Nuevos frentes en la batalla contra la inflación en Colombia | El Nuevo Siglo
LOS PRECIOS de los alimentos comenzaron a bajar, con lo que se espera que la inflación vaya cediendo. /Archivo
Sábado, 11 de Marzo de 2023
Redacción Economía

El impacto del Índice de Precios al Consumidor (IPC) es uno de los mayores problemas que hoy tiene la economía colombiana.

Entre enero y febrero, la inflación en el país llegó a 3,4 %, superior a la meta promedio de largo plazo del Banco de la República de 3%, con lo que demuestra que el costo de vida no va a aflojar este año.

Con ello, algunos analistas consideran que, en el mejor de los casos, el Índice de Precios al Consumidor, que mide la inflación, va a estar entre 8 % y 9 %.

Pese a que la cifra de febrero de 1,66 % fue menor que la obtenida en enero de 1,74 %, sigue siendo alta, aunque el Gobierno mostró su optimismo sobre este resultado.

El presidente Gustavo Petro dijo en su cuenta de Twitter que “esperemos que la inflación que disminuye frente al precio del productor se traslade al precio al consumidor. Si no, tendríamos fenómenos de especulación que hay que controlar”.

Menor ritmo

Por su parte, el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, dijo que “celebro que la inflación del país tocó techo y, en particular, que se redujo el ritmo anual de inflación de los hogares de ingresos bajos y de productos agrícolas. En marzo comenzaremos a ver un menor ritmo de aumento de los precios”.

Por su parte, la presidenta de la Cámara de Comercio Colombo Americana, AmCham Colombia, María Claudia Lacouture, dijo que “a pesar de tener una reducción frente a enero pasado, la inflación fue de 1,66 % en febrero de 2023, manteniendo aún niveles altos. Hay una muestra de estabilización, aunque la variación anual de 13,28 %, según el DANE, no se presentaba desde marzo de 1999”.

Indicó la dirigente que “es necesario analizar otras medidas, además de las tasas de interés, para hacer que la baja de la inflación sea tendencia y evitar que los precios, en especial de los alimentos, sigan subiendo”.

Asimismo, Jorge Restrepo, docente de economía de la Universidad Javeriana, dice que ante el panorama de febrero quedan preocupaciones “Aun así, la inflación al consumidor sigue alta, muchas veces por motivos precautelativos o defensivos y para cubrir salarios al alza”.



Elementos que inciden

Por su parte, el presidente de ANIF, Mauricio Santa María, dijo en un análisis, que “el segundo mes del 2023 sigue mostrando algunos signos de indexación, en este caso de la mano con el alza en el precio de matrículas educativas. Observamos que en la variación anual, los alimentos y bebidas no alcohólicas siguen siendo el factor con mayor influencia sobre el resultado agregado. Por lo tanto, y al ser un gasto asociado a bienes de primera necesidad, el efecto sobre los hogares pobres y vulnerables sigue siendo mayor. No obstante, a nivel mensual, la educación es la división con mayor variación, generando un efecto más significativo en los hogares de ingresos altos”.

Sostiene el dirigente del centro de pensamiento que “la tendencia de la inflación anual se mantiene alcista, alcanzando nuevos máximos y siguiendo la tendencia observada durante el 2022. No obstante, la inflación sigue estando asociada a choques transitorios naturales del inicio del año. El menor ritmo de crecimiento en el precio de los alimentos y la dinámica de precios en centros de abasto nos hacen considerar la posibilidad de que la inflación llegue a un techo en los próximos meses, por lo que seguimos anticipando una desaceleración en el alza del costo de vida para los colombianos, especialmente para aquellos con menores niveles de ingresos”.

De acuerdo con la investigación de ANIF, “siguen existiendo factores de riesgo que podrán catalizar el nivel de precios, como la amenaza de bloqueos al interior del país que obstaculicen las cadenas de suministro y la devaluación del peso colombiano frente al dólar. Dos factores que no podemos descartar dada la incertidumbre frente a la estabilidad social, política y económica en el país”.

Consumo

De otra parte, históricamente enero y febrero son los dos meses del año donde las familias tienen más gastos por matrículas, cuotas de vivienda o arrendamientos, transportes, y en que se supone que el consumo es alto.

