El poder electoral de Venezuela rechazó como una "injerencia grosera" la petición este jueves del Parlamento Europeo de suspender los comicios del 20 de mayo, en los que el presidente Nicolás Maduro buscará la reelección.
"Que un parlamento de naciones extranjeras pretenda venir a exigir (...) que las instituciones se sometan a sus decisiones es un despropósito muy grande, es una injerencia grosera", declaró la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena.
Los parlamentarios europeos reclamaron la "suspensión inmediata" de las elecciones, por considerar que no existen condiciones para que sean "libres, creíbles, transparentes e inclusivas".
"En las circunstancias actuales, el Parlamento Europeo no puede reconocer las elecciones que resulten de este proceso ilegítimo", subraya una resolución aprobada con 492 votos a favor, 87 en contra y 77 abstenciones.
Lucena dijo que el CNE -acusado por la oposición de servir a Maduro- no acatará el pedido de Bruselas.
"El poder electoral es ajeno a todas las decisiones que parlamentos ajenos puedan tomar", manifestó la responsable, de línea oficialista.
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La coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) llamó este jueves a la abstención, luego de haberse negado a presentar candidatos para un proceso que califica como un "simulacro fraudulento".
Pidió además al opositor Henri Falcón retirar su postulación, presentada al margen de la alianza.
La MUD reiteró su petición de fijar para diciembre las presidenciales, luego de que fueran adelantadas por la oficialista Asamblea Constituyente que rige en Venezuela como poder absoluto.
"No se van a suspender (...). El poder electoral no está considerando un cambio de fecha", subrayó Lucena.
Estados Unidos y varios países de América Latina, además de la Unión Europea, han adelantado que desconocerán los resultados del proceso, de cara al cual Maduro aparece como favorito según las encuestadoras Datanálisis y Delphos.