En Guatavita y Sesquilé, Transmisión del Grupo Energía Bogotá (GEB) inauguró dos aulas interactivas, con las que unos 204 estudiantes pueden acceder a centenares de contenidos virtuales, a la tecnología y al conocimiento, para mejorar la calidad de su educación.
El proyecto que cuenta con el apoyo de la Transportadora de Gas Internacional (TGI) -una de sus filiales- inauguró las aulas solares interactivas que construyó en Cundinamarca en las instituciones educativas ‘Pío12 sede Manuela Beltrán’, en Guatavita, y ‘Méndez Rozo sede San José’, en Sesquilé, para acercar más a la tecnología y al conocimiento a los niños de la región, que hace parte de la zona de influencia de los proyectos de energía eléctrica Norte y Sogamoso, y además del embalse de Tominé, un activo de la compañía.
El aula solar interactiva es una construcción ecoamigable de 63 metros cuadrados que cuenta con un sistema energético alimentado por paneles solares que le dan independencia de energía y una autonomía de 24 horas. Además, tiene tablero y mesa interactiva, mobiliario, video beam, 30 tabletas electrónicas, sistema de sonido, lentes de realidad virtual y una serie de contenidos interactivos de más de 800 títulos avalados por el Ministerio de Educación Nacional.
El proyecto ‘Educación Solar Interactiva’ hace parte del programa ‘Energía para aprender’, de Transmisión del GEB, inscrito en el portafolio de creación de valor compartido de esta compañía.
Las aulas de Sesquilé y Guatavita son dos de las 5 que se entregarán en esta segunda fase del proyecto. En la primera se construyeron seis en las instituciones educativas ‘Guamachito’, en Hatonuevo (La Guajira); ‘Silvestre Francisco Dangond Daza’, en Villanueva (La Guajira); ‘Rodolfo Castro Castro’, sedes Juan de Atuesta y Santa Rosa, en Valledupar; ‘Benito Ramos’, en El Paso (Cesar), y Alto Cauca, en Marsella (Risaralda).
Fredy Zuleta Dávila, gerente General de Transmisión del GEB, aseguró que en esta segunda fase se contemplan aulas similares en colegios de 11 departamentos, para beneficiar a cerca de 3.500 estudiantes de zonas vulnerables y rurales.
“Esta iniciativa, que abre las puertas y ventanas del conocimiento a los beneficiarios, reconoce a la educación como detonador del desarrollo individual, familiar y colectivo, incrementando la calidad de vida para combatir la pobreza y la desigualdad, y favoreciendo así la inclusión social y el progreso de las comunidades, que es uno de los objetivos esenciales de la compañía y una de las partes más importantes del retorno de la inversión en nuestros proyectos de transmisión y activos en operación”, puntualizó.