Mercados prevén más alzas en tasas de interés para contener inflación | El Nuevo Siglo
Banco de la República seguiría subiendo tasas con el fin de mitigar inflación.
ENS
Domingo, 15 de Enero de 2023
Redacción Economía

El próximo 27 de enero la Junta Directiva del Banco de la República tendrá su reunión de política monetaria, en donde decidirá si continúa su tendencia al alza en las tasas de interés con el objetivo de mitigar la inflación, un dato histórico que en diciembre de 2022 llegó a 13,12 %.

Esto significó que el costo de vida de los hogares aumentó aún más en el último mes del año. Analistas prevén que el Banco Central siga con su tendencia alcista al menos durante el primer semestre de 2023, cuando se espera empiecen a ceder las tasas y con ello el IPC.

Cabe mencionar que, en su última reunión, el Banco de la República incrementó las tasas en 100 puntos básicos, ubicándolas en el 12 %. En la decisión del Emisor se tuvieron en cuenta varios aspectos. Una de las razones tuvo que ver con que en noviembre pasado la inflación anual mantuvo una tendencia creciente, superior a la esperada. La inflación total se situó en 12,5 %, pero la inflación básica (sin alimentos ni regulados) alcanzó 8,8 %. Cabe recordar que el Banco tiene como meta del IPC el 3 %.

En segundo lugar, el crecimiento anual del PIB en el tercer trimestre del año pasado alcanzó 7,1 % y superó el pronóstico del equipo técnico (6,4 %). A pesar de que en los meses más recientes se observó una desaceleración de la actividad económica, para el año completo el crecimiento estuvo alrededor del 8,0 %.

Tasas altas en la región

De acuerdo con Jackeline Piraján, economista de Scotiabank Colpatria, esta es “una tasa realmente alta si se compara con el resto de la región e incluso con las economías a nivel global”.

“Hemos visto ese reflejo por ejemplo en el crecimiento de la cartera de los créditos de consumo y en este contexto el Banco considera prudente seguir aumentando su tasa de interés”, sostuvo la analista a EL NUEVO SIGLO.

En este contexto el mensaje hacia los consumidores sigue siendo preferir instrumentos de ahorro o depósitos remunerados, en lugar de adquirir nuevas deudas. Ya el costo de crédito se está incrementando, la tasa de usura supera el 40 % y las señales del Banco de la República sugieren ser un poco más prudentes con esas decisiones de gasto.

Movimientos

Por su parte, David Cubides, director de Investigaciones Económicas de Alianza Valores, sostiene que la inflación de cortísimo plazo observada no cambia con los movimientos de tasas de interés, es decir, que a través del canal del crédito se empiezan a ajustar las tasas del Banco Central y posteriormente las de toda la economía, con el objetivo de que se entre a una senda de moderación económica y eventualmente también la inflación empiece a retroceder. Pero esto por supuesto toma un tiempo.

De acuerdo con estas consideraciones del experto las decisiones de política monetaria que tome el Emisor deberán seguir por ahora en el camino alcista. “Mediante esta decisión, la Junta Directiva debe continuar con el proceso de ajuste de la política monetaria en el mediano plazo, lo que permitirá llegar a una inflación de 3 %, con un crecimiento económico sostenible”, dijo Cubides. Para el experto la inflación en 2023 podría terminar en 9,4 %.

Por otra parte, Andrés Felipe Giraldo, director del departamento de Economía de la Universidad Javeriana, las tasas no aumentarán de manera significativa “porque el mismo Banco de la República, el Ministerio de Hacienda y en general las proyecciones para el otro año son que se bajen las presiones inflacionarias y por ende los intereses”.

Hay que tener en cuenta que “el Emisor prevé que para finales de 2023 la inflación total se encuentre alrededor del 7,5 %, por lo cual no se requerirá que sigan subiendo los tipos”, añadió el analista.

De este modo es posible que cuando se evidencie el descenso de la inflación, el Emisor podría bajar las tasas de interés. De acuerdo con Giraldo, en caso de ser así, las tasas de interés podrían situarse entre el 9 % y 10 % a finales del siguiente año.

