El ejército ruso tomó el control de la ciudad de Marinka, cerca de Donetsk, en el este de Ucrania, anunció el lunes el ministro de Defensa Serguéi Shoigú, un avance que permite a Moscú continuar su ofensiva hacia el oeste de esta región.
"La localidad de Marinka, situada a cinco kilómetros al suroeste de Donetsk, fue completamente liberada hoy", declaró Shoigú en una entrevista televisada con el presidente Vladimir Putin.
Según Shoigú, Marinka es "una poderosa zona fortificada conectada por pasajes subterráneos" que la protege de los ataques de artillería y aéreos.
"Gracias a las acciones decisivas de nuestros soldados, se logró penetrar", indicó.
"La liberación de la localidad reduce naturalmente la capacidad de defensa de las fuerzas armadas ucranianas y nos brinda nuevas oportunidades para continuar nuestra acción en esta dirección", añadió.
El presidente ruso Vladimir Putin se congratuló de que la toma de Marinka aleje a las tropas ucranianas de Donetsk, capital regional bajo control ruso, blanco de bombardeos ucranianos desde 2014.
"Hemos repelido de manera significativa el campo de acción de la artillería cerca de Donetsk, y esto permite hoy defender dicha ciudad de manera más eficaz contra los ataques", subrayó Shoigú.
Marinka, como zona fortificada, "da a nuestras tropas la posibilidad de disponer de un espacio operativo más amplio", afirmó Putin.