“Puedo dar testimonio, bajo la gravedad de juramento”, que en las reuniones de los congresistas con el presidente Juan Manuel Santos no se tratan temas de cuotas burocráticas, aseguró el representante tolimense Alfredo Bocanegra, vocero del Partido Conservador en la Cámara.

Precisando que “esto a muchos les causa incomodidad, pero a otros satisfacción, porque dignifica el quehacer político”, Bocanegra reconoció que “por los malos antecedentes, se piensa que cuando se hacen esas reclamaciones se está es pidiendo puestos, se están pidiendo contratos, se están pidiendo notarias o cosas de esas”.

EL NUEVO SIGLO: Usted se ha quejado de las malas relaciones entre el Gobierno y la bancada del Partido Conservador en la Cámara. ¿Ahora cómo están?

ALFREDO BOCANEGRA:La colectividad conservadora ha sido muy digna en las relaciones con el Gobierno Nacional.

Creo que el partido ha permanecido al lado del Gobierno en los temas económicos, ha sido solidario en la aspiración legítima de lograr una terminación de este conflicto, ha logrado impulsar iniciativas importantes. El partido ha sido un apoyo indispensable para este Gobierno sin que tengamos alguna queja de la opinión ni de parte de los sectores nacionales en sentido de que se haya comprometido la integridad moral de los congresistas y del partido como colectividad.

ENS: ¿Y sobre las reuniones con el presidente Santos?

AB:El presidente en la parte temática ha sido consecuente con la bancada. Hemos participado en dos consejos de ministros. Es un tema inédito en los gobiernos: en un consejo de ministros no participaban sino los ministros. Y los voceros de las bancadas hemos podido estar.

Nosotros intervinimos mucho en el tema de que se priorizaran iniciativas como el tema de la reforma a la salud, aún sobre la reforma pensional.

El mandatario en eso ha sido consecuente con el partido. Lo ha escuchado lo mismo que en muchos temas. Nosotros hemos podido llamar la atención del Gobierno. Nos hemos hecho escuchar y en esa parte temática el partido se siente bien tratado.

Me vi con el ministro de Defensa. Le insistí en el tema de la nivelación salarial para la Fuerza Pública, que incluye además a las fuerzas activas de las Fuerzas Militares.

ENS: Luego, el presidente escuchó sus reclamos…

AB:Exactamente, es que en muchas ocasiones por los malos antecedentes, se piensa que cuando se hacen esas reclamaciones se está es pidiendo puestos, se están pidiendo contratos, se están pidiendo notarias o cosas de esas.

El presidente tiene la gran ventaja de que tiene la dignidad republicana, donde esos temas no se tocan. Se habla y se discuten mucho sobre la parte programática, se hacen reclamaciones, se hacen críticas sobre el mal manejo que se hizo en el paro cafetero. Pero nunca se toca el tema de eso y puedo dar testimonio bajo la gravedad de juramento, que esos temas no se comparten en estos escenarios políticos.

Esto a muchos les causa incomodidad, pero a otros satisfacción, porque dignifica el quehacer político.

ENS: ¿Nunca se ha tocado el tema de la burocracia?

AB:Para nada. Muchas veces hay quejas sobre los ministros en cuanto a sus políticas, en cuanto a la forma de presentar la política. Al ministro de Agricultura se le ha hecho críticas razonables, porque yo creo por ejemplo que no debió haber puesto al presidente en el tema cafetero si finalmente iban a terminar haciendo disposición de los recursos nacionales para atender las demandas justas. Me parece que no se debió haber llegado hasta las marchas.

ENS: ¿Qué les dice a los cafeteros que están amenazando con volver de nuevo al paro cafetero?

AB:Creo que el Gobierno después del paro cafetero parece haber asimilado la lección.

El pasado 19 se hizo una concertación con los arroceros que querían hacer una movilización. También sé que habido acuerdos con los cacaoteros.

Pero yo lo que le pido al Gobierno es que esté muy pendiente del cumplimiento estricto de los compromisos que se adquirieron y si no se están cumpliendo hay que acelerar los pasos para que se cumplan.

Mayor concertación

El representante Bocanegra dijo que el trabajo del ministro de Agricultura, Juan Camilo Restrepo, ha tenido con contraste de sobras y luces, como en el tema de la restitución de tierras, mucha integridad frente al tema de las víctimas. En materia de política agropecuaria le ha faltado mayor previsión y mayor concertación.