Sin embargo, en 2023 estas características han variado ante la caída de la demanda de consumo por el impacto de la inflación y de las altas tasas de interés. Muestra de ello es el reporte del Bancolombia al respecto, en el que indica que en febrero se registró el crecimiento más bajo en los últimos 24 meses en términos nominales (1 %) y una caída del 11 % de variación real teniendo en cuenta los efectos inflacionarios.

Indica el informe que estos resultados reflejan las complejidades del contexto económico actual, caracterizado por el surgimiento de manera simultánea de una serie de elementos críticos: un índice de precios al consumidor cerca de máximos históricos y, por consiguiente, ajustes al alza en las tasas de interés.

Es importante mencionar la existencia de una mayor incertidumbre por un panorama a nivel internacional adverso, en gran medida por las tensiones geopolíticas y una coyuntura local compleja que ha profundizado la pérdida de confianza del consumidor.

Tendencia

El índice de consumo Bancolombia con ajuste estacional, en los últimos meses ha presentado una tendencia a la baja; en febrero alcanzó 91 puntos, 9 por debajo de los niveles observados en 2021, y con una caída de 16 puntos con respecto al mes anterior. Lo anterior se encuentra en línea con otros indicadores líderes que reflejan un proceso de desaceleración de la economía colombiana y una menor capacidad de compra por parte de los hogares vía una mayor inflación.

“Por otra parte, de acuerdo con nuestra información, la gran mayoría de comercios han reportado incrementos en las ventas en sus establecimientos vía mayores precios (crecimiento nominal); sin embargo, este comportamiento no viene acompañado de un mayor número en unidades vendidas, tal como lo refleja un crecimiento real negativo y la disminución en el número de establecimientos activos en febrero, registrando una caída del 15 % frente a enero de 2023”, sostiene el análisis del equipo de investigadores a cargo de Juan Pablo Espinosa.

La rebaja de las tasas de interés

Desde el jueves 10 de marzo, cuando Bancolombia anunció que bajará al 25 % el costo de las compras de cerca del 50 % de sus tarjetas de crédito, varios bancos y otras entidades financieras comenzaron a estudiar medidas similares.

Davivienda, Banco de Bogotá, Banco de Occidente, BBVA y Scotiabank Colpatria anunciaron una rebaja en los intereses del plástico bajo algunas condiciones.

En esta aparente decisión de los bancos para aliviar el costo del dinero a sus clientes, dado el rumbo que está tomando el mercado y que los bancos quieren aprovechar, también el Banco de Occidente anunció una reducción del 57 % en la tasa de interés de todas sus tarjetas de crédito, en las compras de alimentos y supermercados.

Asimismo, la entidad financiera recordó a sus clientes los beneficios adicionales que ofrece, como el pago mínimo alterno que permite diferir las compras a 48 meses, respetando la tasa pactada y evitando moras.

De otro lado, el Banco de Occidente, filial del Grupo Aval, anuncia que a partir del 15 de marzo reducirá en 57 % las tasas de interés para las compras de alimentos y supermercados que realicen todos sus clientes, con cualquier tarjeta de crédito. Con esta medida, la tasa de interés para estas categorías será de 1,53 % mes vencido (mv), es decir, 20 % efectivo anual (ea).

Mario Pardo Bayona, presidente de BBVA Colombia, dijo que el BBVA redujo a 20 % la tasa de interés para sus tarjetas de crédito de bajo monto, para pensionados y Fuerza Pública. Este beneficio aplicará para los clientes existentes y clientes nuevos con tarjetas de crédito Visa Clásica, MasterCard Standard, Mastercard Senior y Pensional Senior (para pensionados) y Mastercard Héroes (para las Fuerzas Militares y Policía) con cupo de hasta $4 millones en compras en las categorías de supermercados, vestuario y calzado, estaciones de gasolina, educación, servicios de salud, impuestos y servicios públicos. El beneficio aplica de forma automática a partir del 15 de marzo.

Bajo este mismo panorama, también el Scotiabank Colpatria comunicó que disminuirá las tasas de interés de las tarjetas de crédito.