Enfrentado. Sarmiento dice que suspender esa troncal es buena noticia pero Bastidas recalca que ello favorece interés minoritario sobre el colectivo

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La decisión del juez 49 administrativo de oralidad del Distrito Capital de ratificar la orden de suspender la adjudicación de la troncal de Transmilenio por la Carrera Séptima ha generado diversas reacciones a favor y en contra.

La concejala Lucía Bastidas, de la Alianza Verde, que ha defendido la obra, criticó duramente la determinación del togado. Manifestó que es “desafortunado que los jueces de la República estén cogobernando las ciudades”.

“La Carrera Séptima le sirve a los más vulnerables de la cuidad, el Alcalde tiene que seguir porque es un proyecto de infraestructura social, los jueces tienen que entender que están siendo utilizados por la oposición”, sostuvo.

Afirmó que con la medida “se pierde la oportunidad de mejorar la calidad de vida y movilidad de miles de personas que madrugan desde la Calle 200 hasta sus trabajos”.

“Se favorece un sector minoritario del estrato seis sobre el interés colectivo de los sectores más populares del norte de la ciudad, quienes sí necesitan agilizar su movilidad y pasar más tiempos con sus familias”, dijo.

Manifestó además que el juez que tomó la determinación no cuenta con “la formación y conocimiento técnico para controvertir los documentos proporcionados por la Administración distrital”.

“Un juez con cientos de expedientes, ¿cómo pontificia sobre una decisión técnica hiperestudiada e hiperdiseñada? ¿Decisiones basadas en Google Earth?”, dijo.

En relación con las personas que interpusieron la acción popular que atendió el juez, señaló que “los vecinos edificio en Altos de La Cabrera paralizan el desarrollo de uno de los principales corredores para descongestionar ciudad”.

Por su parte el concejal Manuel Sarmiento, del Polo Democrático, afirmó que es una “buena noticia” para los bogotanos la suspensión de la troncal.

“En distintos debates en el Concejo de Bogotá denuncié que la licitación no contaba con solidez técnica que podría traducirse en sobrecostos, además, la ausencia de estudios de geotecnia para la construcción de los dos puentes sobre la Calle 85”, aseveró.

“No están completos los estudios de subsuelo, que es grave. Además que no se está respetando el criterio del POT, que para este tipo de avenidas con troncales de Transmilenio señala que el ancho de los andenes es de 3,5 metros. De acuerdo con el estudio que nos fue suministrado por el IDU no se va a respetar este criterio del actual POT y por supuesto eso es una violación de la ley. Por lo tanto el juez mantiene la suspensión de esa licitación”, afirmó.

Y agregó: “Esta troncal se enmarca en la pésima idea de Peñalosa de que hay que llenar la ciudad de troncales de Transmilenio porque reemplaza el metro y, además, esta troncal no va a solucionar el problema de la movilidad del corredor nororiental”.

La adjudicación de la troncal estaba programada para el 2 de mayo, sin embargo fue suspendida el pasado 25 abril cuando el juez 49 administrativo atendió una acción popular interpuesta por los residentes el edificio Altos de La Cabrera, que se ubica en cercanías de la avenida. Según el togado, el proyecto no cuenta con los debidos estudios de geotecnia y suelos para su ejecución y para la construcción de dos puentes sobre la Calle 85. La obra contempla conectar la Calle 32 con la Calle 200 y costaría cerca de $2,3 billones.