Es hora de adelantarse a este virus en lugar de perseguirlo: Levitan | El Nuevo Siglo
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Sábado, 25 de Abril de 2020
Pablo Uribe

HACE un mes Richard Levitan, o Doctor Levitan, decidió volver a la sala de urgencia de un hospital en Bellevue, Nueva York.  Estaba retirado, pero lo embargó la duda científica. Corajudamente tomó el teléfono y le preguntó a su amigo médico, Nick Caputo, a qué se parecía el Covid-19. “Quería saber a qué me enfrentaba”, dijo Levitan en The New York Times. La respuesta fue lapidaria: “No se parece a nada que haya visto antes”.

Como millones de médicos, Levitan ha estado en la “primera línea”. Tiene una obsesión científica por el paso lento y progresivo que tiene el virus en los pulmones de los pacientes. “Recién estamos comenzando a reconocer que la neumonía por Covid causa inicialmente una forma de privación de oxígeno que llamamos hipoxia silenciosa”, confiesa.  

Oxímetros de pulso

Un mes después de ver los efectos del virus, Levitan ha lanzado una propuesta sencilla para tratar a los contagiados del Covid-19. “Se requiere la detección temprana de la hipoxia silenciosa a través de un dispositivo médico común que se puede comprar sin receta en la mayoría de las farmacias: un oxímetro de pulso”, propone. Los oxímetros de pulso se ponen en la mano y, al cabo de unos segundos, miden oxigenación y frecuencia cardiaca. Se deben usar todos los días, como el termómetro. Si los niveles empiezan a ser sospechosos (depende del nivel de altura) es posible que se esté desarrollando lentamente la hipoxia.

Para él, la mayoría  que se contagia del virus y requiere hospitalización tiene niveles de oxígeno notablemente bajos, casi incompatible con la vida. “Pero estaban usando sus teléfonos celulares cuando los pusimos en los monitores”, comenta.  Los pacientes, dice el médico, compensan el bajo oxígeno respirando más rápido y con fuerza, generando una lesión pulmonar y en consecuencia, una “insuficiencia respiratoria aguda” que conlleva a la necesidad de un ventilador.

Esta semana en la revista científica Intensive Care Med un grupo de instituciones médicas y universidades de Italia, España y Reino Unido confirmaron que el 20% de los pacientes necesitan ventiladores para enfrentar la insuficiencia respiratoria aguda. Al ser así, Levitan insiste que los oxímetros pueden reducir  el uso de los ventiladores al detectar casos rápidamente que pueden ser tratados en fases iniciales o medias del desarrollo del virus en pacientes.

Lejos se ve la producción en masa de la vacuna que la Universidad de Oxford calcula que estará en septiembre. Menos optimista, Bill Gates (uno de los mayores conocedores de epidemias), en artículo publicado en The Economist, estima que no será antes de 2021. Por ello, los procedimientos y tratamientos que disminuyen la letalidad del Covid-19 se han convertido en el objetivo central.

La propuesta de Levitan llega en un momento en que el tratamiento contra el Covid-19  en Europea, Norteamérica y Asia ha estado dominado por la posible efectividad de medicamentos como hidroxicloroquina, favipiravir y remdesivir, los dos últimos ampliamente rechazados por la comunidad cienítifica.

China, Estados Unidos y algunos europeos vienen usando la hidroxicloroquina. Esta semana una investigación del Observational Health Data Sciences and Informatics (OHDSI), que agrupó a 300 investigadores de todo el mundo y estudió el historial médico de 950.000 pacientes que habían tomado previamente el medicamento, concluyó que la cloroquina “es segura para el uso a corto plazo, pero exige precaución al usarla en combinación con azitromicina”.

El líder de la investigación, Dani Prieto, advirtió que “cuando se prescribe en combinación con azitromicina, puede inducir insuficiencia cardíaca y mortalidad cardiovascular e instamos a la precaución al usar los dos juntos”. En la misma dirección, la Administración de Alimento y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, siglas en inglés) advirtió las afectaciones que puede generar la hidroxicloroquina cuando se mezcla con “con azitromicina y otros medicamentos que prolongan el QT”.

Remdesivir y Favipiravir

Luego de que se filtrara una investigación, la semana pasada los medios hicieron eco de un posible fármaco antiviral que ayudaría a enfrentar el Covid-19. Usado principalmente para combatir el ébola, el remdesivir generó expectativa mundial por sus niveles de efectividad en los pacientes (8 de 10 superaron el virus). Pero todo se debió a un malentendido.

El viernes, The Financial Times  (FT) publicó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) había publicado accidentalmente un informe que demostraba los efectos positivos del remdesivir. “Los autores proporcionaron un borrador del documento a la OMS y lo publicaron inadvertidamente en el sitio web y lo retiraron tan pronto como se notó el error”, dijo la farmacéutica Gilead Sciences, que demostró que “no hubo una mejora en los pacientes ni redujo la presencia del patógeno en el torrente sanguíneo”.

Descartado el remdesivir, la comunidad científica tiene los ojos puestos en otro antiviral producido en Japón. Se trata del favipiravir, desarrollado por una sucursal de Fujifilm, que se usa habitualmente en este país para combatir la influenza. Beijing, según la agencia de noticias china Xinhua, confirmó que este medicamento “parecería ser efectivo en pacientes con coronavirus”, luego de efectuarse pruebas en Shenzen y Wuhan. Se comprobó que 340 pacientes que recibieron favipiravir dieron negativo por coronavirus en una media de cuatro días después de haber dado positivo, en comparación con los 11 días en los que desaparece el virus.
Aunque China y Rusia han confirmado efectos positivos del favipiravir, fuentes del Ministerio de Salud de Japón dijeron al FT que este medicamento no es tan efectivo en personas que tienen síntomas más graves. “Las mismas limitaciones se habían identificado en estudios con pacientes de coronavirus utilizando una combinación de los VIH antirretrovirales lopinavir y ritonavir”, agregó la fuente.

La comunidad científica comienza a acumular más evidencia para centrarse en la fase temprana y media del Covid-19.  Existen dispositivos médicos que sirven para detectar el virus en fases iniciales evitando la hipoxia silenciosa y, posteriormente, la intubación.  También hay medicamento para tratar personas con síntomas leves y moderados.

Levitan desde la “primera línea”, desde la golpeada Nueva York, hace un llamado: “Es hora de adelantarse a este virus en lugar de perseguirlo”.   

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*MPhill en Estudios Latinoamericanos en la Universidad de Oxford (en curso). Colaborador de El Nuevo Siglo en Europa