Hacia el voto finish | El Nuevo Siglo
Domingo, 9 de Octubre de 2011

* Se consolidan Petro y Peñalosa


* Parody, tercería. ¿Recapacitarán Galán y Luna?

 

Las cosas en la campaña para la Alcaldía de Bogotá no se han removido de acuerdo a lo presupuestado por las alianzas recientes. Si bien el retiro intempestivo de Antanas Mockus, sin razón dicha sobre la materia, permitió que Gina Parody se afianzara en el tercer lugar, pasando a Carlos Fernando Galán, la punta sigue disputada, según todas las encuestas, entre Gustavo Petro y Enrique Peñalosa.
Al parecer, ya no es posible una unión entre Galán y David Luna, que sería lo lógico, lo que a su vez, removería de nuevo el tablero en la pelea por el tercer lugar, lo que algunos llaman tercería. Ambos, sin embargo, parecen tranquilos con sus porcentajes pero no es de descartar que a 20 días de las elecciones al final la polarización termine por imponerse.
El hecho en todo caso es que Parody logró una buena cantidad de puntos heredados de Mockus, pero también es cierto que otros se fueron para las diversas candidaturas, de suerte que no se dio el cúmulo esperado para obtener el primero o el segundo lugar. Aún así, la nueva plataforma le permite a Parody mayor holgura e intentar por todos los medios introducirse en la disputa real. Para ello tendría que conseguir adhesiones adicionales, seguramente de otros sectores diferentes, y con esto encontrar los puntos que le faltan. Si posiblemente enfrentará a Petro o Peñalosa en la lid directa, encabezando el pelotón, el escenario sería diferente.
El hecho conciso es que en las diversas encuestas de esta semana Petro y Peñalosa se reparten el primer lugar, lo que en términos latos, por fuera de los colchones que suelen darse a sí mismos estos sondeos, significa que habrá un cabeza a cabeza. Y será ese el momento en que se determine si la ciudad estará regida por el uribismo o la disidencia encarnada en Petro.
Ambos hasta el momento han hecho una campaña relativamente tranquila en medio de la estela de escándalos dejados por la administración de Samuel Moreno. La verdad, la alcaldesa Clara López ha sido artífice de superar la crisis sin mayores contratiempos y dejar que las instituciones preponderen.
Vendrá en tanto, con mayor énfasis, la descalificación de Gustavo Petro por su antigua pertenencia al M-19, lo que se demuestra en sus desfavorabilidades, pero igualmente es claro que desde que se pactó la reconciliación, hace dos décadas, ha sido figura emergente del nuevo país desde la Constitución de 1991, es decir, muchísimo más en la paz que en la guerra. De hecho Petro fue reconocido en la Cámara de Representantes y el Senado como uno de los baluartes de las corporaciones, lo que le permitió igualmente adelantar una campaña presidencial en que solía ganar los debates televisados, luego de sorprender al imponerse en la consulta popular del Polo Democrático al sector radical encabezado por Carlos Gaviria, que se daba de seguro triunfador. Pero lo que lo llevó a consolidarse en Bogotá, luego de las votaciones más altas de Cámara y Senado, fueron sus denuncias contra la corrupción del gobierno Moreno, lo que hoy lo tiene de figura principal contra las malas prácticas administrativas, al mismo tiempo que dejó de lado el entronque con el izquierdismo extremista, que sacó su propio candidato.
En resumen, Petro se catapultó como líder en la paz y está por verse si Bogotá puede replicar lo ocurrido en Brasil y Uruguay al respecto. Frente a ello, se vislumbra un Peñalosa mucho más tranquilo explicando sus programas, con la figura del ex presidente Uribe siempre detrás. Peñalosa tiene tras de sí la experiencia administrativa reconocida, pero también tiene en las encuestas amplias desfavorabilidades, como Petro. Curioso, pues, que quienes puntean tengan ese alto índice de resistencia, pero ello paradójicamente también es lo que hace que sus favorabilidades sean más férreas y potentes. Y es por esa vía inédita, justamente, que se definirá la Alcaldía en lo que promete ser una final de infarto.