Es clave determinar con quién hay que dialogar y negociar para levantar el paro, porque en las protestas “hay múltiples actores con múltiples intereses”, manifestó el senador Gabriel Velasco, del Centro Democrático.
El congresista se preguntó si realmente el Comité Nacional de Paro tiene la vocería de todos esos intereses, incluidos los que reclaman reivindicaciones regionales y locales.
EL NUEVO SIGLO: ¿Cómo ve la respuesta del Gobierno a la situación que está viviendo el país?
GABRIEL VELASCO: Debo reconocer y agradecerle al presidente Iván Duque sus venidas a la ciudad, porque ya han sido un par de venidas a la ciudad de Cali, y empezamos a ver un poco diferente la ciudad.
Yo creo que se ha retomado el liderazgo, se ha retomado el trabajo en el orden público y se han venido ejerciendo acciones permanentes de autoridad para proteger a la ciudadanía, y creo que eso se empieza a sentir en la ciudad.
Han determinado que se quede aquí un equipo de manera permanente a afrontar esta crisis, esta situación tan difícil.
Ya la oportunidad que tenemos es el desmonte de los bloqueos de la ciudad, que siguen; aunque se avanza, todavía hay algunos puntos; y sobre todo en el Valle del Cauca, las ciudades principales y los diferentes municipios hoy también están bloqueados, y se está generando un problema muy grave en todo el departamento por los bloqueos que realmente nos afanan y nos preocupan mucho a todos.
ENS: ¿Es optimista?
GV: Yo creo que va avanzando. Todavía no podemos hablar de optimismo. No es porque no seamos optimistas. Somos optimistas. Lo que digo es que se va avanzando lentamente.
Nosotros hemos venido sugiriendo a todos los actores de la sociedad que condenemos los bloqueos, que digamos “sí a la marcha y a la protesta, pero no a los bloqueos”. Los bloqueos siguen siendo un acto violento, porque hay escasez de alimentos y se están poniendo caros.
Las personas no pueden ir a trabajar y la mayor parte de los vallecaucanos y caleños pues viven del día a día, y en ese día a día si no salís a trabajar no comés, y los alimentos están carísimos, a los hospitales no están llegando los insumos ni el oxígeno, ni medicamentos para poder tratar el covid, ayer vimos cómo vandalizaron un vehículo con medicamentos, insumos médicos, la ciudadanía no puede ir a los hospitales. Entonces digamos que esos bloqueos tienen al Valle del Cauca todavía en una situación difícil. Se avanza y se avanza de manera importante, pero mientras mantengamos los bloqueos y haya algunos que quieran mantener los bloqueos, la situación no puede ser optimista, así el Gobierno esté actuando de manera decidida y lo debo reconocer.
ENS: ¿Hay voluntad política de los gobiernos nacional, del Valle y de Cali para salir de esta crisis?
GV: Yo veo la voluntad política tanto del Gobierno nacional y de la gobernadora, pero realmente veo al alcalde como si no hiciera nada. No veo a la Alcaldía actuar.
Yo creo que el alcalde se hace como el loco y él más bien prefiere pelotearle la responsabilidad a la gobernadora y al Presidente de la República o al Gobierno nacional, pero él no está ejerciendo la autoridad y el liderazgo por ser la primera autoridad del municipio de Cali.
Realmente me parece que él se está haciendo el loco y no está actuando, y no está condenando los bloqueos, no está pidiendo que se levanten los bloqueos, no lo veo actuar con liderazgo, no lo veo actuar con autoridad y no veo que esté como interesado en que el orden público de la ciudad se restablezca y más bien lo veo como desviando la atención de la discusión pública hacia otros puntos, y parece no ser el interesado en que se generen acciones de autoridad permanente para poder proteger a los ciudadanos y recuperar el orden público y la normalidad de la ciudad.
- Diálogo
ENS: ¿Hay un buen panorama para alcanzar un acuerdo político que termine con el paro?
GV: El diálogo siempre es importante, es fundamental.
Yo tengo unas preocupaciones y es que en las regiones y en los territorios parece ser que no es claro ni es fácil determinar quiénes son los voceros válidos o los voceros autorizados para establecer el diálogo. Hay múltiples actores con múltiples intereses.
Por otro lado, me preocupa de sobremanera que el Comité del Paro no aglutina todos esos intereses y no sé si tiene esa sombrilla negociadora como se la atribuyen y que ellos puedan mandar la instrucción al territorio.
Eso me preocupa, por eso los diálogos regionales y en el Valle del Cauca, donde se está hablando con los jóvenes, me parecen también muy importantes.
Yo creo que tenemos que llamar a todo el mundo a la sensatez, porque a veces lo que uno ve es que hacen unas peticiones realmente exorbitantes y traídas de los cabellos, que el Gobierno nacional por más que quiera no va a poder cumplir.
Si las peticiones de los organizadores del paro, del Comité del Paro, valen $81 billones, pues va a ser lograr un acuerdo, porque si la reforma tributaria, que generó todo este estallido social, costaba $24 billones y ahora están pidiendo $81 billones, entonces realmente no entiendo. Estallaron toda esta dificultad, toda esta molestia y toda esta rabia por $24 billones y ahora están planteando unas reformas que valen $81 billones. ¿De dónde vamos a sacar la plata?
Yo lo que creo es que tenemos que sentarnos y mirar cómo podemos ampliar la política del Estado de manera focalizada y de manera decidida con los más vulnerables, para poder ayudar a que se disminuya la pobreza en Colombia, que hoy está en 42%, y cómo generamos también unas ayudas para que se cree una reactivación económica y se pueda generar más empleo.
Yo creo que ahí debería estar el foco de la negociación, pues si somos responsables con el país futuro que queremos tener para todos.
ENS: Es decir, ¿se requiere negociación nacional y simultáneamente negociación regional y local?
GV: Digamos que la palabra negociación es tal vez un avance posterior de todo. Yo lo que creo es que necesitamos arrancar ya con diálogos nacionales y regionales, para posteriormente hablar de otras etapas. Yo lo que creo es que necesitamos generar esos diálogos y que realmente sepamos que estamos hablando con los actores válidos para hacerlo.