En una carta al ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, 11 exministros de Cultura expresan preocupación por algunos cambios que traería la reforma tributaria presentada por el gobierno de Gustavo Petro al Congreso de la República.

Los exministros de Cultura sostienen que, si bien entienden la necesidad de buscar recursos para suplir el déficit fiscal y financiar los nuevos énfasis gubernamentales en materia de equidad y redistribución de la riqueza, “suprimir algunos de los mecanismos de incentivo construidos para la cultura no contribuye a ese objetivo”.

Uno de las personas que firmó esa carta fue Ramiro Osorio, quien fue el primer ministro de Cultura y lleva 12 años al frente del Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo.

EL NUEVO SIGLO: ¿Cuál es el propósito de la misiva que ustedes enviaron al Gobierno?  

RAMIRO OSORIO: La carta enviada de manera muy respetuosa a las autoridades del Gobierno nacional es sobre la inconveniencia de derogar dentro de la reforma tributaria el artículo 180, que ha propiciado la creación de más de cuatro mil empleos, además de que canaliza inversiones a diversos proyectos culturales, entre ellos carnavales, festivales y procesos editoriales.

ENS: ¿Exactamente en qué puntos se vería más afectado el sector cultural?

RO: Por ejemplo, en el tema de la cadena del libro, porque como está en la propuesta, esto afectaría a los autores, afectaría la apertura y ampliación de nuevas librerías. En el campo de la producción audiovisual y cinematográfica se perderían los beneficios para la inversión extranjera, para la realización de proyectos en Colombia. Se derogaría la exención del 50% del impuesto a los inversionistas que capitalicen las producciones cinematográficas en Colombia. Y se derogaría el beneficio del Fondo Mixto de CoCrea, beneficio que significa la deducción del 165% en la base gravable del impuesto de renta para lo donado o lo invertido en el campo del patrimonio de industrias creativas, artes e infraestructura.

Estos incentivos que hemos sido capaces de crear a lo largo de décadas son fundamentales porque han contribuido a consolidar las cadenas de valor y a que el sector de la cultura en Colombia aporte más del 2% del PIB. Ese es el propósito de la carta.

Todos entendemos que estamos en un momento muy urgente, en el cual se necesita racionalizar y se necesitan los recursos para hacer reformas con el fin de que este país sea más equitativo, pero queremos señalar que el sector de la cultura, que ha sido uno de los más golpeados por la pandemia y uno de los más desfavorecidos a lo largo de la historia del país, en cuanto a inversión del Estado, necesita que continúen estos incentivos.

ENS: ¿Es muy fuerte la carga impositiva que tiene el sector cultural en este momento?

RO: En este momento no, porque se han racionalizado mucho los impuestos con diversas leyes como la Ley del espectáculo, por ejemplo, que en el caso es fundamental porque son los impuestos a través de los cuales nosotros contratamos a los artistas nacionales e internacionales.

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ENS: ¿Cómo va la recuperación del sector cultural después de la pandemia?

RO: Es una recuperación lenta porque implica varios factores: primero, que la gente sienta confianza y seguridad en los recintos culturales en materia de salud; en este punto creo que lo hemos hecho bastante bien en cumplir todos los protocolos en momentos tan duros y abriendo paulatinamente las salas. Y, además, que haya una combinación de una programación atractiva y que se les presenten a las personas posibilidades de salir y que tenga la disponibilidad de algunos recursos para acudir a estos recintos culturales, es toda una cadena de factores.

ENS: ¿Y cómo va el regreso del público?

RO: Yo creo que en el caso del Teatro Mayor vamos como en el 70% de la recuperación de las audiencias que teníamos en 2019.

ENS: ¿Ustedes ya han tenido la oportunidad de hablar con la ministra de Cultura?

RO: No, no he tenido la oportunidad de reunirme con ella.

ENS: ¿Han podido traer a los artistas internacionales previstos sin inconvenientes?  

RO: Tenemos a veces problemas con personas que tienen mayor o menor prevención con las vacunas, hace poco nos canceló un gran pianista porque no estaba vacunada.