El eterno debate sobre armas en EE. UU. | El Nuevo Siglo
Jueves, 26 de Octubre de 2023

La controversia sobre una regulación más fuerte a la compra, venta, tenencia y porte de armas en Estados Unidos se volvió a prender luego del ataque que un exintegrante del Ejército perpetró la noche del miércoles en una bolera y un gastrobar de la ciudad de Lewiston, en el estado de Maine, al noreste del país.

Aunque inicialmente se habló de 22 personas asesinadas, las autoridades terminaron confirmando que fueron 18 las fallecidas por el ataque, cuyo autor huyó de la escena del crimen y ayer era buscado por más de mil efectivos de la Policía y otros organismos de seguridad.

Si bien se temió que la matanza estuviera relacionada con el llamado de los grupos musulmanes radicales para atacar objetivos occidentales como retaliación a la legítima ofensiva israelí en la Franja de Gaza contra el grupo terrorista Hamás, las hipótesis de las autoridades federales apuntaban ayer a un acto criminal aislado perpetrado por un instructor certificado de armas y reservista militar, cuya identificación y fotografía fueron dados a conocer horas después de la tragedia.

Si bien el gobierno Biden ha tratado de restringir la compra y venta de armas en Estados Unidos, los sectores que defienden el libre acceso a estas sostienen que la solución a los tiroteos no pasa por acabar el acceso a pistolas, ametralladoras o fusiles. De hecho, estudios en mano, destacan la alta cantidad de casos en los que las personas que están armadas de forma legal logran evitar ser asesinadas o heridas por delincuentes que portan aparatos bélicos que adquirieron en el mercado negro.

En medio de la precampaña presidencial lo ocurrido en Maine generó un intenso debate entre sectores de los partidos Demócrata y Republicano que, una vez más, ratificaron sus reconocidas posturas frente al tema armamentístico.

Se habló, por ejemplo, de que en lo corrido de 2023 no menos de quince mil personas han muerto en Estados Unidos por violencia armada, exceptuando a quienes se quitaron la vida con armas de fuego. Igualmente, se mencionó que en este país un adulto de cada tres posee al menos un arma y casi un adulto de cada dos vive en una casa donde hay un arma.

Visto todo lo anterior, resulta claro que en la campaña electoral que está tomando ritmo el tema del acceso a las armas será, de nuevo, uno de sus pulsos políticos más fuertes, sobre todo porque es un asunto cada vez más delicado para la opinión pública, tanto entre partidarios como detractores de su comercio libre.