La Asamblea Nacional francesa (cámara baja) fijó este martes sus líneas rojas para aprobar un eventual acuerdo comercial entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur, contra el que se posicionaron la mayoría de grupos.
Por 281 votos a favor y 58 votos en contra, los diputados urgieron al gobierno del presidente liberal Emmanuel Macron a decir a la Comisión Europea su oposición al pacto si no respeta varios criterios sanitarios, ambientales y climáticos.
Los diputados piden que los agricultores sudamericanos respeten las mismas reglas ambientales y sanitarias que en Europa y una cláusula para suspender su aplicación si los países del Mercosur no respetan el Acuerdo de París sobre clima.
El Mercosur --Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay-- alcanzó en 2019 un acuerdo con la UE tras más de 20 años de negociaciones, pero el pacto no fue ratificado, en parte debido a la preocupación en Europa por las políticas medioambientales del expresidente brasileño Jair Bolsonaro (2019-2022).
El clima mejoró con el regreso al poder del izquierdista Lula da Silva en enero, pero las exigencias medioambientales de los europeos, contenidas en un documento adicional al acuerdo presentado recientemente por la UE, han moderado el entusiasmo.
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Lula dijo el lunes a la titular de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, que la "desconfianza" no podía guiar el acuerdo y criticó los "efectos extraterritoriales" de las reglas europeas que "modifican el equilibrio" del pacto.
En Francia, la presión del sector agrícola sobrevuela el debate, como quedó reflejado en el debate en la Asamblea donde todos los grupos expresaron su apoyo a los agricultores franceses.
"Nosotros militamos sobre todo por no ratificar este acuerdo comercial (...) último clavo clavado en el ataúd de la agricultura francesa", dijo el diputado ultraderechista Frédéric Falcon.
En una entrevista con AFP a inicios de junio, el ministro francés de Comercio, Olivier Becht, alejó la idea de un pacto rápido, asegurando que tanto los países de la UE como del Mercosur quieren "tomarse su tiempo" para llegar a un acuerdo que "convenga a todas las partes".
La resolución de los parlamentarios franceses, que recoge gran parte de las exigencias ya reclamadas por Macron, se produce semanas antes de una cumbre en Bruselas entre los dirigentes de la UE y de América Latina.
La diputada oficialista Eleonore Caroit, la única en tomar la palabra en favor de un acuerdo, recordó la importancia estratégica de un acercamiento entre ambas regiones.
"Si Francia y la UE se desvían de América Latina, ¿saben quién vendrá? China y Rusia", advirtió la diputada.