Para los analistas del mercado, más allá del dato total, la principal preocupación para la Junta del Banco de la República es que el alza de la inflación básica no da tregua. Sin embargo, hay que tener en cuenta que la inflación es una tendencia en todo el mundo y que bancos centrales han tenido que subir sus tipos con el objetivo de mitigar el IPC.

Entre tanto, hay que mencionar que las decisiones de la Reserva Federal de Estados Unidos respecto al incremento de sus tasas pueden estar enviando señales para que otros bancos, como es el caso de Colombia, continúen con tendencia alcista en sus tasas. 

Costo de vida 

El aumento en el costo de vida, que no dio tregua durante el 2022, afectó el bolsillo de los colombianos, en especial en el incremento de los precios de los alimentos.

La aceleración de los precios al consumidor, con 13,12 % en diciembre de 2022, se ha acentuado en nuestro país, de allí que hoy sea fundamental encontrar salidas o medidas que desde el Gobierno puedan apaciguar ese impacto en el ingreso de los colombianos.

No hay duda de que el incremento en el costo de vida de los hogares hace ver insuficiente el aumento del salario mínimo, que subió en 16% para este año, en un acuerdo entre el Gobierno, las centrales obreras y los gremios.

Alternativas

Para la analista Laura Peña, economista de BBVA Research, “es urgente que ya desde el Gobierno se presenten alternativas como un subsidio a los productores de alimentos y tratar de reducir la intermediación. Desde BBVA Research prevemos que los altos niveles de inflación continúen transmitiéndose, especialmente durante la primera mitad del 2023, seguido de una moderación del dato, que puede cerrar el año cercano al 8 %”.

Para la presidenta de la Cámara de Comercio Colombo Americana, AmCham Colombia, María Claudia Lacouture, “la inflación por encima de expectativas debe ser llamado a reflexión sobre medidas para moderar el costo de vida de los colombianos, que pudo ser más alto, pues costos de insumos para producción y servicios fueron mucho mayores”.

Hay que mencionar que con el dato de IPC que Colombia cerró el año (12,13 %), el país se posiciona como el tercero de América Latina con el Índice de Precios al Consumidor más alto, luego de Argentina con 95 % y Venezuela con 300 %.



Meta de inflación 

Desde mediados de 2021, la inflación se ha alejado de la meta del 3 % y se espera un nivel superior a 11 % al finalizar 2022.

El aumento de la inflación es el resultado de la confluencia de múltiples fenómenos, entre los cuales se destacan choques de costos externos e internos históricamente altos, y unos niveles de demanda dinámicos. A esto se suman procesos de indexación a tasas de inflación más altas y presiones cambiarias sobre los precios en un contexto de deterioro de las condiciones financieras internacionales.

Según el Banco de la República, las acciones de política monetaria están encaminadas a conducir la inflación a la meta del 3%, velando por la sostenibilidad de la actividad económica. La determinación del horizonte de convergencia hacia la meta tiene en consideración el dilema entre una reducción más rápida de la inflación y los costos de corto plazo en términos de producto y del empleo que ello podría conllevar. 

En este contexto adverso, desde septiembre de 2021 la Junta ha incrementado la tasa de interés de política desde el 1,75 %, nivel que en su momento juzgó necesario para enfrentar anticíclicamente los desafíos recesivos de la pandemia, al 12 % actual. Este ajuste ha sido consistente con el objetivo de llevar la inflación al 3 %, inicialmente mediante un proceso de normalización de la política monetaria y más recientemente asumiendo una postura contractiva.

Con la información disponible y dado el tamaño de los choques registrados, la inflación anual se situaría al final de 2023 alrededor del 7 %, trayectoria compatible con el retorno de la inflación a la meta del 3 % al terminar 2024.

La reducción de la inflación se facilita si quienes determinan precios y salarios incorporan en sus decisiones la senda esperada de convergencia hacia la meta.