El Arsenal, segundo clasificado de la Premier League, y el Manchester United, defensor del título, fueron las víctimas más ilustres del miércoles en los octavos de final de la Copa de la Liga inglesa.
En el caso del Arsenal, que hizo rotaciones y dio minutos a jugadores menos habituales, su caída fue en un derbi ante el West Ham por 3-1, que puso punto final a su andadura en una competición que estaba lejos de ser prioritaria en su sobrecargado calendario.
El entrenador español Mikel Arteta, con la Premier League y la Liga de Campeones en mente, optó por dar tiempo de juego a hombres que suelen ser suplentes y esa rotación no tuvo buen resultado para los 'Gunners', que no tuvieron opción en el partido.
Habían dominado el duelo de las estadísticas en la primera parte y habían llegado más antes del descanso, pero fueron los 'Hammers' los que alcanzaron al descanso con ventaja, con un saque de esquina lanzado por Jarrod Bowen y que el defensa Ben White envió involuntariamente de cabeza al fondo de la portería de su equipo (minuto 16).
Mohammed Kudus envió luego entre las piernas del defensa brasileño Gabriel, demasiado estático, para ampliar la cuenta (50), antes de que un disparo de Bowen, desviado por un defensa del Arsenal, pusiera el tercero (60).
Arteta trató de invertir la tendencia a lo largo del partido, dando entrada a Bukayo Saka, el ex-Hammer Declan Rice y el capitán Martin Odegaard. Ese último puso el tanto del honor del Arsenal, ya en los instantes finales (90+6).
"Estoy realmente decepcionado, yo soy el responsable de esto. No estuvimos lo suficientemente bien, no competimos bien", admitió Arteta.
El otro plato fuerte del día se servía en Old Trafford, donde el Manchester United fue claramente superado 3-0 por el Newcastle, que se apuntó la victoria con tantos del paraguayo Miguel Almirón (28), Lewis Hall (36) y Joe Willock (60).
El Newcastle, que a finales de septiembre ya eliminó de este torneo al Manchester City, se tomó así una particular revancha este miércoles respecto al equipo que le ganó la final de la Copa de la Liga la pasada temporada.
El Manchester United, por contra, sigue con su camino errático esta temporada y la presión es cada vez más fuerte sobre su entrenador, Erik Ten Hag.
"Tenemos que asumir la responsabilidad, yo mismo tengo que hacerlo. Lo siento por los aficionados", afirmó el técnico neerlandés.
Liverpool y Chelsea, adelante
En el resto de partidos, el Liverpool, que también contó con varios suplentes aunque Mohamed Salah fue titular, avanzó a cuartos de final al ganar 2-1 en el terreno de otro equipo de Premier, el Bournemouth.
El neerlandés Cody Gakpo (31) adelantó a los 'Reds' y en el 64 igualó para los locales el neerlandés Justin Kluivert (64). El tanto de la victoria del equipo de Jürgen Klopp lo consiguió el uruguayo Darwin Núñez (70), que había empezado el duelo en el banquillo.
"Los partidos de este tipo son muy ajustados y es importante ganar. Hay millones de maneras de ganar un partido, afortunadamente logramos encontrar una de ellas", celebró Klopp.
El Chelsea de Mauricio Pochettino, que en la Premier League está en una situación complicada (11º), cumplió sin sobresaltos en esta ronda, con una victoria 2-0 en casa ante el Blackburn Rovers, de segunda categoría, con tantos del francés Benoît Badiashile (30) y de Raheem Sterling (59).
Esta victoria da un poco de oxígeno a los 'Blues', cuatro días después de su derrota liguera 2-0 ante el Brentford.
El Everton, que superó 3-0 al Burnley, y el Fulham, que venció 3-1 en la cancha del Ipswich Town (2ª), también estarán en cuartos de final.
El martes se habían clasificado dos equipos de divisiones inferiores, el Middlesbrough (2ª) y el Port Vale (3ª), que según el sorteo efectuado el miércoles se enfrentarán en cuartos de final.
Los otros tres cruces de cuartos serán entre formaciones de primera división: Everton-Fulham, Chelsea-Newcastle y Liverpool-West Ham.