El papa Francisco, que convirtió la lucha contra el calentamiento global en una de las banderas de su pontificado, anunció el miércoles que asistirá a la cumbre sobre el clima (COP28) que se inicia el 30 de noviembre en Dubái.
"Iré a Dubái. Creo que salgo el 1 de diciembre, hasta el 3. Estaré tres días allí", dijo el pontífice argentino, de 86 años, en una entrevista con la televisión italiana Rai1.
Dubái acogerá del 30 de noviembre al 12 de diciembre esta conferencia de la ONU sobre el clima, cuyo objetivo es reducir las emisiones de gases con efecto invernadero y ayudar a los países en desarrollo a hacer frente a las consecuencias del cambio climático.
Según el papa, esta conferencia podría representar "un giro" si en ella se alcanzara un acuerdo vinculante sobre la transición de las energías fósiles a otras menos contaminantes como la eólica y la solar. Si no se logra ese compromiso, habrá "una gran decepción", valoró Francisco.
Desde su elección, en 2013, el papa ha hecho de la defensa del medio ambiente un tema central de su pontificado. En 2015, dedicó a esa cuestión su encíclica "Laudato si" (Alabado seas), un manifiesto de 200 páginas a favor de una "ecología integral".
El mes pasado, publicó un balance del camino recorrido desde entonces, titulado "Laudate Deum" (Alabado sea Dios), en el que urge a los dirigentes del planeta a firmar acuerdos "vinculantes" ante la urgencia climática.
"Con el paso del tiempo advierto que no tenemos reacciones suficientes mientras el mundo que nos acoge se va desmoronando y quizás acercándose a un punto de quiebre", advierte Francisco en ese texto de 12 páginas.
Esta será la primera vez que un jefe de la Iglesia católica participe en persona en una cumbre de la COP, un evento que se realiza anualmente desde 1995.
Será además el 45º viaje al extranjero del sumo pontífice y el sexto de este año. Debilitado por sus dolores de rodilla y la operación de abdomen a la que se sometió en junio, el papa se desplaza en silla de ruedas.