Johnson supera moción de censura interna y seguirá en gobierno | El Nuevo Siglo
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Lunes, 6 de Junio de 2022
Redacción internacional con AFP y Europa Press

EL CONTUNDENTE y claro mensaje del primer ministro británico, Boris Johnson, a los diputados conservadores en el sentido de que “sabemos la fuerza increíble que podemos ser cuando estamos unidos” recordando que los actuales parlamentarios lograron la mayor victoria de los tories en 40 años llevaron a un punto de inflexión frente a su posible destitución.

El llamado “in extremis” que hizo Johnson, de cuerpo presente, a sus copartidarios cambió -sin duda- el curso del debate en torno al voto de confianza solicitado por el 15% de la bancada (54 legisladores de los 359 que tiene) al Comité 1922 (que agrupa a los parlamentarios sin cartera ministerial) por el mediático escándalo del “partygate”, las reuniones que se realizaron en Downing Street en medio de la pandemia.

El presidente del comité, Graham Brady, informó en la noche del domingo al primer ministro Johnson que se había completado el porcentaje requerido por lo que ayer se procedía a debatir y votar la moción, la que fue calificada por el premier como una "oportunidad de oro" para poner fin a "meses de especulación" sobre su Gobierno y liderazgo al frente del país.

Johnson no sólo envió una misiva a los diputados “tories” donde les manifiesta que "pueden confiar en él para sacar adelante soluciones innovadoras a los problemas más difíciles” y aceptó las críticas en su contra por las mencionadas reuniones, pero recordó que rindió cuentas por ello, sino que se hizo presente en el salón del Parlamento donde estaban reunidos y fue recibido con aplausos.

Su mensaje fue claro: “esta noche puede servir para poner fin a la obsesión favorita de los medios de comunicación. No podemos sacar adelante el trabajo sin apagar el ruido, y tengo una absoluta confianza en que podemos unirnos podemos ganar de nuevo y reparar la confianza de los 14 millones de personas que nos votaron".

También se refirió a las críticas de los que ha sido objeto, señalando que “algunas han sido justas, quizás otras no tanto. Cuando han dado en el clavo he escuchado, he aprendido y he realizado cambios. Seguiré escuchando y aprendiendo de mis colegas para mejorar” y pidió a los diputados “negarse a bailar al son de los medios de comunicación" y "premiar a nuestros rivales (los laboristas)”.



Las palabras de Johnson hicieron, sin duda, inclinar la balanza a su favor. Luego de dos horas de votación, sir Graham Brady anunció el resultado: 211 diputados votaron a favor del premier contra 148 en contra, lo que significa una renovada confianza partidaria que le permite seguir al frente del gobierno británico.

El resultado es mayor no sólo al que requería para seguir al mando (180 votos), sino cinco puntos porcentuales más al que preveía una encuesta divulgada en la mañana de ayer por la empresa YouGov, que indicaba que cerca del 53% de los miembros de la formación conservadora apoyarían a Johnson. Fue el 58%.

Y, como era de esperarse, la oposición laborista encabezada por Keir Starmer quiso minimizar el triunfo de Johnson, resaltando que fue por muy estrecho margen y que la votación evidencia las graves fisuras en el partido conservador.

"La elección está incluso más clara que antes: unos 'tories' divididos que apoyan a un Boris Johnson sin un plan para afrontar nuestros problemas o un Partido Laborista unido con un plan para arreglar la crisis de la subida de los precios y restaurar la confianza en la política. El laborismo volverá a poner a Reino Unido en el buen camino", manifestó Starmer.

Pero ni el premier, con renovado mandato como líder partidario y jefe de gobierno, ni los tories se molestaron en responder porque, como bien lo dijo Johnson, ahora están concentrados en las ‘otras cosas’ que realmente importan al país, entre otras, aprovechar las libertades del Brexit, algo que Johnson reiteró “la alternativa laborista no podrá nunca igualar”, así como mantener la ayuda a los ucranianos plantando cara a Putin.

Tras agradecer el renovado espaldarazo de su partido y el “resultado convincente” del voto de confianza, Johnson recordó que solo bajo su liderazgo pueden los conservadores "desatar el potencial de este país" y se comprometió a hacerlo para impedir el retorno de los laboristas al poder.

Antes de la votación varios ministros y altos cargos, muchos de los cuales estaban en la baraja de sus posibles sucesores, expresaron públicamente el apoyo a Johnson, vaticinando que saldría fortalecido.

Una de ellas fue la ministra de Exteriores, Liz Truss, quien pidió anticipadamente a sus compañeros respaldar al premier porque “ha estado a la altura a la hora de gestionar la recuperación tras la pandemia y ante la agresión rusa de Ucrania" y, además, "ha pedido perdón por sus errores".

En la misma línea el titular de la cartera de Sanidad, Sajid Javid, anticipó que la votación era una oportunidad para "acabar con el delirio" y sacar adelante el plan de Gobierno. "Hay muchos desafíos de cara al futuro, así que es una oportunidad para que todos nuestros colegas respalden el programa".



A ellos se sumó el ministro británico para Irlanda del Norte, Brandon Lewis, que hizo hincapié en que Johnson "tomó buenas decisiones en materias de importancia" y "se ha disculpado por errores cometidos, y el ministro de Finanzas, Rishi Sunak, que destacó que el primer ministro ha mostrado un "fuerte liderazgo ante las necesidades del país". "Le respaldo hoy y lo seguiré haciendo hasta el final mientras nos centramos en el crecimiento de la economía", manifestó.

Por su parte el ministro de Educación, Nadhim Zahawi, expresó que “nadie toma todas las decisiones bien, pero creo que puestas en una balanza, las del primer ministro son unas buenas cartas", lamentó que algunos diputados intentaran darle la espalda y fue más allá al vaticinar que “cambiar de primer ministro es sinónimo de desestabilizar el Gobierno, lo que es una receta para el fracaso y para la pérdida… No estoy dispuesto a ello", dijo.

Por su parte, la ministra de Cultura, Nadine Dorries, había señalado que votar en contra de Johnson sería como dar la espalda da los 14 millones de personas que le dieron su voto en las pasadas elecciones, celebradas en 2019. "¿Puede una minoría de diputados tirar eso por tierra?" se cuestionó antes de la votación.

Varios diputados como Michael Gove anticiparon su apoyo a Johnson, recordando que "tomó bien las grandes decisiones sobre el Brexit y el covid-19. Ahora tenemos que centrarnos en defender Ucrania y generar crecimiento. Tenemos que dejar esto atrás".

Más allá de esta cerrada defensa y la inesperada intervención de Johnson ante sus copartidarios, sin duda los ‘tories’ sopesaron su futuro político, el que será exitoso siempre y cuando “permanezcan unidos”, tal cual se los recordó su líder y que será ahora uno de sus inmediatos desafíos.

"Por supuesto, entiendo que lo que tenemos que hacer ahora es unirnos como gobierno, como partido. Y eso es exactamente lo que podemos hacer ahora", reaccionó Johnson al ser preguntado sobre la votación y sus planes políticos.

Con la votación de confianza obtenida ayer, la autoridad del político de la indisciplinada cabellera rubia no podrá ser cuestionada antes de un año. Así las cosas, se concentrará en su agenda de gobierno, en unir a los tories y afianzar la hoja de ruta con miras a conservar el poder para ellos en las próximas elecciones. Johnson no sólo “salvó su puesto” como lo destacan los medios, sino que evidenció por qué es el líder. Ahí está y ahí se queda…/