al mismo periodo del 2022.

Exploración

Durante 2023, el promedio acumulado de taladros activos fue de 126, que significa una reducción de 12,5%, expresada en 18 equipos menos que durante el año anterior. Esto puede llevar a que la producción experimente caídas.

De todos modos, el dato sobre la disminución en la producción de crudo para este año, coincide con las señales que se evidencian en la exploración y desarrollo y variables mencionadas como la menor inversión. Pese a esto se espera que el precio del barril pueda estar por encima de los US$ 80, mejorando las cuentas que espera el Gobierno ante la entrada de más recursos.

Pero, además, los argumentos del Gobierno sobre una menor producción, despierta inquietud en el sector ante las pretensiones de acelerar la transición energética.

Con ello, sin duda, se van a sacrificar recursos petroleros que hoy son fundamentales para el país en la inversión social que requiere.