Un grupo de 60 soldados fue retenido el pasado 10 de agosto por supuestos miembros de las disidencias de las Farc en la región de San José del Guaviare; bajo su poder, los militares han pasado más de 36 horas.
La situación se volvió cada vez más crítica a medida que las negociaciones para su liberación se prolongaban, tras la intervención de diversas autoridades locales e internacionales.
Ante la falta de acuerdo, el ministro de Defensa, Iván Velásquez, emitió una fuerte advertencia a las disidencias de alias Calarcá, exigiendo la liberación de los militares de lo contrario, la continuación del cese al fuego con el bloque Jorge Suárez Briceño podría verse afectada. La actual prórroga del cese al fuego, que se extiende hasta el 15 de octubre, está en riesgo según el ministro.
“La continuidad del secuestro de los soldados en San José del Guaviare, obligará a replantear el cese al fuego con el bloque Jorge Suárez Briceño. La prórroga por 3 meses, vigente hasta el 15 de octubre, se debe suspender si no existe real compromiso de parte de ese grupo ilegal”, dijo el ministro.
La continuidad del secuestro de los soldados en San José del Guaviare, obligará a replantear el cese al fuego con el bloque Jorge Suárez Briceño. La prórroga por 3 meses, vigente hasta el 15 de octubre, se debe suspender si no existe real compromiso de parte de ese grupo ilegal.
— Iván Velásquez Gómez (@Ivan_Velasquez_) August 11, 2024
El grupo inicialmente estaba compuesto por 100 militares, que se encontraban realizando labores de patrullaje y control en áreas rurales, cuando fueron interceptados, al parecer, por miembros de las disidencias de las Farc, bajo el mando de alias ‘Calarcá’.
El almirante Francisco Cubides, comandante de las Fuerzas Militares, identificó a la estructura ‘Jorge Suárez Briceño’ que obedece las órdenes de alias Calarcá como responsable de esta retención. En un comunicado, subrayó que los soldados retenidos forman parte de un despliegue estratégico en el sur de Meta y San José del Guaviare, con la misión de abordar las amenazas y extorsiones de grupos armados ilegales.
La situación se complica debido a las exigencias de los retenedores. Según el Ejército, los supuestos miembros de las "guardias campesinas" han demandado la presencia del alcalde de San José del Guaviare, así como de representantes de la MAPP-OEA, ONU, Defensoría del Pueblo y Fiscalía, para negociar la liberación de los soldados. Estas demandas han ralentizado las negociaciones, que buscan garantizar la seguridad de los uniformados y la resolución pacífica del conflicto.
El general Luis Emilio Cardozo Santamaría, comandante del Ejército, expresó su firme rechazo a la retención de los soldados, calificándola de "secuestro" y asegurando que los militares estaban cumpliendo su deber constitucional de proteger a la población civil y combatir la criminalidad. Cardozo Santamaría ha pedido la liberación inmediata de los retenidos, destacando la importancia de su labor para la seguridad de la región.
Mientras tanto, en la zona, una comisión de autoridades locales y organismos internacionales continuaron en negociaciones intensivas con las comunidades involucradas. La situación ha llevado a la implementación de un consejo de seguridad, mientras las autoridades buscan una solución que permita el regreso seguro de los soldados a sus bases.
Por su parte, la Defensoría del Pueblo indicó que adelantó conversaciones con líderes campesinos de zona rural de San José Del Guaviare escuchando peticiones y reclamos que “pacíficamente realizan campesinos del Guayabero, quienes solicitan la no presencia del Ejército en lugares referidos en el cese al fuego”.