En el marco de la presentación del informe de política monetaria que hizo esta semana en el Senado el gerente general del Banco de la República, Juan José Echavarría, previno que un incremento al salario mínimo en 2020 por encima de la inflación impactará la cifra de desempleo que tiene el país.
El pronunciamiento se da a pocos días de que empresarios, organizaciones sindicales y el Gobierno se reúnan en la Mesa de Concertación Laboral con el fin de discutir el tema.
Echavarría afirmó “estamos creciendo y no se está generando empleo. Un incremento al salario mínimo puede impactar el desempleo”, a la vez que manifestó que la tasa de desocupación va en aumento por el deterioro de la demanda laboral y que menos personas están buscando empleo, por cuanto el urbano está paralizado y el rural ha caído notablemente.
En desarrollo de esta sesión en la Comisión Tercera del Senado de la República, Echavarría manifestó que el choque del salario mínimo, en los dos últimos años, ha sido del 6%, teniendo un impacto en la inflación, desempleo y la informalidad.
Agregó que la inflación en el país ha aumentado a un 3,8% y se espera que baje al 3%.
Sin embargo la ministra de Trabajo, Alicia Arango, reaccionó señalando que no se debe seguir culpando al salario mínimo por el desempleo y el crecimiento de la producción.
“Aquí todo lo malo es por el salario mínimo en este país y eso no puede suceder”, cuestionó. Al tiempo que se preguntó ¿Por qué los salarios de la gente que gana bastante dinero no dicen nada?; porque eso no les importa”.
Resaltó la ministra Arango que “este Gobierno hará todo lo posible, dentro de sus posibilidades fiscales, por sacar un mejor salario mínimo que se pueda; porque nosotros no estamos de acuerdo con disminuirlo, pero si a mí me toca hacer eso yo renuncio”.
El mes anterior el presidente de ANIF (Asociación Nacional de Instituciones Financieras), Sergio Clavijo, puso los primeros ingredientes a la discusión del incremento del salario mínimo para 2020, al proponer que no puede ser superior a los $37.000 para no afectar la generación de empleo. Es decir, que se pasaría de $828.100 a los $865.400.
Por ello, estimó que el ajuste no puede ser superior al 4,5%, que reúne la inflación causada, la proyectada y la productividad.
Reiteró Clavijo que “como la productividad este año estará creciendo cerca del 0,5%, y la inflación cercana al 4%, el Gobierno debería estar dando, desde ya, la señal a la Mesa de Concertación de que la negociación salarial no vaya a superar el 4,5%. De lo contrario, estaríamos agravando el tema del desempleo”.
También planteó el Presidente de la ANIF para combatir el desempleo juvenil, que es superior al 20%, estudiar una propuesta de contratación laboral con un salario del 75% del mínimo durante su etapa de formación y por no más allá de dos meses.