Paradoja

Un reconocido analista político le dijo a un periodista de EL NUEVO SIGLO que “… todos los partidos hablan por estos días de que hay que escuchar los jóvenes, dicen que están fortaleciendo la participación de las juventudes en sus directorios nacionales, departamentales y municipales, también anuncian o se abrogan la paternidad de proyectos de ley y programas para apoyar a las juventudes, se autoproclaman como los abanderados de las voces que se escuchan en las calles exigiendo inclusión y oportunidades… Pero no los veo, a ninguno, siquiera interesado en las elecciones de los Consejos Municipales de la Juventud, que se realizarán el 28 de noviembre, los mismos comicios que tiempo atrás se suspendieron por la pandemia y que antes se habían controvertido porque su organización valía más de 300 mil millones de pesos… ¿Acaso no debe ser esta elección el principal termómetro de la capacidad y voluntad real de los partidos de convertir a los jóvenes en verdaderos actores políticos y principal escenario de la inclusión de los jóvenes en su estrategia, jóvenes que no sean los hijos, sobrinos o familiares de los parlamentarios y dirigentes”.   

A primer plano

Pese a que el presidente Iván Duque anunció oficialmente hace una semana que el último domingo de noviembre los jóvenes están convocados a las urnas para elegir a sus representantes en los Consejos Municipales de Juventud, lo cierto es que en medio de la coyuntura por el drástico pico de la pandemia poco eco y socialización ha tenido dicho evento que, sería ingenuo negarlo, no era de primera importancia para la agenda electoral de este año pero al ser evidente que los jóvenes fueron parte importante de la ola de paros y marchas que comenzaron el 28 de abril y se extendieron por mes y medio, el Gobierno lo elevó a un asunto prioritario dentro de su plan de respuesta al agitado clima de tensión social.

¿Qué se escoge?

El 28 de octubre, como lo indicara Duque al lanzar esta jornada, “los jóvenes entre 14 y 28 años van a ir las urnas a elegir a su representante, donde van a tener la posibilidad de votar por representantes juveniles de los partidos o de movimientos sociales juveniles por firmas, o también de los movimientos de participación juvenil”. Es más, para el Jefe de Estado estos comicios son un “un hito histórico en la democracia colombiana” y “se materializa el anhelo de muchos años de los jóvenes de tener una elección popular en las urnas”.

Mecánica

La mecánica de este ejercicio de inclusión política de los jóvenes es sencilla: esos Consejos Municipales que se escogerán el 28 de noviembre van a elegir los Departamentales y estos, a su vez, el Consejo Nacional de Juventud. De acuerdo con la Registraduría, el proceso cuenta con un censo ya depurado cercano a los 11 millones de potenciales votantes. Los jóvenes entre 14 y 17 años no tienen necesidad de hacer una inscripción previa para participar en la jornada electoral, sino que podrán votar en el lugar donde les emitieron su tarjeta de identidad y, si se han trasladado a otro lugar, entran al aplicativo digital y cambian su domicilio electoral. Los que están entre 18 y 28 años ya se encuentran registrados en el censo electoral para poder participar en esta jornada democrática.