Frente a más de 100 mil ciudadanos que se congregaron en el palacio de Christiansborg, sede del gobierno y del Parlamento en la capital Copenhague, la saliente monarca, de 83 años, firmó el acta de abdicación, poniendo fin a 52 años de reinado, en un hecho inédito en la historia contemporánea de ese país. Federico X, de 55 años, asumió en compañía de su esposa María (plebeya australiana) e hijo Cristián, de 18 años, que ahora es el nuevo príncipe heredero.