En la mañana del pasado miércoles, otro caso de intento de feminicidio ocurrió en la localidad de San Cristóbal, al sur de Bogotá. La víctima, una mujer de 31 años cuya identidad se mantiene en reserva por motivos de seguridad, fue agredida con arma blanca por su expareja en su propia vivienda.

Según el relato de la víctima, el agresor llegó acompañado de su nueva pareja y, sin previo aviso, comenzó a atacarla con un cuchillo. La mujer había terminado su relación con el atacante hace más de siete años debido a un historial de agresiones físicas y psicológicas. "Me separé de él porque me maltrataba constantemente. A pesar de los años, nunca dejó de amenazarme," declaró la víctima desde el hospital donde se encuentra recuperándose.

La mujer había recibido amenazas en días previos al ataque, pero no imaginaba que el hombre llegaría a tal extremo. "Llegó a mi casa con su nueva pareja y sin mediar palabra, me apuñaló varias veces," narró la mujer en entrevista con un medio local. La Fiscalía clasificó el caso como intento de feminicidio, y las autoridades emitieron una medida de protección para la afectada. No obstante, el miedo persiste debido a las reiteradas amenazas que continúa recibiendo.

"Esta no es la primera vez que me ataca, y temo por mi vida. Pido a las autoridades que lo capturen antes de que sea demasiado tarde," expresó la víctima. La comunidad de San Cristóbal, consternada por el hecho, ha manifestado su apoyo a la mujer y exige justicia inmediata.

Organizaciones defensoras de los derechos de las mujeres levantaron su voz, instando a las autoridades a actuar con celeridad y firmeza. "No podemos permitir que estos actos de violencia queden impunes. La vida de muchas mujeres está en riesgo," declaró una representante de una ONG local.

La situación de la víctima sigue siendo delicada. Desde su cama de hospital, hace un llamado desesperado: "Necesito justicia y que este hombre pague por lo que ha hecho. No puedo vivir con miedo." La comunidad espera una pronta respuesta de las autoridades, mientras la víctima y su entorno cercano buscan apoyo para superar este difícil momento.

Este incidente subraya la urgencia de tomar medidas más eficaces para proteger a las mujeres de la violencia de género y garantizar que los agresores enfrenten la justicia de manera expedita.