La devaluación durante 2019 estaría cercana al 8% frente al comportamiento de 2018
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Teniendo en cuenta las variables del mercado cambiario, varios analistas consideran que el precio del dólar podría terminar el año en $3.380 con una devaluación del peso cercana al 8%. Tras un incremento superior a los $481 en lo que va corrido del año, el gerente de Investigaciones Económicas de Acciones & Valores, Wilson Tovar García, pronosticó que el precio máximo de la divisa este año llegará a $3.380, mientras que el máximo de 2020, se ubicaría en $3.780.
“La incertidumbre global permanece. El mundo anda al vaivén de las tensiones comerciales entre China y Estados Unidos, sumado a una sobreoferta de petróleo en el ámbito mundial, sumado a un déficit comercial elevado y un malestar social y político generalizado (especialmente en América Latina) que nos ha afectado”, comenta el analista.
El peso colombiano no fue ajeno al comportamiento de las monedas de la región. En efecto, durante noviembre la moneda registró el tercer peor desempeño a nivel global y de la región, con una desvalorización de 4,4% frente al dólar, que la llevó a alcanzar los $3.547,7, nivel máximo histórico. Sin embargo, resulta curioso que en la actual coyuntura la moneda y la prima soberana del país han seguido rumbos opuestos.
Según los analistas del Bancolombia “a nuestro juicio, hay dos razones por las que la moneda está siendo la principal vía de escape de las tensiones que se viven en la región. La primera es que en los últimos años los mercados locales de deuda pública se han vuelto el principal punto de focalización de los flujos de capitales externos. Lo anterior, ha llevado a que el CDS y el spread sobre la curva de Tesoros sea un termómetro menos representativo del apetito por riesgo. La segunda está relacionada con que, a lo largo de 2019, el peso ha sido empleado como vehículo de cobertura cruzada de las exposiciones de monedas emergentes de operadores como los fondos”.
Más indicadores
Adicionalmente, los indicadores son sensibles a las menores estimaciones de crecimiento mundial y regional.
En ese sentido, el Departamento de Investigaciones Económicas de Acciones & Valores proyecta un menor dinamismo en el comportamiento del Producto Interno Bruto (PIB) frente a lo esperado al comienzo de este año, que para el cierre de este año se proyecta en 3,2% y para el 2020 se estima en 3,3%. “Bajamos nuestra estimación inicial de 3,5% a 3,3% porque se verá un menor aporte en el ritmo del consumo de los hogares y una reducción en la dinámica de la formación bruta de capital (mayor temor de abrir nuevos negocios) ante un panorama global más desafiante: un precio del petróleo que calculamos en US$50 en su referencia WTI”, comenta el especialista.
Esa situación también se refleja en el comportamiento de los precios de los títulos de tesorería (TES), que se constituyen en el segundo mecanismo de financiación del gobierno, después de impuestos.
La tasa del título con referencia a 10 años (2030) llegó a subir cerca de 60 puntos básicos en los últimos cuatro meses por cuenta del grado de nerviosismo de los inversionistas. Igualmente, el desempleo sigue siendo el lunar de la economía colombiana.
Las acciones
Buena parte de ello se explica por el aumento de la productividad y tecnología de los diferentes sectores. “Gracias a ello se han perdido cerca de 1.500.000 puestos de trabajo en los últimos tres años, en sectores como comercio y agro. El llamado es a crear estrategias de creación de puestos de trabajo de calidad que vayan acorde con esta era digital”, afirma Tovar.
Según el especialista, a pesar de la las valorizaciones registradas en algunos activos este año, aún existe espacio para el crecimiento de las acciones colombianas, con una valorización de 21% este año, especialmente del sector financiero y retail. Se observa un repunte adicional porque en medio del enfriamiento global, Colombia sigue recuperando terreno desde 2017.
“Vemos con buenos ojos el sector financiero porque el consumo sigue apalancado en el crédito, además de que hay una reactivación en la compra de vivienda por cuenta de la estabilidad en la tasa de interés del Banco de la República, que si mucho subirá a 4,50% en el primer trimestre de 2020”, según Tovar.