EN MEDIO del gran número de proyectos en la Comisión Primera de Cámara, hay uno de reforma política que llama la atención, no solo porque se presentó a estas alturas, en la tercera legislatura, a sabiendas de lo difícil que es la aprobación de este tipo de iniciativas, sino porque incluye la propuesta de transfuguismo para las elecciones del 2026, que permitiría a los actuales congresistas presentarse por partidos distintos a los que hoy representan sin tener que dejar la curul e incurrir en doble militancia.

EL NUEVO SIGLO hizo un sondeo sobre qué tanto ambiente hay para su trámite.

Vale recordar que en la primera legislatura la administración Petro radicó una reforma política; sin embargo, tras ser aprobada en primera vuelta la tuvo que retirar porque se quedó sin consenso debido a los cambios que se hicieron al texto, como que un congresista pudiera renunciar y al otro día entrar al Gobierno como ministro.

La nueva iniciativa que fue radicada el pasado 3 de septiembre por la bancada de la coalición del Pacto Histórico, que oficia como partido de gobierno, es en realidad una reforma política abreviada, pues apenas tiene nueve artículos, incluyendo la vigencia, y nada que ver con los densos proyectos que se presentan en esta materia.

El caso del Pacto

En la pasada legislatura el Pacto Histórico presentó un proyecto de reforma constitucional para permitir el transfuguismo mirando a las elecciones del 2026, el cual contó con amplio respaldo pues tuvo la firma de más de un centenar de parlamentarios. Fue aprobado en primer debate en la Comisión Primera de la Cámara, pero terminó hundido porque no alcanzó a surtir los tres debates restantes.

El Pacto Histórico insiste en esta tercera legislatura en la iniciativa de transfuguismo, aunque ahora como parte de una reforma política. 

En esto vale explicar que aunque el Pacto está en un proceso buscando que sus 13 fuerzas se unan en un solo partido, pues en 2026 no pueden presentarse como coalición debido a que en los comicios del 2022 obtuvieron más del 15 % de la votación y por lo tanto ya no son un movimiento minoritario, dependería del transfuguismo porque hay algunos como MAIS reticentes a dar este paso, y en esa colectividad están dos alfiles claves del petrismo: la senadora María Pizarro y el representante David Racero.

Entonces, lo que se busca en el Pacto con este proyecto es que, si MAIS no entra en el partido único que se quiere hacer, Pizarro y Racero vía transfuguismo se salgan de MAIS para entrar allí.

Opinan congresistas

El representante Juan Gómez González, vicepresidente de la Comisión Primera, dijo a EL NUEVO SIGLO, sobre el trámite de este proyecto, que “apenas se van a asignar ponentes el día lunes”.

Sin embargo, el parlamentario del Nuevo Liberalismo dijo que “en Primera, en este momento tenemos más de 60 proyectos de ley para primer debate, no sé cómo vamos a hacer para sacar todo eso”.

Independientemente de ello, Gómez dijo que “Colombia sí necesita una reforma política, y creo que también es bueno que en algún momento haya lo que se ha denominado transfuguismo, porque creo que la gente lo que más critica es la incoherencia política, los conservadores votando con el presidente, los liberales partidos. Que en una única oportunidad cada partido se organice como deba y le demos un poco más de coherencia a nuestro quehacer”.

El congresista dijo que es difícil a estas alturas sacar adelante un proyecto de reforma política por las dinámicas del Legislativo, “sin embargo, trataremos de estudiarlo y mirar si llega a feliz término”.

Por su parte el representante por Antioquia David Toro, del Pacto Histórico, dijo a este medio sobre el ambiente en el Congreso para tramitar la reforma política, que “independientemente del tema de las reformas que envía sobre todo el Gobierno”, como salud, laboral y la de descentralización, “creo que hay un interés muy importante de la mayoría de congresistas” en esta iniciativa y “las mesas directivas de Cámara y Senado le van a dar prioridad porque se nota que hay un interés partidario y personal, por ejemplo en el tema del transfuguismo”.

Frente a las voces que dicen que el Pacto Histórico se equivoca al meter el transfuguismo en una reforma política porque podría complicar su aprobación, Toro considera que “en estas agendas apretadas, meter uno o dos artículos para un mismo tema creo que sería un desgaste”.   

Mientras que el representante por Antioquia Andrés Jiménez Vargas, del Partido Conservador, dijo: “Creo que el proyecto en algunos casos fortalece los partidos políticos. Tengo compañeros que son del Partido Conservador y que dicen que muchas personas quieren migrar. Entonces en ese caso podría fortalecer los partidos tradicionales”.

Añadió que “para mí, no le veo ninguna dificultad, porque seguiré en el Partido Conservador, ahí tengo mi espacio, estoy contento en él”. Agregó Jiménez que “para la mayoría de congresistas, por lo menos lo que es en Cámara, esa reforma tiene un visto bueno de la mayoría de nosotros. Falta esperar si se le alcanza a dar debate, porque hay muchos proyectos para discutir”.

En tanto que el representante por el Cauca Óscar Campo Hurtado, de la coalición Cambio Radical y Mira, dijo a este diario que “Colombia está ávida de una reforma política, creo que haber hundido la reforma política por excesos que le pusieron en algunos artículos, fue un error muy grave”.

Agregó sobre la nueva iniciativa de reforma política “que es un proyecto necesario”. Anotó que para la primera “había un consenso mayoritario”, pero “cuando le metieron el articulito de que un congresista pudiera ser ministro y que cuando lo echaran se devolviera, ahí la gente dijo 'esto es una sinvergüencería. Sin dos excesos de esos la reforma hubiese pasado”.

En cuanto al nuevo proyecto, Ocampo dijo: “Creo que debe pasar el transfuguismo y todo. Es que el transfuguismo solamente sería una libertad para moverse de partido, y eso no soluciona el problema de los partidos ni el problema de la política, ni el problema de la democracia en los partidos”.  

En qué consiste la reforma política

El nuevo proyecto que se radicó, en primer lugar propone adicionar un parágrafo transitorio al artículo 107 de la Constitución Política para que “dentro de los dos meses siguientes a la promulgación del presente acto legislativo, autorízase, por una sola vez, a los miembros de los cuerpos colegiados de elección popular, o a quienes hubieren renunciado a su curul con anterioridad a la vigencia del presente acto legislativo, para inscribirse en un partido distinto al que los avaló, sin renunciar a la curul o incurrir en doble militancia”.

Los otros aspectos, a grandes rasgos, que tiene esta reforma son que se reconozca personería jurídica a las organizaciones políticas con una base de afiliados de al menos el 0,2 % del censo electoral nacional. En la actualidad este reconocimiento depende de que alcancen el umbral del 3 % en las elecciones.

También plantea que las campañas electorales sean financiadas exclusivamente con recursos estatales. Igualmente, establece que máximo se podrá ocupar en tres periodos consecutivos curul en las corporaciones públicas, entre estas el Congreso.

Además, el proyecto de reforma baja la edad mínima para ser congresista a 18 años, tanto para senador como representante. En la actualidad es de 30 y 25 años, respectivamente.

Así mismo, el proyecto elimina la lista abierta y deja solo la cerrada para que los partidos y movimientos presenten candidatos a corporaciones públicas.