La cooperación rusa con Venezuela, que ha llevado al fortalecimiento militar en la frontera con esa nación, ha acrecentado las preocupaciones del Gobierno colombiano frente a la reciente asistencia técnica por parte del país asiático a las fuerzas bolivarianas.

Así lo manifestaron al embajador ruso, Nikolay Tavdumradze, en una reunión realizada en la noche de este lunes con la vicepresidenta y canciller, Marta Lucía Ramírez, el ministro de Defensa, Diego Molano, el vicecanciller Francisco Echeverri y el embajador Carlos Morales.

En el encuentro dejaron expresa la preocupación de Colombia por garantizar un mayor nivel de seguridad en la frontera y evitar el riesgo de que los equipos militares, provenientes de la cooperación rusa, terminen en manos de los grupos armados ilegales que operan a ambos lados de la frontera.

“Requerimos que no haya el más mínimo riesgo de que la cooperación militar que existe entre Rusia y Venezuela, desde mucho tiempo atrás, no vaya, eventualmente, por descuido, por la razón que sea, a terminar cualquier equipo militar ruso en manos de grupos ilegales que hacen presencia en la frontera”, expresó la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez.

Además, la también Canciller destacó que el embajador ruso comprendió la necesidad de una comunicación “directa” y “muy franca” sobre cualquier preocupación del Gobierno colombiano sobre la asistencia militar en la frontera con Venezuela.

Por su parte el embajador ruso, Nikolay Tavdumradze, reiteró después del encuentro que la relación de los dos países sigue siendo amistosa. “Hemos cubierto algunos temas de preocupación que tuvo el gobierno de Colombia”.

Entre los acuerdos se estableció el uso de convenciones internacionales sobre asistencia militar.

En el encuentro también se habló sobre las declaraciones del ministro de Defensa, Diego Molano, en la que advirtió por supuesta injerencia rusa en la frontera. “El señor Molano nos aseguró que sus palabras sobre injerencia en relaciones con Colombia fueron tergiversadas”, señaló Tavdumradze.  

Por eso, luego del diálogo con el embajador ruso, Molano afirmó que Nikolay Tavdumadze manifestó: “la cooperación de Rusia de ninguna manera tiene el interés de afectar en otro país en esa relación que tienen y por eso se acordó que utilizaremos las vías diplomáticas para expresar todas las otras inquietudes que tengamos relacionadas con esa cooperación”.

Finalmente, según lo comunicado por el Gobierno, en la reunión se acordó incrementar la relación bilateral entre los dos países para lograr una mayor cooperación educativa, cultural y comercial.

¿Cómo comenzó la tensión?

Las tensiones con Rusia comenzaron el pasado 3 de febrero con las declaraciones del ministro de Defensa, Diego Molano, en las que aseguró que Rusia le estaba brindando asistencia técnica al régimen de Venezuela. Pocas horas después, la embajada rusa tachó las afirmaciones como “falsas” y mostró su preocupación por los “continuos intentos de acusar sin fundamento”.

Molano había asegurado el 3 de febrero que se había registrado una movilización del lado venezolano frente al departamento de Arauca. La zona ha sido escenario de una violenta confrontación por el control del narcotráfico entre la guerrilla del Eln y disidencias de las Farc.

"Injerencia extranjera en el borde de la frontera. Por inteligencia tenemos la información de que del otro lado están estas confrontaciones que tiene el Eln, aliado con la segunda Marquetalia, para sacar a las disidencias de las Farc", dijo Molano a periodistas a comienzos de este mes.

Que dicen algunos expertos

EL NUEVO SIGLO consultó al excanciller Fernando Araújo, quien dijo que toda la política de Rusia es establecer formas de debilitar las relaciones de Estados Unidos con su entorno. “Para decirlo en términos generales, los rusos buscan que los países que están cerca a Estados Unidos puedan tener algún interés, por eso su relación con Cuba, Nicaragua, Venezuela, todos esos países cercanos con un valor geopolítico para Rusia. La cercanía con el país norteamericano es la forma que ellos tienen de hacer presión ante los Estados Unidos y al mismo tiempo quitarse la presión que ellos tienen allá en su territorio. En el caso de Ucrania si los americanos me están molestando para yo expandirme, yo los molesto también a ellos con una política de espejo, de toma y dame”.

Por su parte, Jorge Restrepo, director del Centro de Recursos para el Análisis de Conflictos (Cerac), dijo que esa reunión resuelve el problema que se creó por las declaraciones del Ministro y se convierte en un compromiso público de Rusia, que va a tener el cuidado en materia de las armas que proveerá a Venezuela, para que solo lleguen al régimen y no a grupos irregulares. “Yo creo que es un avance, pero no resuelve las tensiones porque cuando Rusia interviene a través de sus organismos de inteligencia lo hace de manera que no sea detectable, por ejemplo a través de acciones que vulneran la seguridad cibernética y a través de acciones de propaganda, más que acciones directas o proveyendo armas. Yo creo que se logra algo pero muy marginal. No se le puede exigir a Rusia que no apoye al Gobierno de Venezuela”.   

La respuesta desde Venezuela

A través de una serie de trinos, el canciller venezolano, Félix Plasencia, desestimó esta reunión: “Venezuela continuará estrechando vínculos con Rusia y todos nuestros aliados estratégicos en el mundo e impulsando los intercambios multisectoriales, a fin de profundizar y desarrollar, aún más, las relaciones bilaterales, a favor de la prosperidad y seguridad de nuestros pueblos”.

Luego escribió: “No extraña que el señor Duque y el gobierno de Colombia sigan tratando de difundir por el mundo sus falsos positivos, que parecen ser una de las especialidades del desgobierno, después de la producción y el tráfico de drogas, que siguen creciendo cada año”.

“El inquilino del Palacio de Nariño miente, al tratar de inculpar a Venezuela por la muerte de firmantes de Acuerdos de Paz, los cuales su gobierno ha boicoteado desde el inicio, masacrando a más de 1.000 líderes sociales, activistas y excombatientes de las Farc en el último año”, agregó.

“El subpresidente Duque no exportará a Venezuela el conflicto fratricida de más de 70 años que sufre el pueblo colombiano, y que obliga a 10 millones a vivir en permanente desplazamiento interno por la violencia y el desgobierno”, señaló. “En Venezuela conocemos bien el drama estructural que padece el hermano pueblo de Colombia”, finalizó.