En las toldas liberales empezó la puja por la sucesión de Rafael Pardo en la jafetura de la colectividad. Un sondeo realizado por periodistas de EL NUEVO SIGLO entre algunos parlamentarios y dirigentes rojos dejó entrever que hay tres opciones que se están manejando. La primera radica en volver a designar a un jefe único, con el fin no sólo de unificar la vocería partidista sino de no debilitar el estatus del representante liberal en las reuniones de la Mesa de Unidad Nacional en la Casa de Nariño. No hay que olvidar que Pardo fue designado jefe único cuando se confirmó como el candidato presidencial para 2010 y recibió todos los poderes plenos que ostentaba el ex presidente César Gaviria.

Jefatura roja (II)
“… Es más efectivo tener un jefe único que optar por presidencias o vocerías rotativas, más aún cuando la coalición gubernamental es tan competitiva en su interior y cada vez son más notorias las maniobras de cada partido para posicionarse lo mejor posible”, precisó un parlamentario liberal, que pidió el anonimato. Agregó que las jefaturas únicas también permiten un mayor grado de identificación en la opinión pública de las posturas partidistas, y ello termina siendo más clave ahora que en la coalición santista cada colectividad busca diferenciarse en materia de proyectos impulsados y decisiones de fondo.  

Jefatura roja (III)
Una segunda alternativa es optar por la vieja fórmula de designar un presidente de la colectividad que salga de una dirección colegiada en donde esté representada no sólo la bancada sino también otros sectores del partido. Es un fórmula que se ha aplicado muchas veces en las cúpulas y directorios partidistas. Si se optara por esta modalidad, hay parlamentarios que señalan que dentro de la dirección colegiada deberían estar dirigentes como el senador Juan Fernando Cristo (aunque quedó muy golpeado políticamente al perder su hermano la alcaldía de Cúcuta) y obviamente Simón Gaviria, pues al ser el actual presidente de la Cámara de Representantes, es el vocero más autorizado del partido en el Congreso. Otros congresistas que lograron buenos resultados en los comicios regionales y locales también pedirían pista.

Jefatura roja (IV)
Sin embargo, si la opción fuera seguir con la figura del jefe único, los nombres que se ponen sobre la mesa no son muchos. Al ex presidente Gaviria no se le ve volviendo a la presidencia de las toldas rojas, por lo que tendría que pensarse en otros perfiles. Ya se mencionó la opción de Cristo, de quien en Cúcuta aseguran será precandidato presidencial para 2014, obviamente si Juan Manuel Santos no busca la reelección. También está el propio Simón Gaviria, sin duda una de las figuras de mayor proyección en el liberalismo, al punto que siendo tan joven ya preside la Cámara.

Jefatura roja (V)
Y una tercera opción es no precipitarse a la respectiva designación en la cúpula roja, con el objetivo de esperar a que varios dirigentes que hoy ocupan gobernaciones y alcaldías importantes entreguen los respectivos cargos el próximo 31 de enero y puedan, entonces, expresar si estarían interesados en la sucesión de Pardo. Obviamente la mayoría de las miradas se dirigen al saliente gobernador santandereano Horacio Serpa, a quien muchos ven como la mejor carta para conservar por lo alto la interlocución con el Gobierno y defender las tesis y posiciones liberales en el interior de la Unidad Nacional.