En el marco de la gran discusión que se ha dado por el proyecto de reforma de equilibrio de poderes y otras propuestas de diferentes partidos coincidentes en algunos puntos, el director Ejecutivo de la Federación Colombiana de Municipios, Gilberto Toro, dijo que cabe revisar una serie de normas de control que en la práctica están más entorpeciendo la gestión en los territorios.

 El NUEVO SIGLO: Paralelo al proyecto del Gobierno sobre equilibrio de poderes, el Centro Democrático presentó uno en que propone que el Procurador no destituya a funcionarios elegidos por voto popular, ¿qué opina?

GILBERTO TORO: Esta reforma tiene que apuntar a revisar la conveniencia o no de un montón de normas que están impidiendo que los funcionarios públicos trabajen, gobiernen, cumplan con sus funciones de una manera tranquila y eficiente. Y para eso entonces indiscutiblemente hay que revisar normas de donde salen las facultades que tiene el Procurador, el Contralor, el Fiscal y todos los demás órganos de control que tiene el país, y estoy hablando del Estatuto Anticorrupción, del régimen de inhabilidades e incompatibilidades, de la Ley de Garantías, del Código Único Disciplinario, que son normas que se han hecho sobre la base de que desconfiamos de los servidores públicos. Entonces hay que poner todo tipo de trabas, y lo que hacemos es que las contrataciones se alarguen, no haya eficiencia y transparencia a la hora de ejecutar los recursos, que haya temor más que tranquilidad y orientación para que los recursos del Estado se destinen como debe ser para resolver los problemas que tiene la gente.

ENS: A pesar de que el Gobierno lo dejó en el tintero  ustedes insisten en la necesidad de la ampliación de periodos de gobernantes regionales…

GT: Nosotros estamos de acuerdo en que no haya reelección inmediata para nadie, pero que el periodo sea siquiera de seis años porque lo que tenemos en la actualidad es una improvisación en la gestión pública local. Tenemos un periodo de cuatro años que se convierte en la práctica en dos años efectivo de gobierno porque tenemos permanentemente alterada la gobernabilidad gracias a las leyes de garantías, que se imponen cada dos años que tenemos elecciones en Colombia.

Entonces, unificar los periodos y que los periodos sean a seis años le daría a todos los colombianos la posibilidad de ver que el presidente de la República, los gobernadores, los alcaldes, articulen sus planes de desarrollo, que gobiernen con unas prioridades en cada uno de los planes de desarrollo de los distintos niveles y con el tiempo y los recursos suficientes para poder incidir en el desarrollo de los municipios, departamentos y, por tanto, del país.

Por qué no evaluamos las experiencias de otros países que tienen periodos más amplios, incluso tienen  reelección, con base en experiencias reales, en indicadores de desarrollo gracias a periodos más amplios o incluso gracias a la reelección,  que ya los podemos encontrar en los países más democráticos y desarrollados del mundo.

Tenemos una gran oportunidad para lograr que reestructuremos la gobernabilidad local en Colombia y articulemos los planes de desarrollo y vayamos todos en una misma dirección, que no haya esta improvisación que tenemos actualmente, que cada cuatro años llegue un mandatario local a hacer cosas nuevas interrumpiendo las que vienen de atrás.

Tenemos la oportunidad realmente de poner al país en condiciones de modernidad en materia de gobernabilidad. Ojalá que no se improvise como siempre se ha improvisado a la hora de hacer ese tipo de reformas, y todo porque no se piensa en los colombianos, en el desarrollo del país y en el bienestar de la gente sino en las conveniencias particulares de quienes toman las decisiones.