Mediante un análisis técnico de varios investigadores, el centro de pensamiento Fedesarrollo, elaboró un documento que puso a disposición del Gobierno para mejorar y adecuar la reformas pensional y laboral a lo que, verdaderamente, hoy requieren los colombianos.

El director del centro de pensamiento, Luis Fernando Mejía, dijo que la iniciativa para modificar el régimen de pensiones en el país va en la dirección correcta, pero al que se le deben hacer ajustes, sobre todo en el pilar solidario, el cual debería bajarse de tres salarios mínimos a un salario y medio, para evitar un desfinanciamiento de las AFP.

Asimismo, considera que la reforma laboral sí va en contravía a la generación de empleo, porque su efecto sería incrementar la informalidad.

EL NUEVO SIGLO: ¿Cómo es ese razonamiento técnico en el que de la reforma laboral, verdad, se pueden derivar los cambios que puede tener, también el sistema pensional?

LUIS FERNANDO MEJÍA: Los elementos fundamentales que tratamos de rectificar con este informe, es que la reforma pensional apunta en la dirección correcta, que genera un pilar solidario, que amplía la atención de aquellos adultos mayores que no han alcanzado una atención y está focalizada en las personas pobres y vulnerables. Pero, también que elimina ese sistema tan complicado que funciona de manera paralela en el régimen de ahorro individual y régimen de prima media que a veces ha generado decisiones equivocadas por parte de las personas que no tienen la suficiente información. Sin embargo, por otro lado, con la reforma laboral creemos que se va en la dirección contraria a lo que debería pretender; y es que desafortunadamente va a tener consecuencias en el mercado laboral, especialmente en aquellos que hoy no tienen trabajo y casi el 60 % de la población que son ocupados informales. Entonces, hay que compatibilizar estas dos reformas y hay que incluir elementos importantes de manera central.

Impacto

EL NUEVO SIGLO: Teniendo como base la reforma laboral y luego la pensional, ¿esto afecta la reforma a la salud?

LUIS FERNANDO MEJÍA: Uno de los elementos que se alcanzan a mencionar en varios de los programas de gobierno de los candidatos, incluyéndonos, es una reforma a las contribuciones en seguridad social en salud y ¿por qué? Un trabajador independiente tiene que aportar 12.5 % de su ingreso para ser formal, es decir tiene que pagar $125.000 solamente para el sistema de salud y, además tiene que pagar una pensión y los riesgos laborales. Indudablemente lo que termina decidiendo es quedarse en la informalidad laboral porque sabe que puede acceder al sistema de salud, a través del régimen subsidiado. Entonces, una de las alternativas que hemos puesto en la mesa de nuevo es cambiar esta forma del diseño actual en las contribuciones en salud y plantear una estructura progresiva, en donde personas que tengan ingresos iguales o inferiores a un salario mínimo de $1.160,000 de hoy, pues no tenga que contribuir al sistema de salud y que a partir de ese monto implemente una tarifa muy progresiva que arranca en 0 % y llegaría a niveles de 9 % para personas que ganan 25 salarios mínimos.

Así que, de alguna manera es un elemento que indudablemente podría incentivar la formalidad laboral, porque sería decirles a aquellas personas que tienen ingresos cercanos a un salario mínimo que no tendrían que aportar a salud.

El tope

EL NUEVO SIGLO: ¿Cree que de pronto el gobierno sí va a bajar ese tope de tres salarios mínimos que puso referente a la cuestión del ahorro y que disminuye el ingreso de los fondos de pensiones?

LUIS FERNANDO MEJÍA: El pilar contributivo obligatorio es excesivamente alto y eso crea una afectación bien importante no solamente para los flujos de ahorro privado los que ahora manejan las administradoras, sino, también en unos de los requerimientos de ahorro considerados muy alto. Según el gobierno, con ese base de tres salarios mínimos, se debería ahorrar cerca de $20 billones anuales, cerca de 1.3 % del PIB para poder evitar que haya un desfinanciamiento de las pensiones hacia adelante. Por eso, hemos planteado la alternativa a reducir ese umbral a la mitad, a 1.5 salarios mínimos para mitigar esos dos efectos que se darían con la reforma actual en términos de flujo hacia los ahorros privados por un lado y, por otro lado, para amortiguar el impacto fiscal de ese pilar, a medida que indudablemente, también afectan las finanzas públicas del Gobierno Nacional.

EL NUEVO SIGLO: Si el gobierno decide aceptar bajar a un salario y medio, ¿cuánto ahorro significa para el sistema pensional?

LUIS FERNANDO MEJÍA: Si acepta esa propuesta que ha hecho Fedesarrollo, se incrementaría el ahorro a $11 billones por el lado del ahorro privado, y por otro lado, lo que plantea hoy en día la reforma, en términos de ahorros públicos están en línea con esos requerimientos y así evitar un problema desde el punto de vista del financiamiento de las pensiones.

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Los ajustes

EL NUEVO SIGLO: Se ha dicho que con las diversas propuestas que se han planteado, no se requerirá una reforma, sino ajustar y corregir lo que está mal. ¿Qué piensa de eso?

LUIS FERNANDO MEJÍA: La reforma como está planteada creo que va en la dirección correcta, es necesaria una estructura razonable, pero tienen que hacerle ajustes a lo largo de la discusión del Congreso de la República. Y en eso, pues ahí están los elementos que hemos hablado en lo que tiene que ver con el fondo de ahorros y, también es un tema que no se discute mucho. Pero es muy importante, también ajustar los parámetros que son fundamentales para la sostenibilidad de ese componente y en este sistema que está proponiendo el Gobierno Nacional.

EL NUEVO SIGLO: ¿No es hora ya de tocar esos regímenes especiales que hoy goza un sector de la población?

LUIS FERNANDO MEJÍA: Hoy en día, solamente hay dos regímenes especiales, las de las fuerzas militares incluyendo, por supuesto la Policía Nacional y la de los maestros. El resto ya están en transición y van a desaparecer. Es una discusión importante porque cuando se habla del caso que hace el gobierno nacional en términos de las pensiones que supera los 3,5 puntos, una parte muy importante de ese gasto está destinado a los regímenes especiales. Pero en Fedesarrollo no tenemos una propuesta específica, no la hemos estudiado con detalle.

Aceptando las sugerencias

EL NUEVO SIGLO: ¿Cree que el gobierno sí va a aceptar esas sugerencias que ustedes le están haciendo como para pretender que las reformas sigan su curso en el Congreso?

LUIS FERNANDO MEJÍA: Pues, estamos viendo una reforma bien estructurada, que tiene unos elementos que van en la dirección que es necesaria para resolver los problemas del sistema pensional actual y, creo que hay una disposición de escuchar estos comentarios tanto por parte del Ministerio de Hacienda como, también por supuesto del Ministerio de Trabajo. En ese sentido, estamos confiados en que algunos elementos podrán al menos discutirse, pero, tal vez la preocupación más grande tiene que ver con la reforma laboral porque en ese caso los análisis que hemos publicado desde Fedesarrollo indican que a diferencia de la reforma pensional, la reforma laboral va en la dirección contraria a lo que debería ser un objetivo fundamental que es la generación de empleo formal. Pero nuestras cuentas lo que indican es exactamente lo contrario que desafortunadamente lo que va a hacer es generar incentivos a la contratación de empleos formales y a inducir una mayor informalidad.