EL CENTRO de pensamiento económico del país, Fedesarrollo, presentó el Índice de Incertidumbre de la Política Económica en Colombia (IPEC). El director de la institución, Luis Fernando Mejía, explicó a EL NUEVO SIGLO, la importancia de este medidor que contribuye a revisar y despejar el rumbo de las decisiones del Gobierno y su efecto en las decisiones de los inversionistas.
EL NUEVO SIGLO: ¿Qué alcances tiene este medidor y cómo se ha desarrollado?
LUIS FERNANDO MEJÍA: Lo primero es que este indicador hace parte del compromiso que tiene Fedesarrollo de seguir contribuyendo de una manera técnica y rigurosa al análisis de la coyuntura económica en Colombia. Y este indicador pretende medir la incertidumbre en la política económica del país en lo corrido del siglo XXI.
No es una metodología nueva, realmente lo que estamos haciendo es la aplicación de la que se usa a nivel internacional desde hace 8 años, en donde justamente países como Estados Unidos, Francia, Italia, Reino Unido, Japón y en América latina en el caso del Brasil, Chile y México se ha venido construyendo este indicador de incertidumbre en cada uno de estos países.
En Colombia se habían hecho esfuerzos previos y justamente lo que queremos con este indicador es mantener el indicador actualizado mensualmente. Lo que básicamente mide es que tan alta es la incertidumbre en la política económica y para dar un ejemplo puntual, se refiere a las noticias que mencionan la palabra incertidumbre, economía y, por ejemplo, la política fiscal o la política monetaria. Cuando sube el indicador implica que hay un mayor número de noticias que están haciendo referencia a la incertidumbre en la política económica.
Las inquietudes
ENS: ¿Hoy cómo está ese grado de incertidumbre?
LFM: La incertidumbre en la política económica siempre existe, en algún momento, en cualquier gobierno, en cualquier año hay inquietudes sobre anuncios, medidas de política económica que naturalmente puede conducir a ruido o generar incertidumbre justamente en los agentes que toman decisiones económicas, inversionistas locales o internacionales. Y lo que muestran los resultados del indicador es que frente a los niveles observados de incertidumbre previos a la pandemia en el periodo 2000 al 2019, y luego de la pandemia es que hay un aumento muy importante de la política económica.
En lo corrido del siglo XXI, el año de mayor incertidumbre en la política económica de acuerdo con este indicador fue el 2022, y coincide con el segundo semestre de ese año en el que hubo un aumento muy importante del riesgo país en particular en octubre de ese año. El segundo año con mayor incertidumbre es el 2023 y el tercero es el 2020 que fue el año de la llegada del covid.
ENS: ¿Desde el 2000 al 2019 comparado con 2023, los niveles de incertidumbre se han duplicado?
LFM: Más que duplicado. En promedio, en lo corrido de este año el indicador está en 240 frente a un promedio de 100 en el periodo prepandemia en 2019. Esto dice básicamente que el número de noticias relacionadas con incertidumbre en la política económica se ha multiplicado 2,4 veces.
Hay varios factores detrás de esto que en algunos casos se refieren a choques externos. El caos, por ejemplo, en 2020 fue un choque pandémico de la salud qué naturalmente introdujo una gran cantidad de incertidumbre, frente al comportamiento y la actividad productiva.
En casos más recientes muestra factores internos relacionados, por ejemplo, con discusiones de las reformas tributarias del 2021, especialmente la del 2022 o también con algunas discusiones sobre las reformas estructurales, por ejemplo, en la reforma de salud o la reforma laboral que también pueden incidir en el aumento de esa incertidumbre.
También hay factores más recientes, ejemplo, los anuncios de la asamblea nacional constituyente, que al final de cuentas pueden percibirse como un cambio abrupto en las reglas de juego de la constitución del 91, en una economía de mercado.
Gobierno de izquierda
ENS: ¿Qué tanto ha influido en ese indicador la llegada al gobierno de un partido de izquierda?
LFM: Indudablemente, cuando se observa el comportamiento del indicador claramente hay una preponderancia de factores más locales, en especial en los últimos dos años y medio. Esto responde a los anuncios que ha hecho el gobierno de reformas estructurales que técnicamente se han calificado de inconvenientes y que, además, han tenido una enorme discusión política, y también a medida que se han venido anunciando o aplicando en sectores tan importantes como el sector minero energético, como el de la vivienda y también el de infraestructura.
Así que este indicador permite dar números a esa percepción que se ha venido generando frente a un aumento de la incertidumbre de un Gobierno que ha hecho una serie de anuncios macroeconómicos y también sectoriales que se perciben como de mayor incertidumbre en el país.
ENS: ¿Qué tanto va a incidir ese indicador en los inversionistas o en las firmas calificadoras de riesgo?
LFM: Lo que pretendemos es que sea un indicador complementario a otros indicadores para poder anticipar cuáles son las tendencias de las principales variables macroeconómicas del país. Pero este no es el único indicador; Fedesarrollo produce mensualmente el indicador de confianza al consumidor e indicador de confianza empresarial.
Hay otros indicadores libres como la demanda de energías o el riesgo del país a través de las tasas de interés que paga el Gobierno nacional por las emisiones de su deuda pública. Se ha identificado que aumentos en índices de incertidumbre en política económica, como la que hemos presentado mensualmente, generan una predicción de reducción en la inversión y el crecimiento económico y por eso nos sorprende, que en coincidencia con el aumento del indicador que hemos visto especialmente en los últimos años, también a la par vemos en materia macroeconómica una disminución muy importante de la formación bruta de capital fijo, es decir, de la inversión en los últimos dos años.
Inversionistas
ENS: Si hoy un inversionista lee el indicador y dice: “bueno vamos a esperar que mejore o que avancen las reformas a ver si decidimos colocar nuestros recursos en el país”, ¿esa lectura sería correcta?
LFM: Claro que sí, por supuesto, hemos sido enfáticos en Fedesarrollo que una de las razones por las cuales ha habido una caída y un retroceso importante en la inversión, tiene que ver con la incertidumbre. Esa es una barrera muy grande porque los inversionistas locales e internacionales prefieren esperar a que se resuelvan las decisiones económicas para poder tomar decisiones de inversión.
Este indicador lo que puede dar luz es justamente sobre los niveles de incertidumbre, que ratifico son más altos que los que teníamos antes de la pandemia y también puede servir como insumo a la política pública, justamente para entender dónde se están generando esos ruidos o esas señales que pueden ser equívocas frente a la inversión privada y poder corregir el rumbo en el sentido, y poderle abrir las puertas de una manera mucho más amplia al crecimiento de la inversión privada.
Herramienta adicional
ENS: ¿Qué ha dicho el Gobierno sobre este indicador?
LFM: Nosotros no hemos dialogado con el Gobierno sobre la publicación de este indicador. Nosotros como siempre y en el contexto también de los indicadores de confianza empresarial y del consumidor, lo que hacemos es publicar estos indicadores para que cada actor particular pueda utilizarlo de manera que pueda ser útil para su diario quehacer, esto implica que puede ser útil para actuar del Gobierno nacional, puede ser útil para los inversionistas, puede ser utilizado para los analistas económicos y la idea, ratifico, es que sea otra herramienta adicional para completar el análisis de la coyuntura económica del país.