No a todos los detractores del alcalde Gustavo Petro les cayó mal que varios  juristas y dirigentes se desplazaran a Washington para hablar directamente con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) con el objetivo de, documentos legales y constitucionales en mano, evidenciarle a esa instancia internacional que no hay motivos fácticos y objetivos para otorgarle al mandatario bogotano las medidas cautelares que pidió para frenar el (hoy suspendido) fallo de la Procuraduría que lo destituyó y sancionó con 15 años de inhabilidad para ocupar cargos públicos.

La ‘inquina’

“… No lo veo tan crítico, todo lo contrario, al final puede que ese desplazamiento termine beneficiando la causa de Petro, pues dejaría en evidencia que la inquina política contra el mandatario es tan alta que incluso envían delegados hasta Washington para hablar con la CIDH, algo que no solo es extraño en esa alta instancia, sino que pone en evidencia que no hay mucho conocimiento sobre su funcionamiento… La CIDH en esta clase de peticiones de medidas cautelares no acostumbra recibir testimonios de particulares, salvo el peticionario, sino que oficia directamente a los gobiernos e instituciones internas que puedan aportar información oficial sobre el caso que estudian”, precisó una muy alta fuente petrista, que pidió la reserva de su nombre.

Paros ‘políticos’

En medio de la proclamación ayer del presidente Santos por parte de La U, algunos congresistas de esa colectividad dejaron entrever una sospecha: que al igual que ocurrió en agosto del año pasado, la oposición estaba cabildeando en varios gremios del agro con el fin de convencerlos de lanzarse a paros y manifestaciones contra las políticas del Gobierno. “… Tenemos noticias en las regiones de que la izquierda y el uribismo están alebrestando a las seccionales de varios gremios agrícolas para convencerlos de que hagan paros y bloqueos con el fin de debilitar al Gobierno en plena época electoral”, dijo un parlamentario en charla informal con periodistas.

Reforma por sí

La reforma a la Ley de Garantías Electorales será uno de los temas con que arrancará el Congreso en el segundo semestre. Se sabe que varios senadores ya tienen a sus equipos trabajando en este asunto, y para ello están recopilando información sobre cuáles son las restricciones que existen para los presidentes-candidatos en otros países en donde también hay la posibilidad de la reelección inmediata.

Reforma por no

Paradójicamente también se ha dicho que en el segundo semestre llegará al Parlamento un acto legislativo que propone abortar la reelección presidencial inmediata en Colombia y, en su lugar, alargar el periodo presidencial a seis años. No hay que olvidar que al presidente Santos esta idea le sonó hace más de un año, pero ante la polémica que se formó tuvo que retractarse, afirmando -de paso- que cualquier reforma que se hiciera en ese sentido se aplicaría en todo caso para el próximo Jefe de Estado, pues no tramitaría ninguna norma que lo beneficiara personalmente.