Con reserva y hasta temor recibieron los mercados y los inversionistas el gobierno de Gustavo Petro por los anunciados cambios radicales que haría, especialmente en materia económica. Sin embargo, a diez meses de su posesión la crisis política desatada, en entre otras cosas, por la forzada salida del gabinete de la considerada mano derecha del mandatario, así como denuncias de presunta financiación irregular a su campaña, ha hecho que se fortalezca el valor del peso y de los bonos de la nación.
Esto que suena paradójico se debe a que los inversionistas consideran que lo que resta del mandato (tres años y dos meses) Petro se concentrará más en defenderse que en aprobar los cambios prometidos.
Así lo señala un artículo de Bloomberg donde afirma que "desde que asumió el cargo, Petro asustó repetidamente a los mercados, incluso criticando al banco central y sacudiendo el liderazgo de la compañía petrolera estatal. Ahora, muchos de esos mismos inversionistas se están volviendo optimistas sobre el país, apostando a que los problemas de Petro hacen que sea menos probable que pueda llevar a cabo su agenda. Eso ayudó a impulsar un repunte en los bonos de la nación y provocó que el peso subiera un 15,3% este año, lo que la convirtió en la moneda principal con mejor desempeño".
De igual manera, el medio económico agregó que "los bonos en dólares han superado a sus pares durante el último mes, y los fondos administrados por BlackRock Inc., Schroders Plc., y Barings LLC. han invertido dinero en bonos del gobierno en moneda local, incluso después de la reciente subida, Snead dijo que los activos siguen siendo baratos, lo que significa que hay espacio para que continúe el repunte. La reducción del déficit de cuenta corriente de Colombia, la mejora de las perspectivas fiscales y las entradas de las corporaciones para pagar impuestos también están impulsando al peso. La moneda extendió sus ganancias en las primeras operaciones del miércoles, apreciándose hasta 4.181 por dólar en Bogotá, su nivel más fuerte desde agosto pasado".
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Asimismo, el artículo sostiene que desde el punto de vista de los inversionistas, todavía hay mucho riesgo porque "Petro aún tiene tres años en el cargo y su hostilidad hacia la industria petrolera y sus cambios de gestión en Ecopetrol SA han alarmado a algunos tenedores de bonos de la perforadora estatal".
La oficina de prensa del Jefe de Estado remitió una solicitud de comentarios a las carteras de Hacienda y del Interior. El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, dijo por teléfono que el repunte del peso no se puede atribuir a los escándalos recientes, ya que inició desde antes.
Finalmente, el medio trae a colación las polémicas por las que está atravesando el Gobierno, como una investigación cada vez más amplia sobre denuncias, las 'chuzadas' telefónicas, presunto abuso de poder y posibles incumplimientos de las reglas de financiamiento de campañas por parte de algunos de los colaboradores más cercanos del presidente.
Las revelaciones ahora amenazan efectivamente con suspender la agenda de Petro mientras los partidos políticos de Colombia cambian su enfoque a las elecciones de octubre, cuando los votantes elegirán alcaldes y gobernadores estatales.