El informe de la Oficina de Política Nacional de Control de Drogas estimó que la extensión del área sembrada con coca permaneció relativamente estable por segundo año consecutivo
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El área utilizada por los cultivos de coca en Colombia permaneció relativamente estable, según informe de la Oficina de Política Nacional de Control de Drogas (Ondcp, por sus siglas en inglés), de Estados Unidos.

El informe registró que en 2019 había 212.000 hectáreas de narcocultivos, con un leve aumento de 8% de la producción potencial de cocaína.

Según estos datos, los cultivos de coca en Colombia permanecieron estables por segundo año consecutivo, después que en 2017 la producción registró una fuerte alza, lo que tensó las relaciones entre Bogotá y Washington, tradicionales aliados en la lucha antidrogas.

"Según las estimaciones, el cultivo de coca en Colombia se mantuvo estable en 212.000 hectáreas en 2019, frente a 208.000 hectáreas en 2018, mientras que la producción potencial de cocaína pura aumentó ligeramente un 8% a 951 toneladas métricas en 2019", indicó la Ondcp en un comunicado.

Ayer mismo, Estados Unidos lanzó un diálogo con Colombia para establecer un plan de acción conjunto para reducir los niveles de cultivo de coca y de producción de cocaína en el país a la mitad, para 2023.

Según el Departamento de Estado, el diálogo se centró en el aumento de la erradicación, la mejora de la seguridad y las oportunidades económicas en las áreas rurales más afectadas por el tráfico de narcóticos, entre otros.

Fumigar

El lunes, el presidente Donald Trump dijo en una reunión en la Oficina Oval con el mandatario Iván Duque que para la lucha antidrogas es necesario "fumigar".

"Bueno, van a tener que fumigar. Si no fumigan no se van a deshacer de ellos", dijo Trump en referencia a los carteles de droga, contestando a la pregunta de un periodista.

El gobierno de Duque espera reanudar la fumigación de cultivos ilícitos para luchar contra el narcotráfico, una iniciativa aplaudida por Estados Unidos pero muy resistida por campesinos y organizaciones de derechos humanos.

El 10 de febrero, el ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, informó que en más de 50.000 hectáreas de hoja de coca se había incrementado la meta de erradicación del Gobierno nacional para 2020.

Trujillo manifestó que el Ejecutivo tenía inicialmente planeado erradicar 80.000 hectáreas.

La meta se incrementó luego de la visita del ministro Trujillo a Estados Unidos, donde estuvo reunido con su homólogo norteamericano Mark Esper.

"En relación con la meta de erradicación de cultivos ilícitos para el 2020, los análisis nos llevaron a plantear una meta de 130.000 hectáreas erradicadas en el año que corresponde", dijo Trujillo.

En medio de la discusión que se lleva a cabo sobre el eventual regreso de la aspersión aérea con glifosato, el ministro Trujillo aseguró que no se descarta esta opción para cumplir con el compromiso adquirido con Estados Unidos.

Las aspersiones aéreas con glifosato para la lucha antidrogas en Colombia fueron suspendidas en 2015, cuando el anterior gobierno acogió una advertencia de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que consideró ese herbicida como "probablemente" cancerígeno.

Por sus asociaciones a efectos cancerígenos y riesgos genéticos, muchos países en Europa buscan prohibir el controvertido herbicida.

Segundo año

En junio, la Ondcp estimó que en 2018 el cultivo de coca y la producción de cocaína en Colombia empezaron a estabilizarse.

En ese momento, la estimación indicó que el cultivo de coca en Colombia había experimentado una caída de 209.000 hectáreas en 2017 a 208.000 hectáreas en 2018.

Del mismo modo, la producción potencial de cocaína pura también cayó de 900 toneladas métricas puras en 2017 a 887 toneladas métricas puras en 2018.

Aunque el cultivo de coca en Colombia se mantuvo en niveles históricamente altos en 2018, fue el primer año en que el cultivo no aumentó desde 2012, dijo entonces la Ondcp.

“Al trabajar de cerca con el presidente Duque, estamos viendo que Colombia avanza en el logro de nuestro objetivo compartido de reducir significativamente el cultivo de coca y la producción de cocaína. La asociación entre nuestros dos países debe permanecer fuerte mientras luchamos para cumplir nuestros objetivos, combatir a quienes se benefician del tráfico de drogas y evitar que el flujo de drogas mortales llegue a Estados Unidos”, manifestó hace ocho meses el director de la Ondcp, Jim Carroll.

Para la Casa Blanca, desde que asumió el cargo en agosto de 2018, el presidente Duque ha incrementado los esfuerzos antinarcóticos de Colombia, apuntando a los laboratorios de cocaína y traficantes, así como cuadruplicando la cantidad de equipos para erradicar el 56% más de coca por mes, que en el gobierno anterior.

A través de un comunicado publicado por la Embajada de Estados Unidos en Colombia, la Ondcp precisó que los narcotraficantes trasladan grandes cantidades de cocaína de Colombia a Estados Unidos, con mayor frecuencia a través de la frontera suroccidental. Entre 2014 y 2017, las muertes por sobredosis de cocaína aumentaron casi en un 160% y el número de usuarios actuales de cocaína aumentó en un 40%, de 1,53 millones a 2,17 millones.