La mayor parte de la cocaína que se procesa en Colombia es sacada por las organizaciones del narcotráfico por la costa del Pacífico, por Centroamérica, a Estados Unidos. Así lo señala el informe Mundial sobre las Drogas 2022 de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc), dado a conocer ayer en Viena, Austria.

“La mayor parte del tráfico de cocaína en el período 2016-2020 ocurrió a lo largo de rutas bien conocidas: desde Colombia a lo largo de la costa del Pacífico hasta América Central y/o México (a menudo en barco y/o embarcación semisumergible), para el tráfico posterior a los Estados Unidos”, explica el informe.

Agrega que “casi toda la cocaína de las provincias del sur de Colombia, junto con una parte de la cocaína fabricada en el norte, sale del país por el océano Pacífico”.

En cuanto a la cocaína que las organizaciones del narcotráfico presentes en Colombia envían hacia Europa, Unodc indica que se saca principalmente por la costa del Atlántico en barco.

Agrega el documento que “las autoridades sugieren que la mayor parte de la cocaína incautada en Estados Unidos sigue teniendo su origen en Colombia (90% en 2018)”.

En 2020, el principal país de salida de los envíos de cocaína a nivel mundial fue Colombia, según lo informado a Unodc (23 menciones), seguido de Brasil (21 menciones).

Cultivos ilícitos 

Señala este informe que si bien en 2020 en Colombia el área sembrada con arbusto de coca disminuyó a 143 mil hectáreas, una reducción del 7% con respecto al año anterior, la fabricación siguió aumentando.

“En 2020, Colombia continuó siendo el país con la mayor parte del cultivo mundial de arbusto de coca, que representa aproximadamente el 61% de la población mundial total”, indica Unodc.

Detalla el informe que en 2020 hubo reducción de dos dígitos en la extensión de cultivos ilícitos en Colombia, “pero no en todas las áreas, aunque se encontraron excepciones en ciertas áreas de alta densidad, como los departamentos de Antioquia, Córdoba y Bolívar, donde aumentó el cultivo, y las regiones de Catatumbo y Meta-Guaviare, donde se reportó que las disminuciones estuvieron por debajo del promedio nacional”.

Agregó que el área de cultivo de arbusto de coca en Colombia se triplicó durante las negociaciones de paz con las Farc, “luego disminuyó después de que se concluyó el acuerdo de paz en noviembre de 2016”.

Erradicación

La Unodc dijo también en su informe que ha tratado de evaluar los resultados logrados en la reducción de cultivos ilícitos, por una parte, de manera forzada y, de la otra, de forma concertada con los campesinos con el programa de sustitución por cultivos lícitos.

“El análisis muestra que la erradicación forzosa resultó en una disminución inicial del cultivo de drogas ilícitas debido a la remoción de arbustos de coca; y que la erradicación voluntaria, realizada junto con iniciativas de desarrollo alternativo (AD) como parte del proyecto ‘Programa Nacional de Sustitución de Cultivos’, originó un aumento inicial debido a efectos de ‘incentivo perverso’, con algunos campesinos que cultivan arbustos de coca a participar en los proyectos, pero esto fue rápidamente compensado por los agricultores que destruyeron voluntariamente sus cultivos”.

Por lo tanto, destacó, “con el tiempo, el cultivo de drogas ilícitas disminuyó a mayor tasa en áreas con erradicación voluntaria y de desarrollo alternativo”.

Agregó que en las áreas de desarrollo alternativo “la brecha en cultivos de drogas entre áreas sujetas a erradicación y áreas que no han sido tocadas se proyecta que continúe aumentando durante la próxima década. En cambio, las áreas con erradicación forzada, a pesar de la disminución inicial en los cultivos, vio un aumento del cultivo a un mayor en comparación con áreas similares donde no hubo erradicación forzosa”.

Otros aspectos del informe

La legalización del cannabis en algunas partes del mundo parece haber acelerado el consumo diario y las consecuencias relacionadas para la salud, según el Informe Mundial sobre las Drogas 2022.

El documento también detalla el aumento sin precedentes de la fabricación de cocaína, la expansión de las drogas sintéticas a nuevos mercados y las continuas deficiencias en la disponibilidad de tratamientos contra estas sustancias, especialmente para las mujeres. 

Según el informe, alrededor de 284 millones de personas entre 15 y 64 años consumieron drogas en todo el mundo en 2020, lo que supone un aumento del 26% respecto a la década anterior. Las personas jóvenes están consumiendo más drogas y los niveles de consumo actuales en muchos países son más altos que los de la generación anterior. En África y América Latina, las personas menores de 35 años representan la mayoría de quienes reciben tratamiento por trastornos relacionados con el consumo de drogas.

El informe estima que, a nivel global, 11,2 millones de personas se inyectan drogas. Alrededor de la mitad vive con hepatitis C; 1,4 millones con VIH y 1,2 millones con ambos.

Otros informes 

En septiembre de 2021, la Oficina de Política Nacional de Control de Drogas de la Casa Blanca reveló que en 2020 en Colombia “las cifras de cultivo de coca y producción de cocaína alcanzaron un récord de 245 mil hectáreas y 1.010 toneladas métricas, respectivamente”. 

Se espera que en los próximos días la Oficina de la Casa Blanca dé a conocer el nuevo informe correspondiente al año 2021.

De igual forma está por salir el informe sobre Colombia correspondiente al 2021 del Sistema Integrado de Monitoreo de Cultivos Ilícitos (Simci) de la Undoc.

En el documento que presentó el año pasado se evidenció una disminución de los cultivos de hoja de coca, pues pasó de tener 154 mil hectáreas en 2019 a 143 mil hectáreas en 2020.